Just feel. {Justin Bieber}

Od martammg_8

249K 9.4K 272

Siempre he sido de luchar por lo que quiero hasta que no quede en mis pulmones ni una pizca de aliento. Just... Více

Just feel.
Capítulo 1.
Capítulo 2.
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo 46
Capítulo 47
Capítulo 48
Capítulo 49
Capítulo 50
Capítulo 51
Capítulo 52
Capítulo 53
Capítulo 54
Capítulo 55
Capítulo 56
Capítulo 57
Capítulo 58
Capítulo 59
Capítulo 60
Capítulo 61
Capítulo 62
Capítulo 63
Capítulo 64
Capítulo 65
Capítulo 66
Capítulo 67
Capítulo 68
Capítulo 69
Capítulo 70
Capítulo 71
Capítulo 72
Capítulo 72
Capítulo 73
Capítulo 74
Capítulo 75
Capítulo 76
Capítulo 77
Capítulo 78
Capítulo 79
Capítulo 80
Capítulo 81
Capítulo 82
SEGUNDA TEMPORADA

Capítulo 13

4.2K 150 11
Od martammg_8

Siento esa horrible tentación otra vez, y se va intensificando a medida que la discusión sube de nivel. Sería demasiado fácil mirarle a los ojos y ordenar que se callara, pero no puedo hacerlo, no a él.

Paso la página del cuaderno mientras estoy sentada en el tejado, viendo las estrellas iluminar la noche. Es el cuaderno de mi bisabuela, el que mi abuela me entregó para que me ayudara con todo esto.

He comprobado que el deseo de controlar su mente se intensifica cuando hay rabia e ira de por medio. También, que no pasa nada por mirar a alguien a los ojos y ordenar algo, solo se necesita concentrarse en ello, tener las ganas de que la otra persona te complazca. Hoy he podido resistirme a la enorme tentación de ordenarle a mi hija Micaela que dejara de escuchar esa horrible música y que me dejara trabajar en paz. Supongo que voy mejorando, poco a poco. Pero siento que aún, no puedo controlarlo.

Voy pasando las páginas, entendiendo cada vez más que conlleva tener esta "maldición", o así lo llamaba mi bisabuela.

Por fin siento que puedo controlarlo, las ganas de controlar a mis cercanos disminuyen, y yo ya me atrevo a mirarlos a todos a los ojos, sin tener ese miedo interior.

7 años. Mi bisabuela tardó 7 años en poder controlar su poder. ¿Cómo voy a aguantar esto? Sigo leyendo, hasta que llego a una parte, que no querría haber leído.

Hoy Michael, mi esposo, ha vuelto a hacerlo. He llegado a casa, encontrándome con Micaela llorando desconsoladamente mientras el cuerpo de su hermano Justo yacía en el suelo, muerto. "Ha sido papá, ¡se ha vuelto loco!" no paraba de gritar ella, asustada. Las horas pasaban, y no podía ver de esa manera a mi hija, ella no se merecía el dolor por el que estaba pasando. Me he acercado a Mica, la he observado fijamente para después... Le he hecho olvidar todo. Ella recordará que su hermano murió cuando era pequeño, que ya lo habrá superado, y que Michael nunca ha sido un maltratador. Sé que si se entera de esto, va a tenerme rencor durante toda su vida. Así que Mica, si lees esto, fue por tu bien.

Cierro el cuaderno unos segundos, suspirando fuertemente. No quiero mandar sobre alguien de esa forma. No es mi trabajo hacer olvidar a la gente. Nunca se me ha dado bien proteger a alguien. Vuelvo a abrirlo, para seguir leyendo lo que había escrito meses después.

He descubierto que puedo bloquear a alguien de mis mandatos. Se necesita que ellos lleven cualquier objeto personal mío. Puede sonar raro, pero es un alivio no vivir con el miedo de que se te vaya de las manos y luego, estés en su mente.

Dejo el cuaderno a un lado, memorizando todo lo que he leído esta noche. La información básica es que mis ojos van a cambiar ligeramente de color dependiendo de si mi cuerpo tiene sentimientos positivos o negativos, y por eso tendré que llevar gafas de sol. Después, como bloquear a alguien de mis controles. Y finalmente, saber que yo misma puedo obligarme a algo. Esto último ha sido lo que más me ha sorprendido; y basta con ponerme delante de un espejo, y mirarme a los ojos, para después obligarme a lo que sea.

