cuatro

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Miraba el cielo, era tan lindo, tan perfecto y la luna... La luna era Benjamín, la admiraba, la veía con ojos de amor, la adoraba pero estaba muy lejos de ser solamente mío.

Lo digo por que tiene fans 😭.

Mi celular sonó y era mi hermana llamando, sonreí y conteste la llamada.

— ¡hola guapa! – le digo.

— ¡Erin! – contesta angustiada.

— ¿Qué pasa? – pregunto.

— tienes que volver de inmediato, mi papi se puso muy mal, esta hospitalizado y las esperanzas son muy bajas...

Sentí que me cayo un balde de agua fría encima, me quede en silencio procesando todo lo que había dicho, mi papá mal?.

— ¿Qué le paso? – pregunto.

— tuvo un accidente en el auto.

Finalizo la llamada y corrí hacia mi habitación, tome una maleta y empecé a empacar lo que más podía de ropa y que fuera necesaria.

Tome asiento en la cama y compre mi boleto en línea, estaba desesperada y no pensaba en nada, salí de la nueva casa confundida aun que con la de Múnich por que no me acostumbro a Milán y retome el camino correcto.

— ¡Erin! – me grita Benjamín – ¿Qué pasa? ¿Qué tienes?.

— mi papá... Mi papá está muy mal y tengo que irme a Reino Unido – digo.

— a ver mi amor, tranquila, no te puedes ir así desesperada, vamos a hablar, vamos a llamar de nuevo para saber que paso y nos vamos juntos.

— no puedes, tienes que entrenar – le niego.

— no nena, respira, piensa con cabeza fría, yo te acompañaré pero hagamos lo que te digo, puedo acompañarte y después regresar...

Procese sus palabras y tome asiento en el sofá, Benjamín tomo su celular y empezó a llamar a alguien, nombró a mi hermano y tardaron minutos en la llamada, mientras tenía mis piernas y yo solo empezaba a temblar.

— vida tenemos que irnos a Londres, prepare todo para salir en pocos minutos, tranquila, no te desesperes, haciendo las cosas con apuro solo podemos empeorarlas – me dice y deja un beso en mi frente.

No tenía palabras, estaba siendo una observadora, se levantó y fue hacia el otro piso, luego bajó con una maleta pequeña y luego se fue hacia el estudio, volvió a salir y luego hablo con Susana, tomo mi maleta y fue hacia afuera donde nos esperaba un taxi, subieron las dos maletas y regreso por mi, tomo mi mano y salimos de la casa.

No me podía fijar en el tiempo, en nada ya estábamos abordando el avión, luego de un tiempo empezamos con el vuelo y con unas horas después ya estábamos en nuestro destino, salimos del aeropuerto y nos recibió mi hermano Bran.

— ¿Cómo esta? – le pregunto y me abraza.

— se muere por verte pequeña – responde y toma mis manos – tienes que ser muy fuerte de ahora en adelante.

Las ganas de llorar me invadieron y abrace a Benjamín de inmediato, subimos a la buseta juntos y el chófer se encargo de llevarnos al hospital.

— ¿Cómo fue? – pregunta Benji.

— un auto los invadió en la carretera cuando venía hacia Londres, papi venía conduciendo y perdió pista, se fue hacia el barranco – contesta – es un milagro que hayan podido rescatarlo y que aun esté con vida, aun que lamentablemente las cosas no están bien...

— ¿Y Victoria? — pregunto.

— esta en casa, no sabemos como manejar la situación con ella pero le hará muy bien verte – asentí.

Llegamos al hospital y entramos, me dejaron en la sala de espera mientras Ben y Bran hablaban con una doctora, todos me miraron y me levante a escuchar que sucedía.

— podemos entrar un momento a verlo cariño, ¡vamos! – me dice y asiento.

Seguimos a la doctora, entramos a terapia intensiva, cuando lo vi en su habitación a través de una ventana, su estado me afecto, comencé a llorar sintiendo el mundo encima, verlo así, conectado a millones de cables me dolía y me afectaba hasta lo más profundo de mi corazón, es la vida de mi vida y no podía verlo así.

— todo va a estar mi vida, te lo prometo – me dice dejando un beso en mi mejilla.

— ¡quiero abrazarlo! – digo.

Se fue y luego volvió con una enfermera, tomo mi mano y entramos, le solté inmediatamente y abrace a mi papá dejando un beso en su mejilla, abrazarlo era lo más lindo que me pasaba en la vida, tomar de su mano y verlo aun que me afectaba ver como el tiempo pasaba y el cada vez tenía más edad.

— ¡papito! – susurro.

Después de unos minutos ya estábamos nuevamente en la sala de espera, mi mamá apareció y cuando nos vimos nos abrazamos, la última vez que nos vimos fue en la boda, antes de irme con un dolor inmensamente grande en el corazón aun que también sabía que mi felicidad esta con el gran hombre que tengo a mi lado.

— ¡Camden! – le llamo a mi hermana.

— ¡Erin! – responde y me abraza.

Ojalá fueran otras circunstancias las que unen a la familia, mis hermanos y yo a pesar de ser unidos y mantener una buena relación, también yo era la más lejana por la distancia, siempre estábamos presentes y uno para el otro.

— en la mañana iré a ver a Victoria – digo.

— yo te acompaño – me dice mi cuñada Emma.

— esta bien – respondo.

Oliver y Benjamín se pusieron a conversar, Emma con Camden, mi mamá tomo asiento y yo estaba apoyada en el hombro de Benjamín, me sentía cansada pero no sabía si iba a poder dormir.

𝓘𝓷𝓮𝓯𝓪𝓫𝓵𝓮 ; Benjamín PavardWhere stories live. Discover now