📚V E I N T I T R E S📚

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A pesar de que para todos fue complicado hacer las cosas sin magia pero al final lo lograron, el día se les fue jugando en las colinas lanzándose bolas de nieve y haciendo muñecos de la misma,  incluso enterraron a Ginny entre la nieve hasta que la pelirroja quedó morada por el frío. Molly les preparó una especie de chocolate caliente con bombones para finalizar el día.

—¡Heather Smith! —La voz de George resonó en la habitación. La rubia trataba de no reírse bajo la cama pero se estaba volviendo cada vez más difícil. Los pies del mayor se pasearon por toda la habitación hasta que ya cansado de buscar se sentó a los pies de la cama para tomar un respiro, vio los pies desaparecer sobre la cama, creyó que si esperaba lo suficiente, George se dormiría y podría salir, así que decidió esperar.

—¿Qué se supone que esperas, Heather? —Susurra George a su oído.

—Espero a que... ¡AHHHHH! ¿Cómo llegaste aquí?

George estaba a su lado bajo la cama con una sonrisa diabólica apoyando su barbilla en el suelo.

—Puedo ser muy sigiloso si me lo propongo, dulzura —Se encoge de hombros. —Oh, claro que no —Antes de que Heather pudiera escapar envuelve sus brazos alrededor de su cintura impidiéndole rodar hacía algún otro lado fuera de la cama.

—¡No sé que diablos hiciste, poste andante, pero si no eres un ninja no registrado no sé como llegaste aquí abajo! —Murmuró Heather aún con una risa divertida.

George ríe. —¿Te funciona también si te digo que soy mago?

—¿De esos que dicen Avra Kadabra? —Continua la rubia.

George intentó mantener su sonrisa, no podía creer que en el mundo muggle utilizaran un juego de palabras tan parecido a una maldición imperdonable, de verdad se alegraba de que los muggles no pudieran hacer magia de verdad.

—No, Thery, un mago de verdad —Aunque el pelirrojo seguía con su sonrisa las palabras eran reales y tenía la esperanza de que ella lo entendiera.

—Pues sin duda te pediría que me enseñes —Ella volvió a reír y George decidió dejar el tema allí, después de todo, era muy rápido para contarle.

𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍| 𝚐𝚎𝚘𝚛𝚐𝚎 𝚠.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora