Clases e invitaciones.

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Yoongi y Jimin se encontraban solos en uno de los salones de la facultad de medicina. Le habían encargado a Yoongi dictar una clase como profesor suplente debido a que el profesor asignado se ausentaría unos días. Al ser el mejor estudiante de su curso, Yoongi había sido recomendado por el profesor para que lo reemplazara.

-¿A qué hora saldrás de la clase, Yoonie?-preguntó Jimin con un puchero.

-A las 5 termina, amor-respondió acriciando sus mejillas.

-¿Volvemos juntos a casa?

-Si me esperas hasta esa hora entonces sí, mi vida, sino puedes volver antes.

-Negó-Estaré con Taemin hyung terminando un trabajo.

-De acuerdo, entonces a las 5 nos vemos.

-Asintió-Te amo, Yoonie.

-Sonrió-Yo a ti, cariño-besó su mejilla-Ahora vete antes de que lleguen mis estudiantes.

-Rió-"Tus estudiantes", amo el concepto de Yoonie profesor.

-Sonrió-Y yo amo el concepto de Minnie obediente, así que anda.

-¿Y si no? ¿Qué hará conmigo, profesor?-dijo con una sonrisa coqueta.

-No me provoques ahora, cariño-dijo con una sonrisa.

-No estoy haciendo nada-respondió inocente.

-Sé un buen chico y obedece.

-De acuerdo, pero con una condición.

-¿Qué desea mi niño mimado?

-Sonrió-Beso.

Yoongi no pudo resistirse ante su pequeño novio. Era demasiado adorable, por lo que accedió y le dio un dulce y duradero beso.

-Ahora obedece, bebé-susurró sobre sus labios.

-Ya quiero que sean las 5 para volver contigo a casa.

-Sonrió-¿Crees poder resistir hasta esa hora?-preguntó acariciando suavemente su cuello.

-¿Tú crees poder?-mordió suavemente el labio del mayor-Suerte en tu clase, Yoonie-se alejó.

-Park Jimin.

-Sonrió-Te veo a las 5, Yoonie-se despidió.

El menor salió del salón y Yoongi trató de calmarse. Jimin siempre tendría mucho poder sobre él.

-Park Jimin, Park Jimin-dijo con una sonrisa.

Terminó de acomodar sus libros y documentos y unos minutos después comenzaron a entrar los estudiantes de primer ciclo, a quienes les parecía extraño no ver al profesor de siempre. Saludaban a Yoongi con respeto, pero sus rostros mostraban lo confundidos que estaban.
Cuando dieron exactamente las 2 con 10 minutos, y Yoongi notó que el salón estaba casi lleno, se puso de pie y se presentó.

-Buenas tardes a todos, mi nombre es Min Yoongi y debido a que el profesor Yang no podrá dictar clases, yo seré su profesor durante esta semana-sonrió- Espero llevarme bien con todos y conocerlos aunque no tengamos mucho tiempo. Veo algunos rostros conocidos, pero para aquellos que no me conocen, soy estudiante de último año de la carrera, así que al finalizar esta semana de todas formas podrán recurrir a mí si necesitan ayuda con sus clases o proyectos. Y bueno, no perdamos más tiempo, comencemos con la clase.

Para Yoongi fue muy divertido ser profesor, los estudiantes eran muy participativos y le prestaban atención. No fue difícil manejarlos, así que la clase fluyó muy bien y hasta pudo bromear con ellos y hacerlos reír. De esa manera recuperaba su atención cuando ellos se distraían o se aburrían por lo pesado del tema que les tocaba ver esa clase.
Continuó dictando su clase, pero no pudo evitar sentirse incómodo al notar que un grupo de chicas lo observaba fijamente y le sonreían para después conversar entre ellas.
Hizo lo posible por ignorarlas y se sintió aliviado cuando finalmente dieron las 5 y pudo concluir la sesión. Los alumnos comenzaron a guardar sus cosas y después de despedirse, salieron del salón, a excepción de una chica, que lastimosamente para Yoongi, pertenecía al grupito de chicas que lo hizo sentir incómodo durante la clase.

Golosinas «y.m.»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora