[1] Rechazar el amor del Ex marido

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Al enterarse del encuentro de su preciosa hija con Ruan Tian, la madre Zhou salió de la habitación de Zhou Xiaoqiao y buscó una habitación insonorizada para llamar a Ruan Tian.

En cuanto la llamada se conectó, no esperó y gritó inmediatamente con rabia: "¡¿Qué le has dicho a tu hermana?! ¡Se puso enferma y tuvo fiebre cuando volvió de verte! Te he dicho muchas veces que trates mejor a tu hermana, ¿por qué nunca me escuchas?"

Ruan Tian acababa de despertarse, así que su voz era confusa y nasal, "Ah, ¿está enferma otra vez? ¿Qué tiene que ver eso conmigo?"

Madre Zhou estaba tan enfadada que sentía que su pecho iba a explotar: "¿Qué tipo de tono estás usando ahora? Ven a casa esta noche para ver bien a tu hermana, ¡sólo tienes que ver lo mucho que ha sufrido por tu culpa!"

Después de colgar el teléfono, Ruan Tian reflexionó seriamente sobre el asunto, y finalmente llegó a la conclusión de que esta vez tendría que volver.

Tomó prestado el Maserati de Jiang Lili, pisó a fondo el acelerador y condujo hasta la puerta principal de la residencia Zhou antes de entrar.

La familia Zhou y la familia Shen no vivían muy lejos, y parecía que la madre de Shen Shu había venido a visitarla cuando se enteró de que Zhou Xiaoqiao estaba enferma. Actualmente, estaba sentada en la sala de estar de la familia Zhou, y detrás de ella, Shen Shu también había venido. Sin embargo, el rostro de Shen Shu estaba apagado e inexpresivo, como si fuera un extraño el que estuviera enfermo en lugar de su preciada luz de luna blanca.

Ruan Tian los miró brevemente pero no les dio más importancia.

Como quería la Madre Zhou, subió a visitar a Zhou Xiaoqiao.

Después de mirarla, lo confirmó: En, estaba viviendo bien como siempre.

Después de la cena, Madre Zhou comenzó a reprender a Ruan Tian a pesar de todos los forasteros presentes: "Sabes que tu hermana está mal de salud, ¿pero la dejas estar de pie en el viento frío frente al hotel? ¿No estás tratando de matarla, ah?".

Ruan Tian se limitó a juguetear con sus dedos con indiferencia.

La madre Zhou la señaló y dijo enfadada: "¿Por qué no aprendes nunca?"

Ruan Tian levantó la cabeza y se encontró con los ojos de la otra mujer: "No es que no aprenda. Es que, a tus ojos, todo lo que hago está mal".

"Sabes, siempre me preguntaba por qué tú, alguien que obviamente no me quiere en absoluto, gastabas todo ese esfuerzo en buscarme por todas partes para poder llevarme a casa".

"Pero desde entonces me he dado cuenta. Todo fue para que te tranquilizaras. Me perdiste cuando era un bebé y eso te pesó en la conciencia, así que al encontrarme y llevarme de vuelta puedes sentir que has compensado tu error. Así ya no tienes que sentirte culpable".

La madre Zhou nunca esperó que Ruan Tian hablara de repente de sus motivos egoístas con tanta franqueza.

De hecho, después de haber perdido a su bebé tuvo pesadillas durante muchos años, pero después de encontrar a la niña y traerla de vuelta, nunca más tuvo pesadillas.

Gracias a eso, la pequeña culpa que solía sentir había desaparecido hace tiempo.

La voz de Ruan Tian era firme. Nunca lloraba delante de sus padres, ni delante de Shen Shu, así que estaba muy tranquila. De todos modos, eran cosas que había querido decir durante mucho tiempo.

"A tus ojos, nunca podré hacer nada mejor que Zhou Xiaoqiao, y sientes que porque me has traído de vuelta a la familia Zhou debo agradecértelo".

"Antes de cumplir los cinco años, viví en muchos lugares diferentes. Iba de un lado a otro y me quedaba con parejas que aún no tenían hijos, y cuando por fin tenían un hijo propio me desechaban al instante."

"Al final, para comer, no tuve más remedio que recoger la basura. Cada día era una lucha por sobrevivir".

Todavía recordaba un día, cuando era niña, en el que se encontró en la puerta del parque de atracciones y vio a todo tipo de madres felices con sus hijos en brazos, llevándolos a jugar y comprándoles caramelos. En ese momento, soñó que tal vez un día encontraría a su propia madre y que tal vez también experimentaría esa dulzura...

Por eso, cuando la Madre Zhou la encontró y le pidió que la trajera de vuelta, no dudó ni un momento en seguirla hasta la residencia Zhou.

La cara de Madre Zhou cambió varias veces, y por una vez pudo ver el resentimiento en los ojos de Ruan Tian.

Al lado, la expresión de Shen Shu también se había vuelto oscura. Nunca había sabido nada de estas cosas sobre Ruan Tian, ni la había oído mencionar a nadie antes.

Madre Zhou retrocedió unos pasos, sintiendo una sensación de pánico en su corazón.

Ruan Tian dijo: "Estos días, siento que tal vez ser una huérfana sin madre es realmente mejor".

Estas palabras fueron como un cuchillo clavado en el pecho de Madre Zhou.

Que su hija dijera esto, no pudo aceptarlo por un momento.

Sus rodillas se volvieron débiles, y apenas pudo mantenerse erguida sujetando la esquina de la mesa.

Después de lanzar esas duras palabras, Ruan Tian se fue.

Su único pensamiento fue que, en el futuro, esa gente en línea definitivamente la regañaría con "Tu madre está muerta" como de costumbre.

Pero ahora podía responder descaradamente: "¡No tengo madre!