Una vida siendo omega no siempre es de agradecer, menos aun cuando estas en las fuerzas militares de Japón.
Naruto un omega capacitado, decide entrar de forma voluntaria a un campamento donde su vida sera un infierno, solo para demostrar que los ome...
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Vio a través de sus ojos claros como la luz del sol se asomaba tímida detrás de las montañas, una vista que ciertamente había extrañado mucho, sus pulmones se expandieron oliendo el sutil aroma a tierra mojada y musgo, sus oídos se deleitaron con el suave tintineo de los insectos y de los murmullos cálidos de las aves al volar por ahí, su felino interno se sintió juguetón queriendo salir a flote, acariciar con su pelaje las raíces y las plantas a su alrededor, quería hundir sus patas en la tierra y ronronear al llenarse de ella, su cuerpo vibró, nunca se sintió tan a fin a un lugar como ahora, sonrió grande estirando la mano queriendo tocar un rayo de sol que se filtraba por las ramas de lo árboles, parpadeó gustoso sintiendo los brazos toscos de Sasuke rodear su cintura desde atrás.
— ¿Qué tanto ves? — preguntó.
— Extrañé esto— fue sincero recostando la cabeza en su pecho —No fueron tantos días pero extrañé como me hace sentir el bosque.
— Eres un alma libre es por eso que te gusta tanto, después de estar mucho tiempo aquí aprendes cada rincón del lugar y lo sientes como tuyo, a todos nos pasó.
— Me alegra haber vuelto por segunda vez.
Sasuke sonrió viendo el suave rubor en las mejillas canelas ¿Acaso Naruto se había vuelto más bello después de ser enlazado? Su alfa estaba inquieto, no podía mantener sus manos lejos del omega, verlo tan radiante le hacía un contraste de sentimientos en el pecho, por un lado estaba maravillado al ver a su omega tan bonito y vivo pero por otro estaba retorciéndose por no querer que alguien más lo viera y se acercara, es que solo la idea le mataba, no podía fallarle a Itachi, no cuando se trataba de la protección de su omega, siendo el alfa que era su hermano, había permitido el regreso de ambos al campamento casi de inmediato, ahora no sabía si eso había sido la mejor idea.
Naruto sintió el agarre en su cintura tensarse, se preguntó también la misma duda que Sasuke tenía en la cabeza ¿No habría sido mejor haberse quedado en la cama con ambos alfas en vez de haber regresado? Estaba un poco nervioso, sabía que el espeso aire del bosque todavía no le dejaba identificar a todos los alfas presentes y no sabía como su felino iba a reaccionar a otros alfas, ni mucho menos como Sasuke iba a reaccionar a otros.
— Crees que...
No pudo terminar siquiera de formular la idea cuando vio a Sai venir hacia ellos, quizá a ayudarlos con el equipaje, parecía muy feliz de verlos pero un solo gruñido de Sasuke fue la clara amenaza de que no se acercara mucho mas que eso, Sai los vio por un largo rato y no fue sorpresa al darse cuenta que habían formado un lazo, el alfa tenía sujetado con fuerza al omega y este se resguardaba en el pecho de Sasuke, no era tonto, sonrió un poco sintiendo un hueco en el estomago sin saber muy bien la razón, se hizo para atrás respetando, Naruto vio el suave movimiento de Sai y como este se retiraba, parpadeó saliendo del pecho de Sasuke para verlo bien, el picor que tenía en su mordida lo había hecho pensar que Sai era una amenaza pero la verdad era que los sentimientos de Sasuke estaban al tope y eso se lo transmitía bajo su unión.
