Lacrosse » Jeon Jungkook; BTS [#2] [Completa] ✔️

Capítulo 46 💚

Jimin y Taehyung tontean por un lado con toallas alrededor de las caderas. Si no fuera porque sé que Taehyung se muere por Minah, pensaría que esto se convertirá en un espectáculo de un dúo de gays. La mayoría se ha ido. Me atrevo a decir que somos los únicos en los vestidores.

A unos segundos de que esos dos y yo terminemos de vestirnos, reparo en Jaekyung. Fue el primero en cambiarse y lleva casi una eternidad en aquella banca con la mente perdida y la mirada en algún punto del piso. Ya es bastante silencio de su parte. Es decir, ha estado así desde que empezaron las pruebas.

—¿Qué te pasa, Jaekyung? ¿Estás preocupado por la capitanía?

La voz de Jimin parece activar el chip que vuelve cuerdo a aquel rubio pensativo. Con un suspiro exhausto se pasa las manos sobre los muslos antes de ponerse de pie.

—Eres un imbécil, Jungkook —escupe, viéndome directamente a los ojos.

La sorpresa y la ofensa es notable en mi cara.

—¿Qué?

—Jimin, tú eres otro. Te lo digo siempre, pero en serio eres imbécil. Y Taehyung —Una vez que repara en el nombrado, su semblante se ablanda y niega con la cabeza, quizá porque no es costumbre llamarlo como está a punto de hacerlo—, sabes que nunca te lo he dicho, pero hermano, también eres imbécil.

—¿Qué rayos te pasa, Jaekyung? —demanda Jimin, obviamente ofendido, puede más que yo.

—¡Y yo, mierda! —Lamentándose, se talla la cara con las manos y pasa en medio de nosotros. Luego, vuelve con la mirada a nosotros. No entendemos nada, un ceño muy fruncido está grabado en nuestras caras—. ¡Soy igual de imbécil que ustedes! ¿Cómo es que...?

—De acuerdo, Jaekyung —tercia Taehyung—, habla en nuestro idioma, porque sea lo que sea que estás diciendo, no se entiende.

—¡Joder, hablo de Songyi! ¿De quién más podría estar hablando?

El tema que trato de evitar, el que precisamente lleva el nombre "Songyi" viene con la reciente frustración de Jaekyung. No estoy dispuesto a afrontarlo porque conozco todos esos discurcitos que este trío llegó a decirme en su momento. Pretendo ignorarlo dándome la vuelta para tomar lo último que queda en mi taquilla.

—Ni siquiera lo intentes, Jungkook. No vas a ignorarlo esta vez. —No lo veo, pero siento mucho la manera en cómo me señala con el dedo.

—¿Qué no ves? Lo estoy haciendo.

—¿Cómo puedes ser tan imbécil?

—¡¿Hasta cuando vas a dejar de decir imbécil?! —Giro a él, golpeo la puertilla causándo un fuerte estrépito.

Como si fuera una vampiro corta la distancia entre los dos rápidamente, y entonces replica apretando los dientes:

—Hasta que dejes de serlo. Ahora no estoy seguro que eso sea posible. —Dos miradas furibundas se cruzan, es como si se lanzaran rayos—. Deja de engañarte, ¿quieres? Ahora me resulta patético que quieras fingir. Apuesto a que ni siquiera has dejado de pronunciar su nombre en tu mente desde que la viste. ¿Crees que no se nota cómo la miras y que lo que más has intentado hacer desde hace unas horas es buscar un motivo para dirigirle la palabra?