CAPÍTULO 6: DICLOPE.

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DARGAN

—¿Dónde está Lion?—la pregunta de Nix se escuchaba tan lejana y distante —Dargan.

Mi cabeza se sentía en un lugar muy distinto de lo que fuera la realidad en la que estaba. No podía dejar de ver los ojos de Hestia en mi cabeza.

Hestia..., ella estaba aquí, había vuelto...

Sentía como si flotara dentro de un mundo paralelo, y tenía miedo de ello, tenía miedo de despertar en cualquier momento y pensar que nada de esto era real, que ella no era real, que tan solo era un ilusión y una mentira de mi mente.

Pero el ver la cara de todos a mi alrededor solo me confirmaba que todo esto era cierto. Malika estaba muerta, y Lion se mantenia alejado de toda esta situación perdido en la locura, lo sabía porque yo pasé exactamente lo mismo.

—Déjalo solo Nix—le hablé a mi hermana finalmente—. no quiere ver a nadie.

Nix tensó la mandíbula con fuerza viéndome con rabia en sus ojos oscuros.
Estaba molesta, le molestaba el hecho de que Malika estuviera muerta más de lo que le gustaría admitir, ya que ella había sido como una madre para Nix en tan poco tiempo.

—Lo siento—le dije—. se que llegaste a conectar con ella.

Mis palabras hicieron que se relajara un poco al notar su evidencia en su rostro.

—No—respondió fingiendo que no le importaba—, no lo sientes, y sabes porqué...—se levantó—Porqué a ti no te importa nada más allá de que ella esté aquí, para bien o para mal eso a ti no te interesa, no te importa que se lleve a cualquiera por encima para mantenerse aun viva, porque tú harías incluso cosas mucho peores para que ella se mantenga así.

El iris de sus ojos oscuros destellaron un tinte violeta que me hizo recordar a los de mi madre.

—Tú me importas Nix, eres mi familia, mi hermana...

Traté de tomar su mano pero ella se apartó.

—Sabes nunca me metí en el lío que siempre mantuviste con ella, pero si sigues dentro de ese circulo te matará tan fácilmente como lo hizo con ella—Nix siquiera podia mencionar el nombre de Malika—. No la subestimes Dargan, no trates de traerla de vuelta con un amor que yo no existe entre ambos—sus palabras lograron que me pusiera rigido—. Ella murió...

—No—la corté—, ella está aquí...

—Tan sólo debes quedarte unos segundos y verla a los ojos para darte cuenta de toda la muerte que vive detrás de ella—sus manos tomaron con fuerza mi rostro tratando de retener mi intento de negación—, nos matará a todos si no hacemos algo...

Me quedé quieto por un segundo sopesando lo que trataba de decirme.

—¿Qué es lo que intentas decir Nix?—pregunté con la rabia ya fluyendo por mi cabeza.

Ella se apartó sosteniendo mi mirada y desee que no saliera de su boca lo que supuse suponia.

—No tiene caso que esperes algo que no llegará y que en cambio solo nos destruirá. Hestia nos matará primero si no la atacamos antes...

Mi sangre se calentó como gasolina en segundos, mientras podía sentir como mi cara empezaba a desfigurarse completamente, mientras comenzaba a atraer ese lado maligno que siempre se ponía a la defensiva.

Nix lo notó y optó por su segunda cara, haciendo que ambos nos convirtieramos en bestias monstruosas que llamaban la atención de las personas que iban y venían y no de forma positiva.

DIOSES, BRUJAS Y TRONOS (Llamas de oscuridad) PAUSADATempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang