Capítulo 58: El significado del nombre

262 44 143
                                    

«El juego finalizará en dos ardid, el primer movimiento desemboca en la falla del plan

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

«El juego finalizará en dos ardid, el primer movimiento desemboca en la falla del plan. ¿El segundo? El segundo está en tus manos, hielo»

Cuentos de la Muerte / Rapsoda Wingrave.

Ewan se hizo cargo de todo.

Yo ni siquiera era capaz dar un paso, o decir algo. Desde que papá murió no pude decir nada. Eva relató cada hecho, excepto que mi madre estuvo presente. Quizás pensó que era algo demasiado privado o simplemente me dio la oportunidad de que yo lo aclarara, pero no pude abrir la boca.

Poco antes de que llegara Ewan con sus hombres, Ela volvió al bosque.

No me di cuenta que mi ropa estaba cubierta con la sangre de papá, ni que ya no estaba sosteniendo su mano, sino que estaba sentada en el auto de Ewan de camino a casa.

Una casa que jamás volvería a recibir a papá. Una casa que jamás volvería a ser la misma sin él.

Cuando llegamos y vi a mis hermanos, ellos se asustaron al ver mi ropa. Lyra se acercó a mí y Leo me miró desde un rincón mientras abría y cerraba las manos. Simone y su padre me miraban desconsolados y recordé que Fiona también estaba muerta.

Killian y Abel fueron los primeros en acercarse, el menor abrazó con fuerza a Eva y el mayor se quitó las gafas y tomó mi mano.

—¿Qué pasa? —susurró Lyra mirándonos a todos—. ¿Por qué te escapaste del hospital? ¡Ese hombre volvió a atacar y yo...! —dijo mientras me miraba descolocada—. Papá salió, dijo que no estaría tranquilo sin saber de ti y... ¿Qué pasa, Luna? —la respuesta estaba atorada en mi garganta. No podía hablar, solo sentí un nudo instalado allí que no me dejaba respirar. Ewan carraspeó, me dio un beso en la sien y se acercó a mi hermana.

—Papá no volverá —susurró Leo respirando de manera agitada. Sus ojos rojos estaban llenos de lágrimas, pero que no derramaba.

—¿Cómo que no volverá? —sonrió Lyra—. Solo salió, como lo hace siempre. Él sí volverá.

—Papá ya no respira —insistió Leo.

—¡No! ¡Cállate! —Lyra nos miró a todos—. ¿Por qué no lo van a buscar? —miró a Ewan—. ¿Qué haces aquí? ¿Por qué no vas tú? —lo empujó, pero ni siquiera lo movió un centímetro. Él apoyó las manos sobre los hombros de mi hermana.

—Lyra...

—¿Qué? —lloró ella mientras negaba—. Es imposible...

—Eros —La voz de Ewan se quebró, visiblemente emocionado—. Lo siento mucho, Lyra, pero tu padre...

—No... —lo volvió a empujar con rabia—. Me estás mintiendo, pero no entiendo porqué lo haces. Tú jamás me mentirías... —señaló la puerta—. Él salió, pero volverá dentro de nada. Me preocupa que haya salido sin una chaqueta, debe tener frío...

La casa del bosque [COMPLETA]Where stories live. Discover now