-____, ¿qué haces ahí?

Pregunta Justin desde el jardín, mirando en mi dirección. Yo me encojo de hombros y miro sus ojos, nunca podría obligarlo a nada.

-Estoy tomando el aire.

Respondo tranquila, y él se enciende un cigarrillo.

-Pues a menos que quieras dejarme subir, baja, todos duermen y me siento solo.

Murmura con una sonrisa, y yo sonrío involuntariamente. Me pongo en pie y bajó al jardín, cruzando toda mi casa para ello. Encuentro a Bieber tumbado en el césped, fumando y mirando las estrellas. Me siento a su lado y suspiro, encendiéndome un cigarro yo también.

-¿Vas a decirme que te pasa?

Pregunta de repente Justin, pero sin quitar su mirada de las estrellas.

-He dicho que no me pasa nada Justin, ¿por qué no me creéis?

Respondo encogiéndome de hombros y arrancando un pedazo de hierba para después lanzarlo.

-Mira ____, puede que no te conozca de toda la vida, pero no puedes negarme que algo ha cambiado en ti.

Murmura él mirándome a los ojos y yo suspiro, tumbándome a su lado y tomando una larga calada.

-No puedo decirlo Justin. Lo siento, pero no puedo.

Susurro sin saber porque he aceptado que me pasa algo. Él se gira un poco y se pone cara a cara conmigo, observando cada parte de mi rostro.

-Si no puedes decírmelo, solo dime si estás bien.

Me pide en un susurro y yo cierro los ojos, notando algo de tensión en ellos.

-Ahora mismo, no. Pero se me pasará, de eso estoy segura.

Sonrío falsamente, abriendo los ojos y encontrándome su mirada fija en la mía, sintiendo una horrible tentación. Me inclino y me decido; saco mi pulsera negra de la suerte y la agarro dentro de mi puño.

-Hairball, me gustaría que te quedaras con esto.

Digo poniéndome otra vez delante de su rostro y mostrándole la pulsera. Justin me mira confundido.

-No aceptaré un no por respuesta.

Sonrío poniéndosela y entonces, al mirarlo, esa tentación ha desaparecido. El alivio invade mi cuerpo y mi cuerpo se relaja.

-Pero, ¿por qué?

-Simplemente porque sí, y hazme un favor, no te la quites nunca.

Él asiente y yo, impulsivamente, pongo mi cabeza en su pecho mientras lo abrazo. Justin me rodea con sus brazos y nos quedamos así, en el césped.

-Sabes, de pequeña me pasaba todas las noches de verano aquí tumbada, viendo las estrellas mientras mi madre miraba una horrible telenovela en la televisión.

Susurro sonriente, pero con la tristeza apoderándose de mi sonrisa. Justin me aprieta con fuerza y yo me siento, seguida de él. Señalo una escalera de la piscina y suspiro.

-Ahí Joshua se rompió un diente, y desde ese mismo borde es de donde mi padre me lanzó al agua para que aprendiera a nadar.

Le explico triste, y Justin me mira curioso.

-Dijiste que recordar era masoquista.

Dice él intentando entenderme. Yo me encojo de hombros y asiento.

-Supongo que soy masoquista, me gusta el dolor.

Digo irónica y Justin me rodea la cintura con su brazo izquierdo.

-Explícate anda...

Lo miro a los ojos unos segundos y suspiro de nuevo.

-Recordar algo y que duela, de esa mierda te hablo, Justin. Y luego te dicen: "Es ley de vida", pero que alguien me diga cuál es la ley ésa de sentir dolor al recordar, por favor, que a lo mejor es eso lo que me tiene tan perdida.

Me quejo alzando un poco el tono de voz y Justin pone una mueca de compasión.

-No sientas compasión, no es culpa tuya todo esto, yo ya estaba perdida antes de conocerte, ya era un desastre en las noches con copas de por medio, ya era demasiado niña para la vida.

Respondo a su mirada poniéndome de pie y después, empezar a andar. Noto sus pasos detrás de mí, y cuando estoy a punto de subir por la pequeña escalera que da a mí guardilla, noto como él tira de mi brazo y me pega a la pared.

-Estamos a oscuras.

Susurro sin poder verle bien la cara, y al tenerla tan cerca, noto como sus labios dibujan una sonrisa.

-¿Acaso te da miedo estar conmigo a oscuras? ¿No te fías de mí?

