¡No Soy Él!

No me faltes al respeto.

Al llegar a casa, Shikamaru se acercó a verme, y bueno mi estado no era el mejor, tanto que entro en pánico y me pregunto que paso y esas cosas. No es que no me agradara que se preocupara por mi, de hecho me causaba algo de gracia, aunque debe de admitir que no estoy acostumbrada a tanta atención.

Ignore a Shikamaru y camine hacia el baño donde aparentemente había un botiquín de primeros auxilios, el me siguió en todo momento y yo me quite la sudadera con cuidado, al verla estaba un poco manchada de sangre, por no decir que tenía todo el centro húmedo, y fue cuando me di cuenta de que mi piel si había sufrido por aquel trozo de madera, mi piel se había reventado por aquel pequeño golpe, al parecer la piel de Naruto era muy frágil. Solté un suspiro cansado y con cuidado me senté en la taza de baño y retiré la camisa, cosa que ardió mucho.

—¿Qué Diablos viejo?— Fue la voz del castaño que me saco de mi análisis a mi espalda.

Se encontraba muy roja e inflamada, había varias llagas de las cuales salia sangre, y gracias a estas mi camisa estaba empapada de sangre hasta cierto punto al igual que mi chamarra. El golpe era una línea de forma inclinada, empezaba en mi Omóplato derecho y terminaba en mi espalda baja izquierda, se veía horrible.

No se en que pensaba al tener una pelea tan estúpida.

Cerré los ojos con cansancio, y deje caer mis brazos sobre mis piernas.

—¿Me ayudas?— Hable aún con la cabeza baja, no tenía ni un poco de humor.

Estaba cansada, estresada y muy molesta, pero nadie me mando a meterme en una pelea callejera por un poco de plata, no así que ahora me aguanto. No hubo respuesta por el castaño por lo que solo me agache y tome las gasas entre mis manos con algo de alcohol, dirigí la botella a mi espalda y antes de dejar que caiga su contenido sobre mi cuerpo, una mano me lo impide, miro hacía arriba y era Shikamaru quien por supuesto estaba molesto. Tomo la botella y las gasas para después mojarlas y limpiar mi espalda con mucho cuidado, a mi no me importaba podía tomar la botella completamente y vaciarla sobre mi espalda para después hallarme contra una toalla llena de agua oxigenada, pero bueno.

Luego de que mi espalda estuviera limpia puso las gasas, y me vendo, todo en completo silencio, la tensión estaba muy latente demasiado diría yo, es más podía ver el tipo de ambiente que había y puedo jugar que lo podría cortar, volví a suspirar de forma cansada, no tenía realmente nada de animo. Pero al menos podría dormir unas horas más. Me puse una camisa blanca y suelta para que no me rozara la espalda y me ardiera tanto.

Fui a la cocina, bajo la atenta mirada del castaño, me agache a la alacena para sacar unas galletas, me levante y acerque al refrigerador para sacar leche. Puse un pocillo en la estufa y lo llene con leche, para que se calentara. Me gire y me encontre con la atenta mirada de Shikamaru, estaba frente a mi, muy molesto, acerco su mano a mi mejilla derecha donde estaba mi herida y toco debajo de la cortada; luego llevo sus dedos a mi cuello y acaricio de igual forma donde estaba mi cortada.

—¿Qué mierda hiciste?— Su mirada se suavizo un poco y su voz fue baja.

—Nada, solo me empujaron contra un vidrio— Alzó una ceja dudoso, yo solo sonreí y me aleje para entrar a mi habitación.

Shikamaru me seguía de cerca, no quería que me lastimara más de lo que ya estaba, y bueno realmente es muy extraño, digo es el perezoso Nara del que estamos hablando. Ya que tengo este honor, me agache para tomar mis libros y llevarlos a la sala, dejarlos hay y volver a la cocina, tenía que apagar la olla de la leche; serví dos vasos y busque chocolate en polvo o cacao, algo por el estilo. Y hay estaba en la alacena de hasta arriba, casi empolvado, dando a entender que su uso era poco. Suspire pesado mientras me subía a la cocina con el latiente ardor en mi espalda por el estiramiento de la piel, me estire y alcance el chocolate, lo tome y baje, teniendo cuidado de no matarme por la caída o algo así. Luego lleve las tazas y galletas a la sala, me senté y acomode mis libros en total calma.

—¿Te empujaron contra un vidrio?— Su voz se escucho lejana, por lo que supuse que estaba en la puerta de la cocina, viéndome fijamente.

Alce la mirada, y efectivamente, el estaba ahí, recargado en el marco de la puerta y con una expresión que parecía muy molesta, y bueno hasta yo lo estaría si uno de mis hermanos llega a casa golpeado y me dice que se cayó de las escaleras. Su mirada se intensifico, sonreír  sintiendo que quería analizarme por completo, y luego el silencio se hizo notable en el lugar. Esto era tan incomodo, sonreí con ironía mientras llevaba la taza de leche y chocolate a mi rostro y soplaba al líquido para que este estuviera un poco más frío.

—Bueno, un vidrio pudo haberme caído en el corazón, di que tuve suerte, a uno de ellos le perforaron el estómago— Negué con la cabeza mientras tomaba del líquido en la taza.

—¿Qué?— Me miro aún más atónito y se acerco a mi, se sentó junto a mi.

—Si, pude haber muerto, no se algo así— Alce los hombros mientras le restaba importancia y le mostraba interés al libro frente a mi.

—¿Te estás burlando de mi?— Su voz salió un poco molesta, hasta parecía que se estaba haciendo la vistima— Mira, no me faltes al respeto porque...— No pudo acabar porque yo estalle en carcajadas.

No me faltes al respeto.

Un meme de mi era, y bueno pues era muy gracioso, escucharlo de la nada por parte del castaño era muy cómico. Al notar mi actitud me calle en seguida y mire al castaño, un tanto muy apenada, el me miro con una ceja alzada y duda fusionada con molestia en su rostro, su ceño estaba fruncido y su cabeza recargada sobre su mano que estaba apoyada sobre la mesa. Este hombre si que estaba hecho un Dios, cielos ya no se si esto es ilegal o algo así.

Me acomode de la misma manera que él y lo vi directamente a los ojos, trataba de mantenerme seria, pero me era imposible, aquel rostro solo hacia que inevitablemente viera sus labios y luego sus ojos, este juego empezaba a frustrarme.

¡Besame!

Hazlo, por favor hazlo. Pero mis pensamientos no son escuchado así que lo únicos que hizo fue poner su mano sobre la mia, pero la que estaba sobre la mesa, y aquello fue más que suficiente para derretirme, ahora creo que entiendo el "como amigos pero mejor" es sumamente cursi que si lo viera desde otra perspectiva quizás vomite arcoíris o algo así.

Sonreí inconscientemente y volví a girarme hacia mis libros, sujete la mano de Shikamaru con fuerza, no planeaba soltarlo ahora que tenía una oportunidad así. Seguía leyendo mis libros y uno que otro sorbo a mi leche, pero nada fuera de lo normal.

Al final no volvimos a tocar el tema de mis heridas, y mañana tenía que ir a hablar con Sakura sobre los exámenes, no me gusta dejar a las personas a la deriva.

....
...
..
.
..
...
....

A que no se veían venir el momento romanticon, yo lo se. En fin aquí esta el nuevo capítulo mientras estoy en el trabajo, pero pues nada.

Quiero decirles, que aunque la gravedad de la situación "bajo" no se descuiden.

Bye, besitos.

🦋✨