“¿Café o té?” ofreció Ally Brooke. Lauren ahogó un bostezo. Alexa tenía razón: estaba demente. Era sólo sábado por la mañana y Lauren ya estaba lista para derrumbarse de agotamiento. “Café, por favor,” contestó. Y que sea doble.
Ally repitió la orden a su ayudante y volvió sus amables ojos a Lauren.
“Realmente me alegra que pudiera hacerlo, Srta. Jauregui. Hace tiempo que soy fan de su trabajo.”
“Gracias,” dijo Lauren sonriendo en apreciación. Hasta ahora, Lauren no podía decidir si le gustaba la mujer o si no le gustaba la mujer. Era más joven de lo que Lauren esperaba. O quizá sólo parecía más joven.
Ally asintió, poniendo un mechón de cabello detrás de su oreja. “Has leído el guión, ¿verdad?”
Lauren asintió.
“Vale, voy a necesitar tu ayuda para el casting del papel de Lucy,” la director explicó. “Lo hemos reducido a unas pocas chicas y un par que aún no conocemos. Estoy segura que ya has hecho esto antes.”
Lauren asintió de nuevo.
“¿Preguntas?” inquirió Ally.
Lauren empezó a negar con la cabeza y entonces de dio cuenta que probablemente sería mejor si profiriese una palabra. “No,” fue la palabra que profirió.
Ally sonrió. “¿Noche difícil?”
“Mes difícil,” dijo Lauren, devolviendo la sonrisa. “¿Qué escena estamos haciendo?”
“Quiero probar un par,” Ally contestó. “Donde Lucy y Elizabeth se conocen y una más adelante en el guión. Quizá dónde se besan la primera vez, ¿si te parece bien?”
Lauren estaba segura que había palidecido considerablemente en los últimos segundos. “Perfecto,” dijo, aunque parecía forzado incluso a sus propias orejas.
Ally estudió a Lauren un largo momento y había abierto la boca para decir algo cuando la puerta se abrió.
“¿Café, alguien?” preguntó el ayudante de Ally, Siope Folau.
Agradecidamente, Lauren aceptó la taza y tomó un largo sorbo. La cafeína era maravillosa. Cuando Siope habia salido una vez más, Ally dijo, “Liam me dijo que vacilabas sobre aceptar este papel.” Lauren examinó a la director. “¿Alguna razón en particular?” cuestionó Ally.
Lauren terminó el café y puso la taza en el escritorio. “No estaba segura si sería un paso acertado en mi carrera.”
Ally asintió. “Entonces, ¿por qué lo aceptaste?”
Lauren encontró la mirada de la director. “Me gustan los desafíos,” fue su respuesta.
Complacida con la contestación, Ally sonrió. Lauren estaba empezando a agradarle esa sonrisa. “¿Lista?” preguntó, poniéndose de pie.
“Como jamás estaré,” contestó Lauren suavemente, también poniéndose de pie. Siguió a la director al vestíbulo. Alexa estaba hablando en su teléfono móvil y rápidamente cortó cuando vio a Lauren. “¿Todo bien?” preguntó, yendo al paso de la actriz.
Lauren asintió. “Excelente.”
“Pareces un poco pálida,” Alexa susurró.
“El clima de Nueva York,” explicó Lauren. “Estaré bien; sólo espero que la cafeína actué.”
Alexa sonrió. “Hazme saber si necesitas repostar.”
“Cuenta con ello,” le aseguró Lauren a su ayudante.
Ally abrió la puerta a una habitación diferente y Lauren entró tras la director. El cuarto estaba dispuesto con tres filas de sillas a ambos lados de una zona en mitad. Un lado estaba lleno con chicas de similar aspecto; el otro consistía en un par de personas tipo ejecutivo y algunos individuos vestidos informalmente. Todos dejaron de hablar al instante que Ally y Lauren entraron en el cuarto.
Ally llevó a Lauren al lado del cuarto de los ejecutivos. “Lauren Jauregui, te presento a Ed Barring y Martha Jacobs, nuestros estimados productores.”
Lauren sonrió y estrechó sus manos consecuentemente. “Encantada de conocerles,” les dijo.
Ally siguió a la sección vestida más informalmente. “Ésta es Rhea McKee, mi director auxiliar, y Jordan Silver, nuestro director de casting.”
Se intercambiaron formalidades una vez más. Un pequeño murmullo se inició al otro lado del cuarto al instante que Lauren Jauregui fue descubierta.
“Toma asiento, Lauren,” le dijo Ally.
Lauren dejó a Alexa sentarse primero y entonces tomó asiento junto a ella. Se figuró que estaría levantándose más frecuentemente que Alexa. Ally fue al frente del cuarto y se presentó al grupito de ansiosas actrices.
“Hoy tendremos audición para los papeles de Lucy, Diana y Kim,” explicó la director. “Las que hagan audición para Diana y Kim interpretarán juntas y probablemente se intercambiarán. Las que tengan audición para Lucy interpretarán con Lauren Jauregui.”
