~Capítulo Cuarenta y Ocho~

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CAPITULO 48 

—¿Qué te hace pensar que Chris está vivo? —preguntó Esteban con el ceño fruncido—. La mayoría de los que están aquí estuvieron en el funeral de Christopher y todos lo vieron en el ataúd. Después fue incinerado, ¿no es cierto, Leonardo? Aparte de que han pasado varios meses. Perdón, (__), pero es imposible.

Habían pasado dos semanas desde el incendio en el que Anna había perdido la vida. Sin embargo, la policía había dicho que su cuerpo no estaba ahí. Ahora todos estábamos reunidos en la mansión, que ya se encontraba en mejores condiciones.

La casa estaba rodeada de agentes. Todavía no se sabía si Lidia había contado con más cómplices aparte de Sarah y Anna.

El padre de Sarah ya había declarado. Ambas mujeres lo habían amenazado de muerte y por eso había ayudado a Sarah a salir del hospital cuando la habían acusado de haber intentado matarme.

Sarah y Lidia habían sido declaradas culpables de la muerte de Chris, del novio de Rebecca y de Anna. Además, habían extorsionado a Abby, a Joel, a Ana y al padre de Sarah. También habían agredido a Leonardo en su propia casa y habían culpado a mi madre de algo de lo que era inocente. La lista de delitos era interminable.

Pero, los malos siempre pagaban. Ya fuera en la Tierra o en el más allá.

No tenían escapatoria.

Sarah pasaría por lo menos diez años en la cárcel cuando cumpliera los dieciocho años. Por otro lado, a Lidia le habían hecho un análisis psicológico y sus trastornos habían salido de nuevo a la luz.

Por lo tanto, no iría a la cárcel, sino que la encerrarían en un hospital psiquiátrico. Evidentemente, no recibiría las mismas atenciones que los demás. No obstante, iba a verla ese día. Por eso estábamos reunidos.

No podía decir nada sobre lo ocurrido entre Chris y yo durante todos esos meses. Tenía que omitir ciertos detalles y conseguir que la historia sonara lógica y congruente.

—Porque ninguno de vosotros sabe dónde están las cenizas de Chris ni qué pasó con su cuerpo, ¿verdad?

Todos se miraron, reflexionando la respuesta.

—No, pero Chris no puede estar vivo —dijo mi madre.

Esteban estaba a su lado. Por lo que parecía, se habían reconciliado. Iban poco a poco. Se tomaban toda la paciencia del mundo. Esteban esperaría a que mi madre estuviera lista para reanudar su relación. Aunque todavía necesitaban tomar una decisión.

—Ya han pasado meses. Es imposible que esté vivo.

No iba a darme por vencida. Tenía que hacer que la policía se movilizara y buscara el cuerpo de Chris antes de que fuera demasiado tarde. Anna había rogado que su madre nos dijera dónde estaba el cuerpo de Chris, lo cual significaba que estaba vivo.

—Sí, mamá —respondí mientras me ponía de pie—. Pero, ¿y si ella estaba cuidando de Chris y realmente nunca lo mató? ¿Y si lo tenía secuestrado?

—Es una buena teoría, (__). Pero no creo que siga con vida si ha estado secuestrado todo este tiempo... —dijo Leonardo mientras tomaba una copa de vino tinto.

Sus labios se volvieron rojos, pero no dejó de beber. Se pasó una servilleta por las comisuras de la boca para limpiarse.

—Es lo que estoy tratando de decir. A Lidia la capturaron hace dos semanas —repliqué. Empezaba a estar frustrada—. Lo más probable es que lo viera un día antes o el mismo día del incendio. Debe de estar vivo. Quizá lo estuvo alimentando.

¿Quién mato a Christopher? ADAPTACIÓN Christopher Vélez Y TuWhere stories live. Discover now