[PAUSADA] B R E A T H-Jasper Hale

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Dolor, miedo. Eso expresaba el rostro de Alice y supo que si fuera posible estaría llorando en estos momentos por su visión de su hermano y se le fue imposible no sentir compasión por la chica Cullen.

Ambas vampiros caminaron apresuradamente dentro de la casa, Clare pudo oír a la distancia lo que decían los otros dos.

— Siempre estorbando.

— ¿Quién era?

— Bella, apártate.

Clare se apresuro al oír la voz apretada de su amigo y el como su corazón se aceleraba rápidamente.

— Jake, ¿quién era?

Alice fue la primera en irrumpir en la cocina mirando con la misma expresión de miedo en su rostro a la humana.

— Bella. Bella, es Edward, piensa que estás muerta. Rosalie le dijo porque vine.

Clare impresionada por oír la información completa se acercó a Jake quién se estaba afirmando de la encimera mientras su cuerpo temblaba, tocó su rostro para que se calmara.

Bella después de oír a Alice examinó algo en su mente antes de mirar exaltada a Jake.

— ¿Porqué? ¿Porqué no me dejaste hablar con él? ¿Porqué?— le recriminó alzando la voz.

— No preguntó por ti.

Ahora Clare lo entendió, quién había llamado hace unos instantes había sido Edward.

— ¡No me importa!— exclamó con desesperación la  castaña.

— Bella ¡Bella!— la llamó Alice para que saliera de su estado de exaltación y la mirada, pero Clare se preocupó más al ver su rostro más asustado—. Fue con los Vulturis.

Tanto Clare como Bella quedaron perplejas ante las palabras de Alice.

— ¿Qué?— murmuró sin aliento Clare separándose de Jacob y mirando expectante a la vampira.

— También quiere morir.

Los cuatro salieron de la casa en dirección hacía el auto de Carlisle, sólo que Jacob quería impedir que fuera Bella a toda costa. Alice utilizó su velocidad sobrehumana para llegar al vehículo y encenderlo.

— Te dejo, Bella. Ya no te quería, ¿recuerdas?— decía Jacob tratando de alcanzar a Bella. Clare llegó al auto y se metió en la parte trasera deslizándose dentro del vehículo sintiendo algo en el ambiente, era tenue, pero ahí estaba.

— No dejaré que se mate por sentirse culpable— dijo con firmeza Bella entrando en lado del copiloto y dándole el bolso con ropa a Clare quién rápidamente lo dejo a su lado. La Swan había empacado ropa tanto como para ella y para la castaña rojiza.