Navidad y juguetes.

Start from the beginning
                                    

-Minnie...

-Porfis, hyung, prometo que este si es el último.

-Amor...

-Yoonie-pidió como un niño pequeño-Es que se parece mucho a ti-dijo con un sonrojo-Es muy adorable.

-Rió-No se parece a mí, pequeño.

-Sí se parece, mira-lo mostró-Tienen los mismo ojos y ambos son extremadamente bonitos y adorables.

-Minnie...

-Porfis hyung-hizo un puchero-Solo este y ya.

-Suspiró-Sabes que no puedo resistirme a ti, amor.

-Sonrió-Yoonie es el mejor-besó su mejilla.

-Cuando volvamos a casa tendrás que pagarme con besos, ni creas que esto te saldrá gratis.

-Rió-Te daré todos los besos que quieras, Yoonie.

Ambos caminaron hacia la caja y pagaron los tres productos para después salir de la tienda con una bolsa gigante que Yoongi intentaba no arrastrar en el piso.

-Rió-Hyungie parece santa.

-¡Yah!

-Te daré muchas galletas para que te crezca la pancita y puedas ser santa.

-Imposible, yo siempre seré fitness.

-Rió-Ni si quiera ejercitas, Yoonie.

-¡Yah! Que no me veas ejercitar no significa que no lo haga, ¿de acuerdo?-dijo ofendido.

-Sonrió-Perdón, Min fitness Yoongi, fue mi error.

-Rió-Eres un tonto, Minnie.

-No más tontito que hyung-dijo entrelazando su mano con la del mayor.

-Te amo mucho, ¿lo sabías?

-Asintió-Yoonie siempre me lo dice.

-Pues te lo seguiré diciendo por el resto de tu vida, bebé-besó su mano.

-Rió-¿Volvemos a casa ya?

-Asintió-De todas formas no podemos seguir comprando si tenemos a este oso gigante con nosotros, mañana volvemos a comprar las cosas para la cena.

-Está bien, hyung, ¿mamá y papá vendrán a celebrar con nosotros mañana?

-Sí, me dijeron que llegarán mañana a la hora de almuerzo.

-Sonrió-Será una hermosa navidad, Yoonie.

-Sí, amor, porque tendré a mi familia conmigo, mis padres y mi futuro esposo, no puedo pedir nada más.

-Se sonrojó-Yoonie.

-Rió-Vamos a casa, mi vida.







































-Suspiró-Este tonto oso pesa mucho, Minnie-se quejó el mayor dejando el oso sobre la cama.

-Yoonie-hizo un puchero-No le digas tonto-abrazó el peluche.

-Sonrió-Ven, amor.

Jimin soltó el osito y volteó a mirar a su novio, quien le sonreía y tenía sus brazos abiertos esperando a que se acercara. Jimin corrió hacia él y lo abrazó, Yoongi apretó el pequeño cuerpo con mucha fuerza y después lo cargó para sentarse con él sobre el sofá de su habitación, quedando Jimin sentado sobre el regazo de su novio.

-Yoonie-dijo acariciando sus mejillas.

-Eres lo único que necesito para ser feliz, amor, solo una sonrisa tuya es suficiente para hacer que mi existencia sea lo más hermoso que tengo.

Golosinas «y.m.»Where stories live. Discover now