Ocaso en Hogwarts

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La puerta del coche se cerró con fuerza detrás de Bill, el último que había entrado. ____ estaba del otro lado del asiento apoyada contra el vidrio de la ventana, el pelo le cubría las facciones pero no era difícil adivinar la cara que tendría en ése momento. Acababa de ver a Benjamin en el hospital.
-¿Nos vamos ya?- preguntó aclarando su voz.
Parker, que la miraba a través del espejo, pasó sus ojos desde ella a Bill que mantenía la distancia dejando el espacio del medio vacío. Luego de un momento de indecisión encendió el auto, pero no salió del estacionamiento.
-¿Nena?
-Estoy bien- interrumpió a Edison- sólo me quiero ir a dormir.
El auto salió del lugar, ____ tomó aire lentamente y miró la mano de Bill que estaba con la palma hacia arriba a su lado. La tocó con la punta de sus dedos antes de acercarse a él y acostar su cabeza en su regazo. Cerró sus ojos y en menos de dos minutos se había dormido profundamente.
-Ya llegamos...- murmuró Bill.
____ despertó y se sentó sintiendo su espalda adolorida
-¿No entrarán?- les preguntó a Edi y Parker.
-Mañana se trabaja, pero estamos en contacto el fin de semana ¿O no, Bill?- preguntó Parker con precaución.
-Claro- contestó el pelirrojo estrechando su mano.
Edison se bajó del auto para despedirse con un abrazo de ____
-¿Hace falta tanto sentimentalismo Edi?- le dijo con ironía- ya ya, que me arrugas la ropa.
-Si necesitan cualquier cosa me hablan e iré en cualquier momento ¿de acuerdo?- Bill y ____ se miraron antes de asentir con una sonrisa- descansa nena, todo va a salir bien.
Se subió nuevamente al auto, la bocina sonó dos veces antes de doblar la esquina dejando atrás las manos levantadas de Bill y ____ que más tarde entraron abrazados en la lúgubre casa.
-Harry acaba de llegar pero la reunión aún no termina yo...
____ abrazó a Bill con fuerza, él se sintió desconcertado durante un momento. No era extraño que se abrazaran pero ése tipo de abrazos sí lo era. Bill recordó la noche que la había vuelto a ver en esa misma casa luego de tantos meses, era el mismo tipo de abrazo melancólico y urgente, distintos a los que compartían en momentos felices o más íntimos, ése abrazo era como un grito de auxilio. Cerró los ojos aspirando el perfume de su pelo y dándole contención.
-Tranquila- besó su mejilla y volvió a abrazarla- busco mi chaqueta y nos vamos.
-No no- ella se separó y Bill se sorprendió al ver sus ojos secos- necesitas ir y saber lo que pasa.
-Puedo faltar hoy.
-¿Y quién me pasará los chismes? Aparte le dije a Sirius que nos quedaríamos a cenar así que puedo ir preparando algo.
-No hará falta- Molly se acercó con una sonrisa genuina- ya todo está listo, puedes subir y esperar con los chicos.
-Gracias- ____ se agachó para alzar en brazos a Acho y subió haciendo silencio.
El sonido de la madera crujiendo bajo sus pasos era agradable y se atrevió a sonreír un poco mientras acariciaba al bilibrambo.
-¿Bill está aquí?- ____ escuchó una voz a través de una puerta entreabierta-Pensé que estaba trabajando en Egipto.
-Pidió un trabajo de oficina para poder venir a casa y trabajar para la Orden- el tono de voz de los gemelos podía distinguirlo, aunque no diferenciarlo- Él dice que echa de menos las tumbas, pero... aquí hay compensaciones.
-¿Qué quieres decir?
-Hola Harry ¿Cómo has estado?- dijo ____ apoyándose en la puerta.
-Tú...
-Yo...- se burló sentándose junto a Ginny que la miró molesta- ¿Entonces? Sigues vivo, me alegra mucho.
-Si, gracias- contestó dudoso- ¿Hace cuánto estas aquí?
-Semanas- contestó Ginny.
-Y ya causé muchas molestias ¿Cierto? Bueno ya me voy, no se porten mal- al pasar puso una mano sobre el hombro de Harry- en verdad me alegra mucho que estés bien.
Harry no contestó pero sus mejillas se sonrojaron levemente, ____ siguió su camino por las escaleras.