Lauren podía ver que varias chicas la estaban mirando fijamente, pero mantuvo su propia mirada enfocada en Ally.
“Primero tendremos las audiciones para los papeles de Diana y Kim,” Ally continuó. “Si llamo tu nombre, por favor, ven al frente. El resto puede esperar fuera, en el recibidor, hasta ser llamada. ¿Preguntas?”
Nadie levantó la mano. Lauren suspiró. Iba a ser un largo día.
“Jean Hannon y Dinah Jane Hansen,” Ally llamó.
Lauren se paralizó. Sintió la sangre abandonar su cara. No puede ser. Miró al grupo de chicas y vio a Dinah yendo hacia el frente del cuarto. Oh. Dios. Mío.
“¿Estás bien?” preguntó Alexa, repentinamente preocupada. “Pareces a punto de desmayarte.”
Lauren pestañeó algunas veces, entonces logró mirar a Alexa lo bastante para decir, “Excúsame,” antes de apresurarse fuera del cuarto. Una vez en el vestíbulo, agarró su móvil y marcó.
“Ha llamado a la oficina de Liam Payne,” empezó el contestador, “por favor, deje—”
Lauren colgó el teléfono y probó un número diferente. “Por favor, cógelo,” le suplicó al sonoro objeto.
“Dígame,” vino la voz de Keaton.
“Keaton,” dijo Lauren. “Tengo un problema.”
“¿Qué pasa?”
“¿Adivina quién tiene audición para mi película,” dijo.
“¿Brad Pitt?” adivinó Keaton. “¿Decidiste que ahora eres hetero?”
“La mejor amiga de Camila,” le informó Lauren.
“¿La linda, cabellos castaños?”
“Esa misma,” Lauren confirmó.
“De todas las veces que no puedo ir contigo a Nueva York,” dijo Keaton. “Siempre me pierdo lo divertido. Bueno, ¿es con la que tienes que montártelo? Porque sería caliente.”
“¡Keaton!” Lauren gimoteó. “¿Qué hago?”
“Shh, Lauren. Mira, sabes que no puedes depender de mí para resolver todos tus problemas.”
“Agh. Estás despedido como mi mejor amigo,” dijo y le colgó. Entonces golpeó el teléfono contra su frente un par de veces e inspiró profundamente. Sólo tengo que permanecer tranquila, aguantar la audición y actuar como si no tuviese idea de quiénes. Soy actriz. Puedo hacerlo. Tomó otra profunda inspiración y volvió a entrar al cuarto. Ally estaba en el proceso de dar instrucciones a las dos chicas. Lauren se sentó al lado de Alexa.
“¿Estás bien?” Alexa preguntó.
Lauren asintió. “Recordé que tenía que hacer una llamada.” Escuchó a Ally un momento y entonces se inclinó hacia Alexa. “¿Quién es esa chica de allá?”
“Dinah Hansen,” contestó Alexa. “Realmente no ha estado en nada. Es todo lo que sé ahora mismo.”
“Hmm,” comentó Lauren, devolviendo su atención a la audición de las chicas. Reconoció la escena al instante que se pronunció la primera línea de diálogo. Lauren no lo habría admitido, pero leyó tantas veces el guión que prácticamente lo tenía entero memorizado.
No pasó mucho antes de que Lauren se diese cuenta que Camila no era parcial en su opinión de las habilidades escénicas de Dinah. La chica era buena, muy buena. Una mirada al resto del casting reunido confirmó que no era la única que pensaba así. Emociones mezcladas jugaban en un rincón del corazón de Lauren. ¿En qué me he metido?, se preguntó.
Cuando la escena acabó, Ally habló. “Muchas gracias,” dijo. “Jean, buen trabajo. Estaremos en contacto contigo. Dinah, me gustaría verte quedarte e interpretar el papel de Lucy.”
Esto no era posible que empeorara, pensó Lauren. Casi consideró fingir dolor de estómago, lo que fuese que la sacase de este enredo.
Ally se dio la vuelta para enfrentarla. “¿Lista?” preguntó.
No hay palabras para lo poco lista que estoy. Lauren forzó una sonrisa confiada y se puso de pie.
Buen Dios, por favor, sácame de esto, rezó mientras se acercaba al frente del cuarto.
“No tengo esta escena preparada,” estaba diciendo Dinah.
Ally asintió y le dio un par de páginas del guión. “Hazlo lo mejor que puedas,” dijo.
Un teléfono móvil sonó en alguna parte del cuarto y Lauren rezó que fuera el suyo. Desgraciadamente, demostró ser el de Ally. La director se excusó y dejó el cuarto.
Lauren no estaba segura si volver a su asiento o permanecer en pie. Al final, optó por lo último. Disimuló una mirada a Dinah, que estaba repasando el guión con una mirada de trepidación absoluta. “¿Te molestaría decirme qué escena es?” se encontró preguntando. Dinah levantó la vista, pareciendo desconcertada por la pregunta.
