Sweet Killer::KV

Door LynnByoon

2.8M 355K 376K

Todo el mundo ve lo que aparentas ser, pocos exprimentan lo que realmente eres. » KookV [Tae!bottom] » Histor... Meer

1
2
3
4
Segunda Temporada
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
Bloody Valentine
24
25
26
28
29
30
31
32
33
34
35
What If...
36
37
38
39
40 : Final
Epílogo

27

38.9K 6.4K 5.3K
Door LynnByoon

Jungkook volvió a leer la nota sintiendo que algo parecido a la ira, el temor y el pánico escalaba por todo su cuerpo. En ese instante deseó poder golpear algo pero no era momento para perder la razón. Debía moverse rápido.

Taehyung había ido a entregarse el muy idiota ¿por qué quería tanto a alguien tan idiota como él? No lo entendía.

Sentía su corazón martillando en su pecho, sus más grandes miedos, aquellos que ni siquiera sabía que tenía, lo ahogaban lentamente. Sabía que debía calmarse, debía actuar con sangre fría o no lograría nada. Ir tras Taehyung en ese momento sería inútil, sólo lograría que los atraparan a ambos. De nuevo le subió la rabia al pensar que Taehyung había sido tan irresponsable para ir a entregarse y dejarle simplemente una nota diciendo adiós.

Su garganta se secó. No volvería a verlo jamás.

No, no, no. Se suponía que debía ser él quien fuera a prisión y no Taehyung. Si algo le pasaba en ese lugar tan horrible no se lo perdonaría. Todo mundo sabía lo que ocurría en las prisiones. Violaciones, asesinatos, peleas y un sinfín de horrores más que seguro ni se imaginaba. Taehyung era un demente incluso mucho peor que algunos de los que probablemente se encontraban en prisión pero aún así Jungkook sentía que moría de terror al imaginar que lo lastimarían.

Se negaba a dejar que lo tocaran. Sabía que estaba siendo terriblemente estúpido pero debía hacerlo, tenía que hacerlo. Debía ir por Taehyung. ¿A dónde? La comisaría obviamente. Seguro lo interrogarían antes que nada, tenía menos de dos horas para ingeniar y preparar un plan sin duda descabellado.

Ir a un lugar lleno de policías y detectives para sacar a un prisionero era algo tan irreal, digno de películas hollywoodenses. Él no era un jodido hombre de acero, no podía esquivar balas o vencer a treinta hombres sólo con sus puños. Estaba loco si creía que iría allá, mataría a todos, sacaría a Taehyung, escaparían y tendrían su "y vivieron felices para siempre".

Iba a morir. Ambos lo harían.

Pero no podía quedarse sin hacer nada, simplemente no podía dejarlo así. Habría sido tan diferente si hubiera sido él quien se hubiera entregado. Habría estado mucho más tranquilo sabiendo que Taehyung estaba libre y no de éste modo.

Entre más pensaba menos se concentraba. No tenía nada en mente salvo entrar al lugar y disparar a todos. Obviamente moriría ahí mismo y sus esfuerzos serían patéticos y en vano pero no podía pensar en nada más, su cabeza estaba en blanco.

—¿Qué debo hacer?– se preguntó, notando que había perdido valiosos minutos sumido en sus pensamientos.

Irían por él, sin duda la distracción de Taehyung no los detendría por tanto tiempo, menos aún cuando descubrieran lo que había dejado atrás en su antigua casa. Seguro aún no estaba habitada, las personas que se la compraron ni siquiera eran de Seúl y con una orden sería muy fácil que desmantelaran todo.

—Muy bien– tomó aliento, tratando de moverse —iré por tí, tomatito–.

Taehyung observó a la mujer frente a él con gesto serio. Ella lo veía con mirada severa, juzgadora y letal. Se sentía un poco intimidado y debía darle crédito a la chica pues ella era casi tres cabezas más bajita que él y aún así parecía tener mucha más presencia.

—¿Quieres hacer tu llamada?– preguntó Suran con una mueca —¿un abogado?–.

Taehyung negó, frunciendo el ceño.

—¿Los abogados ayudan en algo?– preguntó sinceramente curioso.

Ella lo observó con una expresión extraña.

—Usualmente lo hacen–.

