27. Piezas rotas

1.3K 183 115
                                    

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


Caos 


My dear, ¿dónde estás?

My dear, ¿por qué lo hiciste?

My dear, ¿cuándo vendrás?

My dear, por favor, necesito que vuelvas.

Había pasado mucho tiempo desde esa noche, pero no lo suficiente para que alguna de las partes implicadas la olvidase, no al menos de manera inconsciente. Era un viejo recuerdo, y a la vez, uno tan reciente que se sentía en cada respiración, en cada mirada y en cada sueño.

Estaba tan presente en nuestra vida que considerarlo pasado resultaba complicado.

Tan complicado cómo olvidarla.

Tan complicado cómo mantenerse alejado de ella.

Tan complicado cómo no amarla.

Lo intenté en muchas ocasiones y en ninguna lo conseguí. Algunos lo habrían llamado "maldición", otros tantos lo considerarían una "tortura eterna", pero a mí me gustaba pensar que era un "milagro". Ese milagro que un día cualquiera decidió bajar las escaleras del edificio de dormitorios, embarcándose por un camino oscuro, insólito y polvoriento hasta encontrar la puerta al subterráneo, una de tantas que había, dando en el punto exacto para que se abriese.

¿Coincidencia? No. Eso era producto del destino, uno tan corrupto que prefirió hacernos creer que todo estaba bien, que todo era perfecto, antes de golpearnos con toda la fuerza de su poder.

Tendría que haber aprendido la lección con el primer golpe.

También con el segundo, pero ni con el tercero me lo esperé.

Emma y Cristian me hechizaron con sus besos, hicieron que me acomodara en una burbuja inestable que nos ocultaba del mundo, en las profundidades del subterráneo, pensando que esta nunca se rompería.

Error.

La burbuja explotó en mi cara.

Y para mi sorpresa, Emma fue la causa de ello.

Su mano ejecutó el golpe, pero alguien más dictó sus movimientos.

No estuvo sola.

Se había dejado engatusar por las preocupaciones de otros para hacerlo.

De ahí mi sorpresa cuando unos años más tarde, sin quererlo ni desearlo, Carmen se presentó frente a la verja del nuevo King's Collage, luciendo completamente diferente, llamándose completamente distinto y aspirando a cosas completamente inexplicables.

La sabionda mantuvo su disfraz intacto por semanas, nada sorprendente para ser ella, la más inteligente y capaz de todo el grupo, pero pronto se acomodó a su día a día. Y confiarse nunca había sido el mejor movimiento.

CaosWhere stories live. Discover now