Halftime

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Ahora estábamos frente al área en la que se realizará el examen correspondiente a esta parte, el campo de entrenamiento número 44, o bueno "El bosque de la muerte". La verdad no se veía tan atemorizante como el cerro en el que vivía mi abuela en el pueblo, en especial de noche. Un escalofrío me recorrió la espalda al recordar las leyendas y mitos rurales de aquel lugar que mi abuela me contaba todas las noches antes de dormir, para que ella tras haberme arruinado el sueño, se fuera y apagara la luz, dejando solo el sonido de los grillos el frío y la horrenda sensación de que alguien te vigilaba. Hice una mueca ante esto, los recuerdos de mi infancia eran malos en su mayoría, pero eran agradable algunas veces; sonreí con nostalgia.

Camine con dirección a donde estaba una de las tantas sombras del lugar para poder sentarme y descansar cómodamente pero choque contra una "roca" cuadrada, que casi, solo casi hace que me tropiece; mire abajo donde mi pie había chocado y alce una ceja confundida, no sabía que era esto, más que una mala técnica de camuflaje.

Ah, es verdad.

Solté un suspiro pesado ante esto, solo conocía a una persona tan mala como para ocultarse de aquella horrenda manera, Konohamaru estaba aquí y eso significaba problemas, solté un suspiro cansado ante esto y seguí caminando ignorando la caja frente a mi para seguir mi camino hacía aquel lugar que se veía tan cómodo pero la "roca" me seguía a donde fuera;  varias personas por no decir que casi todas me veían con burla o curiosidad, pero me daba igual, solo quería leer un libro. Al llegar a aquel lugar me senté con toda la calma del mundo y saque el libro que anteriormente leía con bastante calma, pero evidentemente el nieto del actual Hokage y u sequito no me dejarían en paz, el chico salió en una bola de humo del lugar junto con sus tres amigos  donde estaba yo, los chicos usaron demasiada pólvora causando una explosión demasiado llamativa que hizo que la instructora de la actividad nos regañará pero bueno, ellos tenían una excusa bastante creíble sobre un periódico y una entrevista.
Ella bueno dijo que era cierto y lo acepto, de inmediato los chicos se me acercaron demasiado y empezaron a hacer bastante ruido.

—¡Naruto! ¡Naruto! ¡¿Podemos entrevistarte?!. El niño de cabello castaños era demasiado entusiasta para mí.

Invadió de una mala manera mi espacio personal aproximándose demasiado a mi rostro, cosa que evadí retrocediendo. Volví a soltar un suspiro cansado nuevamente y mirar a los lados para volver a guardar mi libro y mirar al cielo.

—Mmmm, hay gente mucha más interesante que yo en este lugar. Dije cansinamente.— ¿Ven al chico de mallas verdes?, ¿al pelirojo? al de lentes y cabello gris? ¿Por que no preguntan cual es la tasa de éxito en estos exámenes? También entrevista a los extranjeros y demás, no soy el único con buenas historias. Señale a todos los tipos que había mencionado antes. 

—¡Bien! Si el jefe lo dice a de ser cierto. Concluyo la única niña de aquellos tres.

Y así fue como los tres niños se dividieron para entrevistar a las personas de antes,  Moegi entrevistaba a Anko, mientras que Udon fue con el chico de mallas verdes y quedaba Konohamaru que me pidió ayuda para entrevistar a los otros dos chicos, o sea Gaara y Kabuto, pero bueno el castaño recordaba demasiado a Kankuro por lo que se rehúso a ir en su dirección, sin embargo creo que ir con el de lentes era más seguro para el. Hice una seña a Sakura que estaba al pendiente de los movimientos del niño, mientras yo me acercaba a paso lento hacía los Subaku  con el cuaderno y pluma en mano, para preguntar y anotar.

—¡Hola! Lamento interrumpir su valioso tiempo, pero como oyeron antes, pues el enano me encomendó hacerles unas breves preguntas, espero no les moleste— mire a los tres chicos con toda la calma del mundo, pero mi mirada fue a dar al de cabellos rojos.— De cualquier forma somos aliados, ¿o no?. Sonreí satisfecha ante mi provocación.

¡No Soy Él!Where stories live. Discover now