Semilla

1.1K 141 62
                                    

Cain
Un bebé.

Intento guardar la compostura para que Cara no se desmorone en mis brazos, no ha parado de llorar desde hace horas. Puedo sentir mi camisa empapada por sus lágrimas y no me he quejado de su insesante agarre en mi brazo. Pero no puedo reaccionar. No sé qué decir.

Luego de todo lo que pasamos, no importa cuánto quiera esto, de ahora en adelante ella formará su familia, y no será junto a mí. Me trago el amargo sabor de la derrota e intento suprimir mis emociones. No es momento de quebrarme, ella me necesita.

—Cara...

—No.

—Escucha—<<sexi>>—, tienes que hablar con mi hermano. Él no va a echarse para atrás James, lo sabes.

Se queda en silencio un par de minutos, puedo oír su respiración agitada. Necesita procesarlo, ahora posee una semilla que se empañara en cuidar, es una sobreprotectora de naturaleza.

—Cain yo...necesito ir al médico—se apresura a levantarse y tomar su chaqueta desesperadamente.

—¿Pasa algo?

—El accidente...yo...¿Y si le pasó algo?

No me lo pienso dos veces cuando tomo las llaves de mi motocicleta y tomo su mano para abrirme paso a la salida. Cuando estoy a punto de encenderla me detengo ansioso.

—¿Qué pasa? —pregunta alarmada.

—Es que esto es muy peligroso, debemos ir en auto—digo firme.

Me bajo y luego la ayudo también para que no se caiga. Cuando iba a tomar las llaves de su coche pude oír el rugido del motor del auto de Abel, se estacionó apresuradamente frente a nosotros. Distingo su cabellera rubia a unos metros observandonos confundido.

—¿Qué le hiciste? —se posa frente a mí bastante molesto.

—No es momento de pelear hermano, debes...

—¡Me dejaste tirado Cara! ¡Por él! —en el momento en que ella se esconde detrás de mí noto como me tenso automáticamente para defenderla..

—¡Callate idiota! No es momento.

—Tal vez debería ser como él, iré a acostarme con otra y luego vendré a arrastrarme como perro para que me disculpes.

Mi mano se cierra al instante preparado para azotar lo con un puñetazo, pero noto como su pequeña mano se sobrepone en la mía y al segundo vuelvo a retomar el autocontrol.

—Abel—por primera vez habla y me parece impactante la seguridad que emana su voz—, vamos al hospital. Así que por favor déjanos pasar.

—¿Al hospital? ¿Qué pasa?

Le toma unos minutos responder y veo como esta vez su voz no se escucha tan dura como antes.

—Estoy embarazada.

A Abel se le descompone el rostro en instantes, veo como su cerebro máquina una solución inmediata, pero cuando no la obtiene simplemente se frustra. Nos ve a ambos con algo que no puedo deducir, se voltea y abre la puerta del copiloto invitando a Cara a subir en silencio, ella acepta la invitación mientras que yo sigo parado frente a ellos, cuando Abel sube al auto y no arranca deduzco que quiere que suba con ellos.

Ya en el auto me aseguro que tenga puesto el cinturón de seguridad y me voy echo un puto manojo de nervios. Pero si de algo estoy seguro, es que mi deber por protegerla no se ha terminado, es más, ahora se duplicó.

Cara
Me retuerzo las manos de los nervios. Ya sé, es el típico "no estoy preparada para ser madre". No importa cuántas veces lea que la protagonista de un libro se embarace repentinamente y forme su familia feliz de la nada. Esto es la realidad, y en la realidad no existen familias disfuncionales que intentan permanecer unidas.

Neutral [+18] [COMPLETA] [LIBRO #1 BILOGIA DECISIONES]Where stories live. Discover now