L A A P U E S T A

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Estaba feliz, pero totalmente frustrado. Después de aquel forzado abrazo, siento un alivio enorme corriendo por sus venas, se sintió acompañado y de cierto punto, querido. Sabia que ella no había querido responderle el abrazo por serle fiel a sus decisiones, pero vio su expresión al separarse; nadie le quita dela cabeza que ella necesitaba el abrazo tanto como él.

El alivio no le duró más allá de lo que quedaba del dia; al terminar su jornada estudiantil, a eso delas 10 p.m. le correspondía ir a la sala de menesteres a probar nuevamente sus capacidades para arreglar un jodido armario.

¿Porque no puede ser un abrazo diario?, así podría volver a abrazarla cuando se sintiera frustrado y olvidar sus problemas. Todo se había ido a la mierda, aquella felicidad que sintió al tenerla entre sus brazos nuevamente se evaporó y ahí estaba él, sentado en el piso de la sala multipropósito en medio de una crisis de pánico, ¿buen panorama para terminar un día, no creen?.

Entre tanto el tenía una ya común crisis de pánico, ella estaba en medio de su habitación intentando reconstruir sus barreras, mentalizarse para que aquello no significarse nada. No podía caer nuevamente en la tentación, no podía darse el lujo de pensar en volver con el.

No podían.

—¿Estas bien?— Hermione entraba a su habitación con una bandeja que por lo que se veía, era un filete con arroz.

—Si, claro— no podía dejar que su nerviosismo de que supieran de aquel abrazo la delatara, nadie podía enterarse.

—No fuiste siquiera a buscar tu cena, ¿muchos deberes?— como todos sabían, prefería comer fuera del Comedor por estudiar, cuando solo era para no toparse siquiera con la mirada de el. Hermione dejó la bandeja en el buró de la pelirroja.

—No, ya estoy desocupada por hoy— mordió su filete, estaba hambrienta.

—Y entonces, ¿en qué piensas?. No me mires como si estuviese loca, eres mi mejor amiga y te conozco.

—¿Tan obvia soy?.

—Así es, ahora.. cuenta.

—No me retes.. pero el me abrazo.

—¿Eeel.. Malfoy?— ella se mordió el labio de nerviosismo.

—Si.. ¡pero te juro que yo no le respondí!

—¿Pero cómo?, es decir..  el solo vino y te abrazo, ¿o hubo algo que no me estés diciendo?

—Osea.. hubo una pequeña conversación, nada más. Nada importante.

—Créeme, si te tiene pensativa es importante. ¿Pero qué harás?

—Nada.. es decir, olvidarlo. No puedo darme el lujo de darle importancia, terminaré mal.

—Deja ver si entendí..  ¿lo dejarás pasar?, ¿¡tú!?, la persona más terca del mundo..— se burló.

—Exacto, solo fue un arrebato sin importancia. Joder que rico esta esto— se llevo un pedazo de filete a la boca, cambiando tema.

(....)

Al día siguiente, Ginny se encontraba nuevamente al igual que el día siguiente a la ruptura, deshecha. No por pena, si no por falta de sueño, se desveló sacando la vuelta sobre aquello.

Y decidió lo de un principio.

Entro al comedor con rapidez, tenía clase de aritmancia y necesitaba llegar antes para hablar con la profesora Vector sobre un trabajo grupal que prefería hacer sola ya que esa clase ma compartía con los Slytherin, y el grupo era mitad leones mitad serpientes.