CAPÍTULO 8: MIS REGLAS.

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DARGAN

Estaba siendo muy paciente.

Estaba dejando mi impulsividad y mi capricho de lado para esperar al momento exacto para hablar y acercarme a ella.

Era consciente de la barrera que había entre ambos, me había quedado claro con la última vez que volé entre medio de esa guerra ignorando todo y cortando su paso.

Quería que ella sintiera esa misma magnitud de nuestra conexión, quería que no viera a nada, ni a nadie más al rededor que a ambos...

Sin embargo, antes de que pudiera decir algo más que su nombre la única respuesta que obtuve de su parte fué, "muévete".

Y ahora estaba aquí. Dando vueltas en círculo mientras ella permanecía dentro de una sala a puerta cerrada con toda su familia, hablando de que sabe que cosa.

Mi curiosidad picaba tanto como la de Alana una vez que la había encontrado con la oreja pegada a una puerta donde Hades y Hera mantenían una conversación discreta.

El recuerdo de la pelea de Hades y Hestia hace no mucho me llenaba de orgullo. No pude evitar sonreír al ver la cara de Hades que proyectaba como todo ahora empezaría a irsele a la mierda, con Hestia al mando, esa familia no dudaría mucho si no hacían lo que ella deseara.

Luego de que Hestia se levantara invicta ante todos con Hades aún a sus pies, había dejado claro todo.

—A partir de ahora tenemos nuevas reglas—habló para todos—Y quien se niegue a obedecerlas debe saber que la muerte no es siquiera un castigo que esté a mi nivel de crueldad.

No pude evitar embocar una sonrisa al ver la cara llena de rabia de cada uno, y la forma en que debian agachar la cabeza ante su superior.

Hades sin duda ya no estaba en este juego, y para Hestia sería muy fácil deshacerse de cada uno. Incluso de mi si asi lo quisiera.

La sonrisa se me borró de la cara.

No era necesario que Hestia hiciera esto sola, podríamos estar juntos en esto, quemar el mundo en llamas y oscuridad tomados de las manos.

Me sentía como un cachorro a la espera de que su amo le diera la cena, a la espera de que Hestia me dijera si me enviaría a la mierda o ambos nos iríamos a la mierda, pero juntos.

Le mentí, la lastimé y herí, pero joder..., todos aquí lo hicimos.

Seguí dando vueltas sin apartar mi vista de la puerta a mi frente. Podría tumbarla y entrar a las malas, no me tomaría más que unos cuantos segundos tomar a Hestia y llevármela volando de aquí.

Pero no sé de dónde salía la estúpida necesidad de querer las cosas bien ahora. Fuí un animal muchas veces, llevándome y arrebatando todo lo que quería y de las manos de quien fuera, aún lo era, pero trataba de mejorar por ella.

¿Podría lárgarme y olvidarme de esto?

Por supuesto.

¿Pero así lo quería?

No.

Hestia sabia que tendríamos una conversación tarde o temprano, no podría evitarme por siempre y yo la buscaria día y noche hasta no sentir la humedad de sus labios puestos en los míos, solo una vez más.

Estaría dispuesto de volver al infierno sólo por sentir sus manos sobre mi. Su toque era lo único qué anhelaba...

—¿Dargan?

DIOSES, BRUJAS Y TRONOS (Llamas de oscuridad) PAUSADAWhere stories live. Discover now