24. Los problemas.

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Hay lugares en los que te sientes más en paz que de costumbre, como si con solo entrar supieras que todo estará bien, al menos por un momento. Sin embargo se cree que lo especial no es el lugar, sino que son las personas que te rodeas en ese lugar.

La mansión Henmman era muy grande para tan solo tres personas viviendo en esta, podía sentirse como un mundo en el que solo te recuerdan lo pequeño e insignificante que eres, o podían llenarla de amigos y se convertía en lo opuesto.

-Ya extrañaba tenerlas aquí-dice Skylar dejándose caer en su cama-. Han pasado muchas cosas estas semanas.

-Demasiadas- dice Lily tomando asiento en el sillón junto a Hazel.

Esa simple respuesta ocultaba muchos sentimientos detrás, en todo el día no había podido dejar de preguntarse cómo estaba Josh y cuando el chico tendría el valor de decírselo a ella y a los demás. Por otro lado no quería hablar con él ya que estaba segura de que apenas lo viera se pondría a llorar.

- ¿Cómo está el abuelo Theodore? - Pregunta Chelsea sentándose de piernas cruzadas sobre la cama- Hace tiempo que no lo veo.

Lily se encoge de hombros- No muy bien, a este paso no creo que tarde mucho en olvidar como comer e ir al baño por sí solo. Estoy segura de que no recuerda mi nombre, hace tiempo que solo me dice niña.

Lo habían llevado a varios chequeos con el doctor y su salud estaba perfectamente bien, el mismo doctor le dijo a la chica que su abuelo viviría muchos años más. Aunque el termino vida ya era relativo a tal punto, entre más cosas olvidara más atención necesitaría, lo cual tendría que encargarse un enfermero las veinticuatro horas o terminar llevándolo a un asilo. Lily podía intentar hacer lo mejor para él y encargarse de todo lo que necesitara por las noches y tardes que no estaba Kyle, pero terminaba a ser una chica de dieciocho años, necesitaba su espacio, quería salir, quería ir a la universidad también, aunque el deseo de estudiar administración llevaba tiempo enterrado por todo el asunto de su abuelo y ahora de su mejor amigo.

-Pero ahora está bien- dice Hazel dándole un apretón a su mano-. Eso es lo único que importa.

-Cierto- le ofrece una sonrisa apretada y se muerde la lengua con fuerza cuando siente que quiere comenzar a llorar- Pero bueno...no solo han sido problemas esta semana, ¿cierto?

- ¿Tienes algo que contar? - Canturrea Skylar meneando las cejas- ¿Ya hablaste con Josh sobre sus sentimientos?

-No.

La cortante respuesta pareció no hacer a sus amigas sospechar.

- ¿Y al menos aclaraste tus sentimientos por él? -Sugiere Chelsea- ¿Sabes si...

-Mis sentimientos han sido los mismos desde que lo conozco, Chels- interrumpe Lily-. Lo quiero, aunque mi duda era saber si ese amor era algo de amigos o...

-Podría convertirse en algo más- completa Hazel por ella-. Sabes que en secreto soy una romántica empedernida, por favor dime que sucede entre ambos.

-No hemos hablado de ello.

- ¿Pero te gusta? - insiste Skylar.

Lily lo duda un poco, pero termina sabiendo que negarlo no la llevaría a ningún lado. Solo terminaría aplazando las cosas y ahora Josh iba contra tiempo.

Asiente- Sí- las chicas sueltan un chillido de emoción.

Todas han comenzado a hablar al mismo tiempo, lo cual provoca que se escuchen golpes en la pared, el cual claramente era Finn pidiendo que bajaran la voz-

- Bueno- dice Lily algo avergonzada- Tú estás saliendo con alguien, cosa que nunca había pasado. Eso es más impresionante.

-Uriah- insinúa Hazel-. Se nota muy interesado en ti.

Epifanías de media nocheWhere stories live. Discover now