KIYOPON... ¿¡LATINOAMERICANO!?

V1.17. LOS ÚLTIMOS PREPARATIVOS.

Volumen 1. Capítulo 17. Los últimos preparativos.

Un nuevo día llegó al país del sol naciente y con eso tuve que salir de la cama para prepararme. Aún falta una hora para el inicio de las clases del día y ya tengo una visita en mi habitación; aunque agradezco que chicas me visiten, no espero que lo hagan tan temprano. Desde ese día en el que me pidió ser su novio falso y en el que comencé a entrenarla, Kei había estado viniendo temprano cada día para ir juntos al gimnasio y hoy no era la excepción.

Hoy, sin embargo era diferente a otros días donde iríamos a hacer cardio, brazos o piernas. Si bien un mes de ejercicio no es suficiente para desarrollar un físico poderoso y mucho menos compensa años de descuido personas, si creo que es suficiente para comenzar a entrenarla en el arte de la pelea; al menos sus conceptos básicos. Sinceramente, tengo muy pocos conocimientos sobre las artes marciales más conocidas en el mundo y que son usadas a diario; no obstante, mi querido exmilitar corrupto y adicto a las apuestas, me enseñó algunas cosas sobre KFM (Keysi Fighting Method), jiu jitsu, Muay Thai, Krav Magá y Capoeira.

Por supuesto, mi especialización es la pelea callejera común, en donde no hay reglas y todo es válido hasta que la otra persona se rinda o fallezca. Aunque, si solo es para defenderte del acoso escolar, siempre que tu acosador no sea un ex criminal buscado por la CIA, cualquier técnica de lucha debería ser buena. Incluso, con un físico un poco desarrollado debería ser suficiente para dejar de ser el objetivo.

Claro está que Kei no tiene ninguna experiencia con esto de la lucha, así que debo enseñarle desde las cosas más básicas. Cosas como la manera de lanzar un golpe sin lastimarse en el intento o el defenderse adecuadamente; no quiero que se lastime al primer derechazo que lance. Nos tomará mucho tiempo alcanzar un nivel decente, pero estoy seguro de que todo valdrá la pena al final.

Volviendo al presente, Kei estaba sentada en la mesa esperando su gran ración de un desayuno preparado con mis propias manos. Por alguna razón, desde que comenzamos a entrenar juntos, la chica ha insistido en desayunar todos los días a mi lado y en mi habitación.

En un principio pensé que se debía a su propia falta de puntos como para comprar una buena comida, pero cuando se ofreció a pagar puntos para los ingredientes del día a día, me di cuenta de que en realidad tiene puntos de sobra. Tal parece que la subestimé un poco y se tomó en serio mi declaración sobre no recibir 100,000 pp cuando lo hice hace ya varias semanas.

Al final terminé por aceptar su compañía. No me molesta para nada tener a una hermosa chica junto a mí tan temprano por la mañana y ciertamente estaba muy acostumbrado a desayunar en compañía de alguien, que por lo general era mi familia. Solo rezo para que Tsubasa no se entere de estas cosas o quien sabe lo que podría sucederle a Kei.

- "Ne, Ne, Kiyotaka-kun, ¿Has pensado en algo para aprobar los exámenes de medio término?" -

Su voz estaba cargada con un toque de ansiedad poco característico en su persona. Ella está igual de preocupada que el resto de nuestros compañeros por lo que pueda ocurrir ese día, teniendo en cuenta que Sae-sensei amenazó con la expulsión a quien no consiguiera una calificación aprobatoria.

No es que Kei fuera tonta por naturaleza ni mucho menos. En muchas ocasiones me ha sorprendido con un gran razonamiento lógico que no todos podrían llevar a cabo en cuestión de segundos, pero sin duda está bastante atrasada en sus estudios.

Cuando la cuestioné sobre esto, trató de hacerse un poco la loca para no dar una mala impresión, pero al final terminó contándome todo. Resulta ser que, debido a todo el acoso escolar que sufrió durante tanto tiempo, no pudo dedicarse al cien a sus estudios. Estaba más preocupada de no ser intimidada con ataques sorpresa que de prestar atención a clases.