L A A P U E S T A

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Y otro año daba inicio en Hogwarts colegio de magia y hechicería en Londres.

Ginny entraba en una etapa bastante importante en su vida, su primer amor, aquel que tanto la marcó, le enseñó infinidad de cosas y tuvo un real significado, había creado distintos portales en ella. Estaba más enfocada en si misma.

Luego de aquellas primeras duras semanas luego de la ruptura, luego de que Harry y Hermione llegasen a pasar las vacaciones con ellos, en cierto punto tuvo un consuelo junto al azabache. Si bien, la pérdida del rubio en su vida no fue como la muerte de Sirius, ambas fueron perdidas al fin y al cabo por lo cual se entendían.

Hermione tuvo cierta culpabilidad de encontrar el lado aburrido de las cosas, solo se sentaba a su lado a recordarle el porque estaba leyendo y porque debía hacer otras cosas. Increíblemente funcionó, prefería estar fuera en su patio guardando las gallinas en el gallinero a escuchar los discursos de Hermione sobre el porque fue buena decisión haber terminado con el.

¿Cómo no entendía que en aquel momento de su vida solo necesitaba dejar de pensar en el?, no recordar que terminaron. Lógica.

Pero bueno, el verano después de aquellas tormentosas semanas se basó en un verano de adolescentes normales. Quidditch todo el día, fogatas al anochecer y risas por doquier. Siempre que se sentía triste, que volvería a romperse estaba para ahí aquel cuatroojos con cara rajada.

¿Irónico, no?, aquella persona con la que en un punto de año llegaste a odiar internamente era la única con la cual podías abrirte sin problemas. La ayudó, joder que lo hizo, llegaban momentos que solo pensaba en el presente y no lo recordaba.

Lo contrario a el, que la recordaba todo su día, toda su noche pero sobre todo, en cualquier momento. Estaba sumergido en un montón de emociones y sentimientos indescriptibles, se sentía  solo, y la necesitaba.

Necesitaba su abrazo después de un ataque de ansiedad por lo que le podría pasar si es que no cumplía. Los llantos incontrolables por no verlo venir, por sentirse estúpido. Todo el puto año anterior le llegaban cartas de su madre avisando le, previniendo que aquello podría pasar y aún así no hizo nada para evitarlo.

Igual, ¿qué podría hacer contra la voluntad del señor tenebroso?, un niño de 15 años no hubiese podido impedir que su padre fuese a Azkaban ni que su casa fuera un desfile de mortifagos.

Estaba aterrado, pero aquel temor se fue por lo menos aquellos cinco minutos que la vio caminando por la plataforma. Su cabello estaba bastante más largo que la última vez que la vio antes de subir al tren antes de vacaciones; seguía igual de hermosa que antes, si es que no más con aquellos dos meses.

Ella ni siquiera notó que paso por frente de el al estar concentrada hablando con Granger, reía. Joder que lo tranquilizó escuchar aquella risa que lo volvía loco por lo menos unos segundos.

Segundos, así es. Ella quizá no lo noto pero Hermione si; su ceño se frunció de pura preocupación por su amiga, obviamente. Rápidamente hizo que subieran al vagón más cercano.

Resignado, busco a Crabbe y Goyle entre los que se despedían de sus padres— Irónico, ya que los padres de los tres chicos estaban pudriéndose en Azkaban— y entraron al perteneciente a Slytherin.

[....]

Las clases iniciaron con normalidad, Ginny, al estar más dedicada a su persona comenzaba a destacar nuevamente en áreas que gracias a su toxica relación había bajado su desempeño. Estaba siendo alumna del club del nuevo profesor se Pociones, denominado el Club de las Eminencias.

Sus MHB daban lugar aquel año, su estés era evidente porque no solo estaba en el club de Slughorn, si no que era cazadora oficial del equipo de Quidditch de Gryffindor y luchaba con el tiempo para reconfortar su vida social.

No estaba al nivel de estrés que tuvo Hermione el año anterior, pero si tenía un grado alto.

Aquel día iba saliendo rápidamente de la clase de Slughorn en las mazmorras. Debía llegar en menos de 10 minutos
a su clase en la torre de adivinación; era tediosa pero rezaba para que después de sus MHB no tuviese que cursarla más.

Llevaba un montón de libros nuevos, Slughorn al estar sorprendido por no solo su increíble personalidad si no por su capacidad de poder para ser una Weasley, le sacaba más potencial que a un alumno que según el, no tiene talento para la magia.

Le había entregado dos libros de Pociones avanzados, si podía llegar a realizar una poción de aquel para la próxima clase podía tener una hora libre—es decir, podría faltar a una clase cuando ella quiera dentro del año—. Le molestaba, al igual que su padre, las actitudes del profesor debido a su favoritismo pero le convenía.

Sin mucho tiempo comenzó a caminar hasta chocar con alguien bastante más alto. Sus libros al igual que mochila cayeron al piso haciendo que esta se enojara bastante.

—Mierda, ¿no podías mirar adelante y ver quién está en tu camino?.— gruño molesta, sintió una risa divertida y vio como aquella persona bajo hasta su altura para ayudarle a recoger sus cosas.

—Vaya, qué carácter.

Esta lo miro y volvió a mirar sus cosas.—Tú deberías ver por donde vas.

—Tú deberías, yo venía bien. Es el camino a mi sala.

—Si, pero también es la salida de las clases de Pociones. Y créeme que no me gusta estar acá, ¿a quién le podría gustar?

—Es bastante agradable, al menos no nos llega el sol matutino al estar tan arriba.

—Pero creo que la falta de el les afecta porque no pueden, si quiera, mirar por donde caminan.

—Tú podrias haberme evitado— este río coqueto.

—¡No intentes darme vuelta el juego!, es tú culpa. Punto.— se cruzó de brazos.

—Vaya que estamos de mal humor, ¿no?. Deberías relajarte.

—Estoy relajada.

—¿De verás?.  Si así estás relajada no te me acerques cuando estés estresada.

—Tampoco lo haría.

—¿Estas segura de eso?— se acercó peligrosamente a ella.

—Tus truquitos de coqueteo fáciles no funcionan, vete a follar con alguien más y me dejas ir a mi clase.. que ya ¡joder! voy tarde.— lo empujó pero este la tomo del brazo girando la.

—Espera, tú..— fue cortado por un grito.

—¡Blaise!, joder espera que yo..— sus miradas conectaron, pero a la vez este Frunció el ceño al ver como este tomaba la muñeca de su chica.

》Vaya.. creo que interrumpi algo.— se cruzó de brazos sin despegar los ojos de su pelirroja.

Ella nuevamente se derrumbó, quería llorar.

°°

¡Volví!, eh estado desaparecida porque mi celular antiguo tuvo problemas y aún no me acostumbro al nuevo.

¿Pensaron que era Draco con quien Ginny se topó?. ¿Qué creen que pase en aquella primera conversación después de tanto tiempo?.. un reencuentro.

¿Quieren que vuelvan?

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