Héroes de Riverdale

Capítulo 14: Un beso antes de morir

Daniel se despertó ese día con dolor de cabeza, aunque lo que sentía era, más que nada, frustración, pero no era el único en la mesa con esa cara. George estaba igual o peor que él, recostado sobre la tabla con el mentón en las manos.

—Que caras tan largas, queridos —Dijo su madre, mientras servía el desayuno junto a su padre.

—¿Sí, a qué se debe?

­—Yo sabes, papá —Dijo George —¡Alguien nos interrumpió a Betty y a mí anoche!

—Eso no se hace en mi casa, jovencito —Avisó su madre.

—¿Interrumpir? ¿Ibais a... hacerlo?

—Claro, Danny, por eso tengo esta cara.

Su padre soltó una risotada, mientras que Helen se acercó a Daniel y le tiró de la mejilla.

—Y ¿Cuál es tu excusa, pequeño rebelde?

—Pues ayer, después de estar en el Pop's, Jughead y yo fuimos a la roulotte de su padre y...

—¡Dios santo! Si el pequeñajo del gorrillo te ha deshonrado por lo menos habréis tomado precauciones ¿verdad? Incluso entre chicos es imprescindible...

—No hicimos nada, mamá, pero no fue por no intentarlo... nos interrumpieron cuando la cosa ya estaba andando.

—Gracias a Dios.

—Los Serpientes del Sur.

—¿Ellos? —Preguntó su padre, mientras se sentaban los dos a la mesa.

—Sí —Daniel comenzó a untar mermelada en una tostada, con gesto cansado —Ahora me caen un poquito peor.

—Sí que deberías estar caliente, hermanito.

—¡George, por favor!

—Lo siento, mamá ¡Daniel, por favor nada de teléfonos en la mesa!

—Lo siento, mamá, es Archie. Sí, dime... ¿Qué? ¿Cómo a...? Sí, sí, no te preocupes. Aviso a los demás y vamos enseguida.

­—¿Ha ocurrido algo, hijo? —Preguntó Oliver.

—Fred Andrews... le han disparado esta madrugada en el Pop's, está en urgencias.

—¡Dios Santo! —Su madre se levantó de inmediato —Vamos, vestíos todos.

Daniel fue corriendo a su habitación, mientras llamaba a Betty, Verónica y Jughead. Su madre los llevó en el coche, ella se había vestido con la bata y la tarjeta de identificación.

Cuando llegaron se encontraron a los Cooper, las Lodge y a Jughead casi al entrar. Archie estaba en la sala de espera, cubierto de sangre y dando vueltas mientras miraba nerviosamente el suelo. Verónica fue corriendo a abrazarlo, seguido de sus cuatro amigos.

—Voy a ver a Fred, quedaos aquí —Ordenó Helen, corriendo hacia la puerta del fondo de la sala.

—Ven, siéntate, Arch.

—Estaba en el baño y había un hombre, un ladrón, llevaba una capucha y apuntaba a Pop Tate. Apuntó luego a mi padre y disparó. Y después él...

—¿Después qué?

—Salió corriendo. Yo sostuve a mi padre, Pop Tate llamó a una ambulancia, pero como sabía que iba a tardar cogí a mi padre y conduje hasta aquí. Debí haber esperado, lo he empeorado.

—Arch, no pienses eso —Jughead le pasó la mano por el hombro. —Primero salvaste a Cheryl y ahora a tu padre, si sigues así te tendremos que poner un nombre de superhéroe como Bondadoso el Poderoso.