“¿Escena?” Lauren intentó de nuevo.
“Oh,” Dinah dijo e inmediatamente entregó las páginas a Lauren. “Lo siento.”
Un rápido examen del diálogo confirmó las sospechas de Lauren. ¿Qué hice para merecer esto? Devolvió las páginas. “Gracias,” dijo.
“De nada,” respondió Dinah y regresó a leer el guión.
Un momento después, levantó la vista. “No sabía que esto era una… una…”
“¿Película lesbiana?” Lauren proporcionó. Dinah asintió.
“Si quieres huir puedo decirles que, de repente, te dio la gripe,” dijo Lauren.
Dinah sonrió. “Lo aprecio,” dijo. “Aunque creo que lo intentaré”
“Si ayuda, estuviste realmente bien en esa primera escena,” se encontró diciendo Lauren.
Dinah abrió la boca para decir algo, pero Ally escogió ese momento para regresar. “Lo siento,” la director se disculpó. “¿Estamos listos para continuar?”
Lauren y Dinah asintieron.
“De acuerdo,” Ally dijo, tomando asiento. “Ésta es la escena del primer beso de Lucy y Elizabeth. Hay muchas emociones conflictivas en ambos caracteres, sólo intenten recordar eso. Dinah, sabemos que estás interpretando en frío, así que haz lo que puedas. Lauren, ¿conoces las frases de esta escena?”
Como la palma de mi mano. “Sí,” dijo en cambio.
Ally le dio de nuevo esa sonrisa. “Bien.” Intercambió unas palabras con el asistente de director y asintió. Entonces se volvió al frente. “¿Preguntas? ¿No? Vale… acción.”
Lauren estaba al instante en carácter, aunque le resultaba extraño. Nunca antes había ensayado esta parte con nadie. “¿Qué estás haciendo aquí?”
“Recibí tu nota,” Dinah contestó, también en carácter. “Temía que ya te hubieras ido.”
Lauren se aseguró de evitar el contacto visual y permanecer callada.
“Lamento no poder llegar antes,” se disculpó Dinah, acercándose. “Me… retrasaron.”
Lauren simplemente asintió, intentando controlar sus emociones. Sabía que su personaje estaba enfadada pero se negaba a mostrarlo.
“¿Qué te retrasó?” preguntó finalmente.
Dinah hizo una pausa a medio paso. No contestó. Lauren se volvió a enfrentarla con lágrimas ardiendo en sus ojos. “Te casas con él, ¿verdad?”
Dinah no desvió la mirada. “Tengo que hacerlo,” contestó suavemente. “Lo sabes.” Lauren permitió una lágrima caer por su mejilla. “No significa que tenga que aceptarlo,” contestó, intentando parecer más segura de lo que se sentía.
“Liz,” dijo Dinah, acercándose más y enjugando la lágrima.
Lauren se alejó.
“¿Por qué querías verme?” cuestionó Dinah, dando un paso atrás, su voz llena de dolor. Cuando Lauren no contestó, se acercó. “¿Liz?”
Cuándo aún no hubo respuesta, Dinah declaró, “Debo irme.”
Lauren la vio alejarse durante un par de segundos y dijo finalmente, “Lucy, espera.”
Dinah se dio la vuelta despacio y Lauren rápidamente recorrió el espacio entre ellas. Antes que ninguna tuviera tiempo de registrar lo que estaba pasando, sus labios presionaron juntos.
“¡Corten” dijo Ally desde su asiento.
Lauren se apartó al instante. Tenía la certeza que estaba ruborizándose hasta las raíces de su cabello.
“Excelente trabajo,” declaró Ally.
Lauren se concentró en la director, evitando la mirada de Dinah a toda costa. Estaba bastante segura que Dinah estaba igualmente avergonzada por la situación.
“Dinah, gracias por tu tiempo,” estaba diciendo Ally. “Estaremos en contacto contigo.”
Dinah le dio las gracias a todos, incluso a Lauren e hizo una salida apresurada.
Lauren miró su salida con una mezcla de desilusión y alivio. No estaba segura de cuál era mayor. Fue hacia su asiento.
“¿Qué piensas?” le preguntó Ally a Lauren mientras pasaba.
“Es muy buena,” contestó Lauren sinceramente.
“Lo es,” concordó Ally. Devolvió su atención al resto de su equipo y discutió unas cosas con ellos antes de enviar por las dos siguientes actrices.
Lauren se sentó, sintiéndose increíblemente ansiosa y más que un poco enferma. Alexa no dijo nada y Lauren estaba agradecida. Debiera haber fingido enfermedad esta mañana, decidió. Nada podía prepararme para besar a la mejor amiga de Camila. Suspiró y resbaló ligeramente en el asiento. Jamás voy a oír el final de esto.
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N/ Espero sus reacciones en los comentarios :)