Susurra sonriente y yo me pongo seria, mientras me acerco a su oído y pongo mis manos en su cuello.

-Confío en ti. No hagas que me arrepienta.

Susurro en su oreja y entonces, en un gesto rápido, Justin posa sus labios encima de los míos. Le sigo el beso, sintiendo como cada centímetro de mi mente se expande por todo el pasillo. De un salto rodeo su cintura con mis piernas, agarrando con fuerza los mechones de su pelo mientras él se centra en mi cuello.

-Espera, ven.

Digo entre jadeos y me bajo de su cintura. Subo las escaleras que dan a mi habitación y me doy las gracias por haber recogido antes. Justin me sigue y se queda impresionado.

-Esto es increíble.

-Es mi guarida.

Respondo entre risas y Justin se acerca a mi, pegándome de nuevo a la pared. Lo miro a los ojos y él pasa su lengua con lentitud por mis labios. Me separo un poco y le agarro la cara entre mis manos.

-No quiero que me rompan de nuevo.

Murmuro observando sus labios mientras los acaricio con mi dedo índice. Él llama mi atención subiendo mi mentón, y yo lo miro a los ojos.

-Confías en mí, ¿no? Inténtalo de nuevo.

Susurra en respuesta para después volver a besarme. El beso va subiendo de nivel, y minutos después estamos en mi cama, besándonos hasta quedarnos sin oxígeno.

Y entonces, noto que mi corazón late con fuerza, que con solo tenerlo a mi lado una paz se apodera de mi cuerpo. De que no puedo serle indiferente. Me aparto un poco y me tumbo boca arriba en la cama, con él a mi lado.

-Stormy, no tengas miedo.

Susurra acariciando mi ombligo y yo niego con la cabeza.

-Si hay algo que he conseguido no perder en mi vida, ha sido el miedo, esa sensación que te acobarda el pecho y te hace pensar que un hecho valdrá siempre más que mil palabras...

Respondo observando el techo de mi habitación y él me obliga a mirarle. Me fijo en sus ojos, brillantes.

-El amor es arriesgarte a coger un tren y que no te lleve a ninguna parte, pero para eso, debes lanzarte a las vías ____. No tengas miedo a enamorarte, de mí.

Dice él serio y yo, disimuladamente, le quito la que era mi pulsera. Me muerdo el labio y me pongo encima de él, rodeando su cintura con mis piernas. Me acerco a su rostro y le doy un beso, lento y tembloroso. Le miro a los ojos, sintiendo como las lágrimas van cayendo ligeramente por mis mejillas y me dispongo a hacer que me obedezca.

-Lo que voy a decir puede que sea lo más egoísta que haya salido de mi boca; estoy enamorada de ti, no he podido evitarlo, empiezo a sentir demasiadas cosas por ti. Dicen que uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, pero también está la otra cara de la moneda en esta historia que dicta que yo siempre supe lo especial que eras cuando ni siquiera te tuve. Pero Justin, no te puedo tender la mano y nunca seré tu hombro. Jamás podré darte ni fuerza ni esperanzas. Y por eso, vas a olvidar todo lo que ha pasado esta noche. Vas a recordar que hemos hablado, yo te he contado como mi hermana pequeña se ha aficionado a crear pulseras y por eso llevas una en tu muñeca, la cual no puedes sacarte nunca hasta que yo diga lo contrario. Recordarás que después de hablar tú te has fumado un cigarrillo y que yo te he dado un abrazo antes de decirte buenas noches e irme a dormir. Recordarás que entre nosotros, solo hay amistad, y nada más que eso.

Pokračovat ve čtení

Mohlo by se ti líbit

317K 12.5K 90
Tayler Holder, fuckboy popular, se enamora de la hermana de su mejor amigo. Tn Hall, hermana menor de Bryce, nunca pensó que pasaría algo con el mejo...
157K 8.4K 43
__(tn) siempre se ha sentido diferente. Con sus 19 años no aparenta mas de 15 y para eso no ayuda mucho que siempre lleve coletas porque le molesta...
382K 34.9K 67
Freen, una CEO de renombre, se ve atrapada en una red de decisiones impuestas por su familia. Obligada a casarse con Rebecca, una joven que llegó a s...
172K 8.1K 41
Un día, dos chicas se encuentran en el metro. Violeta, que acaba de ser abandonada, se está recuperando de un corazón roto, y Chiara está lidiando co...