No entrar sin el expreso permiso de Regulus Arcturus Black

Rezaba en un elegante cartel sobre la puerta del cuarto que ____ había adoptado como suyo desde el año anterior, el mismo que había abandonado días atrás.
Los muebles corridos y los cajones abiertos le produjeron nostalgia, nadie había entrado luego de que ella había salido deprisa de ése lugar, sobre el suelo se había acumulado una pequeña capa de polvo pero la cama estaba aún limpia y Acho saltó enseguida para dormir. Se sentó enfrente de un escritorio y suspiró pesadamente, el sueño se había esfumado y ahora se encontraba un poco aburrida e irritada, quería ir al hospital pero tampoco sabía qué hacer cuando estaba ahí, quería quedarse con Sirius un tiempo más pero no quería perder su orgullo luego de tan poco tiempo, quería ir con Bill pero ahí tampoco se sentía del todo cómoda. Pensó con una risa triste que en el acogedor departamento su ropa aún seguía en sus baúles, como esperando el arrebato inminente que le obligaría a tomarlos y marcharse.
Un brillo reflejó sus ojos y la distrajo, se acercó a la ventana y siguió el haz de luz que entraba y golpeaba contra una cadena dorada que se aparecía debajo de un mueble, se agachó para alzarla y descubrió un extraño dije con una S grabada. Era un guardapelo, un colgante que se usaba para guardar una pequeña fotografía o un rizo de cabello en el interior, intentó abrirlo pero fue en vano, iba a probar con algún hechizo cuando alguien golpeó la puerta, se asustó como si hubiese estado haciendo algo incorrecto, apretó el medallón en su mano ignorando el extraño latido que sintió contra su piel y se lo guardó en el bolsillo de su pantalón mientras se levantaba con flojera a abrir.
Si había algo que le molestaba realmente de ése lugar era la concurrencia de personas y la incapacidad que tenían algunos para recordar que no estaban en su casa. Entraban y salían cuando querían, usaban todo y no era extraño encontrarse con alguien en los descansos de las escaleras, incluso si ése alguien no se estaba quedando en la mansión, mientras tanto ella no podía reclamar nada dado que tampoco era su casa, pero éso no implicaba que le divirtiera ver a Mundungus intentar entrar en las habitaciones vacías.
-Tonks- se alivió al ver el cabello rosa de su amiga.
-¿Esperabas a alguien más? Ya terminó la reunión, bajemos- dijo mientras le tiraba la túnica y la sacaba de la habitación.
-¿Pasó algo importante?
-Avanzamos muy lento- se limitó a contestar Tonks tropezando con las esquinas.
____ no podía comprender cómo era que todo lo que tocaba, Dora lo rompía. ¡Haces que caminar se vea jodidamente difícil Tonks, y lo aprendes antes del año! Le repetía con burla cuando la veía en el suelo.
-Sí, éso dice Bill pero yo creo... ¿Qué te ocurre?
Tonks se había detenido en mitad del pasillo y miraba el suelo, ____ la observó un momento antes de caer en la cuenta del movimiento de sus hombros, estaba llorando.
-Hey- se acercó a ella- ¿Qué te pasa? ¿Qué tienes?
La chica entró en un cuarto vacío llevando a ____ con ella y cerró la puerta detrás de ambas, el color de su cabello había cambiado a un marrón grisáceo que le hacía parecer vieja.
____ miró a Tonks con preocupación olvidándose de todos sus problemas, la joven risueña que estaba acostumbrada a ver se encontraba simplemente hecha polvo y era demasiado impactante ver el temblor de sus labios y manos que buscaban un pañuelo para limpiarse la nariz chorreante a causa del llanto.
-Tengo un problema- habló entre hipos, dándole la espalda.
-Te escucho- contestó ____ de inmediato.
-Yo... tengo un retraso.
____ no supo cómo reaccionar ni qué decir, se dejó caer en un sillón.
Sintió una molestia, se sacó el medallón del bolsillo y lo metió dentro de un cajón olvidándolo por completo. Si se hubiese acostumbrado a la pequeña incomodidad quizás las cosas habrían resultado muy diferentes, para bien y para mal.
-¿De cuánto?- preguntó.
-Diez días- dijo Tonks caminando como loca por el lugar.
-¡Hey, tranquila!- la retó ____ cuando golpeó su puño en la pared y dejó una marca- Te harás daño.
-¿Cómo le diré a mis padres?- dijo Tonks ignorando la herida de sus nudillos.
-¿Lo sabes con seguridad?- le preguntó sosteniendo su cara, Tonks negó- entonces no preguntes estupideces.
-¡Lo presiento!- gritó Tonks completamente alterada- no quiero tenerlo, yo no voy a...
-Cállate- la cortó tajante- no lo digas, Tonks. Y tampoco lo pienses.
-Pero es que no puedo.
-Primero vas a asegurarte que tu "presentimiento" no es sólo un trozo de pizza que te cayó mal.
-¿Y luego?
-Luego veremos.
-Tienes que creerme- la aurora la tomó por los hombros y la movió con brusquedad- yo no estoy lista para ésto. Yo no podré.
____ se soltó controlando el impulso de empujarla lejos de sí, una ráfaga de odio se levantó en su interior, habían cosas que no podía entender.
Se quedaron distantes, el dolor y la bronca de cada una se alzaron como una barrera que las dejaba de cada lado, apartadas con sus rencores. Hasta que Tonks volvió a llorar y se abrazó a sí misma.
-Perdón- dijo amargamente, ____ sospechó que no hablaba con ella.
-Iré por unas pastillas, no te vayas y deja el escándalo, son sólo diez días- concluyó cerrando la puerta con lentitud.
Pudo notar cómo los hermanos de Bill, Harry y Hermione querían escuchar a escondidas con sus extraños artefactos pero ____ bajó las escaleras pasando junto a ellos y sin prestarle demasiada atención. La cara de los jóvenes fue graciosa cuando intentaron guardar deprisa las cosas aunque ella apenas les echó un vistazo para evitar tropezar con ellos y siguió su camino.
-Qué extraño- murmuró Harry.
-Oh no es como si a ella le afectara que nos metamos en problema- dijo Ginny poniéndose una de las orejas.
-A veces es agradable pero a veces su indiferencia es exasperante- opinó Hermione.
-A nosotros nos cae bien- dijo George hablando por él y su hermano.
Escucharon las pisadas en la alfombra y guardaron silencio, ____ volvía a subir quince minutos más tarde.
Su semblante serio, su espalda recta, su cabello cayendo encima de sus ojos a pesar de que ella lo quitaba constantemente.
-No escucharán, han usado un encantamiento imperturbable en la puerta- les contó al grupo de amigos que se sorprendieron al notar que ella sabía lo que estaban haciendo.

Lo que empieza en Egipto (Bill Weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora