Couple Roll

CAPITULO 86.

GIRLS, GIRLS, GIRLS

Atsushi caminaba por las calles de Yokohama, sus botas altas con un pequeño tacón de 5 cm, una falda color negra y camisa de vestir con botones color blanca, por el clima usaba la camisa sin mangas. Su cinturón, guantes y un lindo listón negro

Llegó hasta la agencia dejando un par de bolsas pesadas — listo Kunikida-san — le llamo a la mujer a su lado.

— Gracias Atsushi. ¿Ya terminaste?

— si, solo

— Atsushiiii — Era su amiga Kenji con su overol y descalza — ayúdame con unas cajas por favor

— si, de acuerdo.

Atsushi llegó a la noche a su hogar, tenía dolor de brazos y hombros, realmente cansada. — Ryu, ya llegue — expresó cansada

La chica delgada de cabello largo y puntas blancas salió de la cocina — Atsushi, ¿porque llegas tan tarde?

Atsushi bostezo — moví muchas cajas y una vaca

— siéntate, hice la cena

Atsushi sonrió y fue a sentarse, Rashomon llegó sirviendo los platos — Gracias Rashomon

Comieron tranquilas y al finalizar, Atsushi se levantó a lavar. Ryunosuke había ido a la sala para poner alguna serie. Cuando Atsushi llegó detrás del mueble inclinándose para tomar a Ryunosuke — Ryuuu, ¿vamos a jugar hoy?

— ¿no estabas cansada?

— no para ti; mi linda mafiosa

Akutagawa sembró una pequeña sonrisa, llamó a Rashomon quien sostuvo a Atsushi. — no me carguen como gato — se quejó

— quizá una gatita en celo — respondió Akutagawa mientras Rashomon dejaba a la joven chica tigre con su entrepierna frente a su rostro

Akutagawa comenzó por molestarse — de nuevo saliste a la ciudad sin un short abajo de la falda

— Ryu no te enojes, es que así es más fresco

— la próxima vez te quemare tus faldas y te daré pantalones

Comenzó a pasar su dedo en la linda ropa interior, color gris. Sabía el punto de Atsushi. Ella adoraba que jugara con su clitoris pero era hora de un castigo

Jugó un poco con sus labios haciendo a la chica incomodarse. Dejaba el dedo presionando sobre la tela y moviendo sus glúteos — Ry-Ryu

— calla, es tu castigo

Rashomon llegó a amordazarla. Tomó también sus muñecas y sus tobillos

Ryunosuke jugaba con sus labios al mismo tiempo que jugaba con sus glúteos

Su ropa interior se metía y salía dándole una sensación de aire extra. Atsushi de ello se quejaba, moria por ser tocada bien — mmg mmmhh

— Lo siento cariño. No te entiendo nada

— mmm...

Akutagawa solo sonrió, le quitó su ropa interior y con ella ató su cabello largo en una sola coleta.

Separó los glúteos de la joven tigre mientras dejaba su lengua entrar en su interior y usaba la punta de su nariz para acariciar su clitoris — ¡mmg!

Mientras su lengua jugaba dentro, decidió meter un par de dedos también provocando a la menor. Atsushi se movía intentando patalear pero Rashomon la retenía

La dejo sobre sus piernas y el resto de su cuerpo sobre el mueble. Su rostro casi quedaba en el suelo.

Con sus brazos tomaba firme su cadera mientras continuaba con su acto. Atsushi no podía moverse más. Su cuerpo estaba lleno de espasmos. Comenzó a gritar más y fue cuando quitó su boca y dejó sus dedos

Comenzó a lamer su clitoris, ligeros mordiscos con sus labios haciendo a Atsushi gritar aún más aunque quedaban ahogados Ryunosuke disfrutaba de escucharlos

Atsushi no pudo más teniendo el primer orgasmo. Rashomon quitó sus amarres dejando a la chica respirar agitada — Te pasaste — se quejó agotada — me provocaste mucho

— Querida. Es solo el inicio

Atsushi trago saliva su novia la había tomado de nuevo, esta vez para quitar botón por botón de la menor — yo también quiero

— ¿si? Adelante

Atsushi se acercó tomando la mejillas de Ryunosuke para besarla y no soltarla

Su beso pasó rápidamente a ser un profundo donde sus lenguas compartían saliva

Entre jalones y tirones, por fin Atsushi le jalo el cabello lo suficiente para quitarla de encima y mirarla, curioso miró su cola de caballo — e-esa es mi

— mi nuevo coletero favorito

Atsushi se puso completamente roja y Akutagawa aprovechó para tirarla sobre el sofá

Quitó del camino toda ropa, y comenzó a acariciar sus pezones, sus pechos regulares, no eran muy grandes pero tampoco pequeños. Eran del tamaño perfecto para entrar en su mano. Besaba su cuello mientras su cuerpo le impedía cerrar las piernas — Ryu, Ryu detente. Mi cuerpo está sensible

— eso es lo que más me gusta de ti

Akutagawa volvió a besarla mientras Rashomon volvía a atarla — vamos a la cama mi chica tigre

— ¡S-Si!

Fueron entre risas y besos. La noche sería cálida y corta

...
Habrá un corto especial donde todos serán chicas, espero lo disfruten
La siguiente pareja será

¡Gracias por leer!