Capítulo 7

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Capítulo 7

Punto de vista de Evelyn Hawkings

Para la hora que finalmente llegué a la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras, llegaba sobre unos diez minutos tarde.

Caminé horrorosamente, mirando hacia arriba para ver a la profesora Umbridge mirándome desde su lugar en la delantera de la clase. Mi corazón se hundió cuando me di cuenta que estaba parada en medio de una frase, y ahora media clase se había torcido en sus asientos solo para mirarme.

─Por qué, señorita Hawkings ─dijo la profesora Umbridge, su dulce e inusual voz poniéndome aún más inquita─ ¿Te importaría explicarnos por qué has llegado tarde a clase?

─Uhm ─repetí, todos los ojos estaban en mí y eso me hacía olvidar lo que tenía que decir─ Tenía... Tenía que ayudar a la profesora McGonagall a recoger. Ella me dijo que te lo dijera.

─Bien ─la profesora dijo quebradizamente─ la próxima vez, dile a la profesora McGonagall que necesito escucharlo de su propia boca. Toma asiento, si tú quieres.

Mis mejillas empezaron a arder en el momento en el que murmuré un apresurado lo siento. Fui a sentarme en mi asiento al final de la clase, pero casi paré cuando me di cuenta que alguien estaba sentado en el asiento de al lado. Blaise miró por encima de su hombro y me dedicó una cálida sonrisa, ondeando sobre mí.

Mantente alejada de Zabini.

Alejé la voz de Malfoy fuera de mis pensamientos y rápidamente cogí asiento al lado de Blaise, colocando mi mochila en el suelo al lado de la mesa. Mientras Umbridge continuaba su aburrida lección, le susurré a Blaise: ─¿Qué estás haciendo aquí? Pensaba que era tu periodo de Adivinación.

─Encantada de verte a ti también ─Blaise dijo descaradamente, rodando sus ojos en una falsa molestia─ Mi horario ha tenido un pequeño cambio. Supongo que estás atascada conmigo.

Mi sonrisa se ensanchó, y sabía que me estaba sonrojando. Gracias a Dios, pensé, mirando otra vez al frente de la clase. Gracias a Dios que él está en mi clase ahora. Ahora ya no tendría que sentarme al final de la clase sola nunca más, rodeada por Ravenclaws. Ninguno de ellos tenía interés en hablar conmigo, una Slytherin.

Mientras Umbridge nos dejaba libre para que hiciéramos los problemas de la página 24 del libro de texto, Blaise miró alrededor de la clase y dijo: ─Tío, esta clase es una mierda. Ni un mísero Slytherin.

O Gryffindor, pensé, pero decidí no decirlo. En cambio, dije insistiendo, hojeando mi libro hasta llegar a la página correcta: ─A mí me lo dirás. Y Umbridge es horrible, así que eso lo hace aún peor.

Blaise resopló ruidosamente, mirando al frente de la clase para ver si la profesora lo había escuchado. El resto de la clase estaba hablando, y como mi voz era siempre tan bajita, mi comentario no llegó muy lejos. Él finalmente hojeó hasta la página correcta y dijo: ─¿Es siempre tan terrible? Qué asco, siendo honesto.

─Solamente hay... demasiado rosa ─dije, atisbando por encima de mi libro abierto para ver a Umbridge. Ella estaba sentada en el frente de la clase, clasificando lentamente algunos papeles mientras nosotros hacíamos nuestro trabajo.

Blaise ahora también estaba mirando hacia ella, los dos mirándola críticamente des de nuestro lugar al final de la clase e intentando no reír.

─Me recuerda a un sapo. ¿Lo ves?

─Sí ─reí silenciosamente, tratando de taparme mi boca con una mano─ Son sus ojos, yo creo.

─Son definitivamente los ojos. ¿Y qué hay con su pelo?

Little BirdWhere stories live. Discover now