—Tengo hambre– suspiró, échandose hacia atrás en el asiento mientras esbozaba un puchero.

¿Cuánto tiempo había pasado? ¿Ya habían llegado a la casa? ¿Tenían a Jungkook?

No. Taehyung se negaba a creer que Jungkook acabaría igual que él. Su nota había sido bastante especifica, lo quería vivo y fuera de prisión. Le había pedido que huyera mientras él se entregaba. Esperaba que le hubiera hecho caso porque si no entonces iba a llorar como bebé haciendo berrinche. No quería que Jungkook terminará ahí, el menor debía salvarse y seguir con su vida en alguna otra parte. Ojalá le hubiera hecho caso cuando le pidió que se marcharan juntos días atrás.

Él había sido terco y tonto al creer que podría matar a Yoongi y seguir asesinando sin ser descubierto. Nadie lo había descubierto jamás hasta ese momento así que se confió. ¿En que habían fallado? Obviamente dejaron muchas pistas. Pero en el pasado igual dejaba pistas, nunca fue cuidadoso ¿entonces que había sido diferente ahora? Y en el fondo sabía la respuesta.

Yoongi.

Se había encontrado con Min Yoongi y todo se había ido al caño. Yoongi nunca creyó una mierda lo que decían, nunca parecía satisfecho o convencido con sus respuestas, con sus fachadas. Era como si el detective hubiera sabido desde un principio que eran ellos. Además Taehyung se había descuidado y hablado de más muchas veces frente a él.

Ahora estaba pagando las consecuencias.

Y pensar que su vida había cambiado tanto en tan poco tiempo. Apenas habían pasado cuatro meses y él ya había atravesado por todo un cóctel de emociones desconocidas. Celos, amor, miedo...

—¿Todo lo que dijiste fue verdad?– preguntó Suran, sacándolo de sus pensamientos.

—Cada palabra– asintió.

Ella tomó una respiración sonoramente.

—Pareces tan... Inocente– dijo, viendolo con desagrado —¿cómo es posible que asesines sin remordimiento? ¿No sientes culpa?–.

—Nop– negó Taehyung rápidamente —jamás he sentido culpa en toda mi vida, es simplemente algo que no va conmigo–.

La mujer no parecía satisfecha con la respuesta pero no pudo seguir hablando cuando de pronto la puerta se abrió y Seokjin apareció con una sonrisa en sus labios gruesos.

—Dejáme hablar con él– pidió con calma.

Suran no se movió, desconfiada.

—Yoongi lo interrogará– dijo en cambio.

La mirada de Seokjin era profunda y serena cuando alzó la vista viendo a la chica como quien ve a un insecto pegado a su zapato.

—Dejáme hablar con él, es una orden– repitió con más severidad.

Suran apretó la mandíbula y los puños antes de salir del pequeño cuarto dándo largas zancadas. Seokjin sonrió falsamente y cerró la puerta una vez que la chica desapareció. Sus ojos se desviaron a Taehyung quien lo veía inexpresivamente. Se acercó dejando caer un par de carpetas que llevaba en las manos y suspiró como si llevará un gran peso encima.

—Kim Taehyung ¿cierto?– dijo a modo de saludo, tamborileando los dedos sobre la superficie de la mesa.

Taehyung se sintió analizado y estudiado, como un animal salvaje enjaulado. No le gustó el sentimiento.

—Estuve leyendo un poco y, vaya que eres una mierda– dijo, sonriendo cálidamente —no sobresaliste en nada de pequeño, nadie te prestaba atención, tus notas en la escuela eran deprimentes, no tenías amigos, no eras nadie y de pronto ¡BUM!– Seokjin azotó una carpeta sobre la mesa.

Taehyung decidió que ese tipo no le agradaba.

—Háblame de tu novio– pidió Seokjin con un gesto divertido.

—Kookie no ha hecho nada– respondió rápidamente.

—¿Crees que haría cualquier cosa por tí?–.

Taehyung parpadeó confundido.

—¿Eh?–.

—No lo sé... Supongamos que yo te llevara a un lugar muy, muy feo y te hiciera cosas malas. Hipotetícamente yo te violaría, te arrancaría un par de dedos, haría que tragaras aceite por la nariz y ese tipo de mierdas. Le enviaría fotos para que viera lo asqueroso que luces... ¿Crees que si hago eso, él haría lo que fuera por rescatarte?–.

Taehyung frunció el ceño.

—No haría eso, es policía ¿o no?–.

Seokjin soltó una carcajada.

—Cariño, no todos los policías somos buenos–.

Taehyung sintió un escalofrío al recordar que eso mismo le habían dicho.

—Pero tampoco soy tan malo– continuó Seokjin con calma, volviendo a esa sonrisa tranquila y falsa —tengo un trato para tí y tu novio–.

—¿Un trato?– repitió.

—Te ayudaré a salir de aquí y los ayudaré a escapar fuera del país–.

Hubo un silencio extraño mientras Taehyung intentaba asimilar las palabras del tipo sentado frente a él. No le agradaba su voz, sus expresiones y la manera en la que se sentía en ese momento.

—¿Por qué haría eso?– preguntó finalmente.

—Porque ustedes harían algo a cambio– sonrió él.

—¿Qué cosa?–.

Seokjin abrió las carpetas que había llevado, las cuales tenían un sello de "confidencial" y las deslizó hacía Taehyung con calma.

El pelirrojo se inclinó al frente a leer, observando imágenes de una mujer desnuda brutalmente golpeada sobre una cama llena de sangre. Su rostro estaba tan hinchado que difícilmente se distinguía. Giró notando más imágenes, esta vez de un niño de once años de mirada perdida y cabello oscuro. Taehyung sintió que el corazón se le detenía, reconociendo las facciones de ese niño.

Seokjin arrojó otra carpeta abierta sobre las otras dos, haciendo que Taehyung retrocediera frunciendo el ceño. Los ojos del pelirrojo se abrieron desmesuradamente cuando observó todo lo que se encontraba en esa otra carpeta. Un chico pálido de cabello color verde menta. Datos de asesinatos, blancos especificos, "misiones", una máscara de gas...

—Mi trato es este– continuó Seokjin, inalterable —te quedarás conmigo como garantía mientras tu novio va y me trae la cabeza de Min Yoongi en una bolsa. A cambio te obtiene a tí, ambos obtienen su libertad y una dulce venganza–.

—¿Y si no quiero?– soltó con voz extrañamente temblorosa.

—Ya te lo dije, niño– Seokjin se puso en pie para acercarse por encima de la mesa hacía Taehyung —no soy el policía bueno, no voy a pedirtelo, voy a tomar lo que quiero así que acepta el trato y llama a tu novio que no voy a esperar todo el día– exclamó, acercándole un teléfono celular.

—Pero él ya escapó– murmuró —no volverá por mí, no soy tan importante para él–.

Seokjin rodó los ojos antes de sacar una cuchilla de su bolsillo y enterrar la afilada punta sobre el hombro derecho de Taehyung y retorcer el metal, rasgando la piel. Taehyung jadeó sorprendido antes de soltar un aullido de dolor que fue sofocado cuando el cañón frío de un arma entró por sus labios al interior de su boca.

El pelirrojo se atragantó sintiendo el desagradable sabor de la pistola automática raspando las paredes de su boca y lengua.

—Respuesta equivocada– murmuró Seokjin, borrando todo rastro de amabilidad.

Taehyung recordó que Yoongi le había dicho lo mismo apenas esa mañana. Al parecer últimamente todas sus respuestas eran equivocadas, pensó mientras sus ojos se fundían con los del tipo amenazante frente a él.

Ga verder met lezen

Dit interesseert je vast

192K 23.1K 51
1930 «Has visto demasiado...» Luego de ver cómo su familia fue asesinada, Jeon Jungkook a su edad de trece años fue llevado a un monótono psiquiátric...
376K 78K 34
❝❞TaeHyung es llevado a un show de fenómenos y conoce a un chico de porcelana. 恋人taekook taehyung + jungkook(!!!) © NUABOYS (☆)portada por @MinYoSae...
7.2K 1K 29
Un hermano gemelo. Una familia que no lo amaba. Una manada que lo despreciaba. ¿Acaso Jimin puede tener un final feliz al lado del alfa que amaba?
110K 12K 10
Kim Taehyung es un chico que sufre de depresión y ansiedad, llega a un centro psiquiatrico por orden de sus padres y ahí conoce a Jeon Jungkook un ti...