~Capítulo Catorce~

609 49 2
                                    


Capítulo 14   (LEER NOTA AL FINAL!)

Me quedé congelada. Mi mente no procesaba la información que Joel me había dado. Solo podía visualizar el rostro de mi madre. Eso no podía ser cierto. Seguro que había mentido para salirse con la suya.

—¿Qué te hizo jurar? —Fruncí el ceño a la espera de una respuesta de Joel. Afortunadamente, Christopher podía hablar de forma coherente.

Los ojos de Joel se volvieron oscuros, parecían estar perdidos y esperando encontrar una respuesta en los sucios contenedores de basura. Su labio seguía sangrando. Su cuerpo se puso rígido y los músculos de los brazos se hicieron más visibles. Vi que sus omóplatos se tensaron junto a la pared.

—Escucha (___), no puedo decirte nada. Solo... —Cerró los ojos con fuerza, como si eso pudiera remediar lo que acababa de suceder—. Finge que no has oído nada de lo que he dicho, ¿de acuerdo? — propuso con naturalidad.

El calor de la furia me inundó. Estaba cansada de todo esto, no podía fingir que no había escuchado lo que había dicho. No podía seguir fingiendo que no pasaba nada.

—¡¿Cómo te atreves a pedirme eso?!

—Yo...

—Última oportunidad, Joel —sentencié con voz dura. Estaba segura de que vería mis ojos arder. Quería que supiera que esto no era una broma—. ¿Qué te hizo jurar mi madre? —exigí saber.

Apretó los labios, pero finalmente cedió.

—Que no te enterarías.

—¿De qué?

—Hice una promesa. No puedo contártelo, (___) —dijo disculpándose.

Suspiré con frustración. Ahora me sentía otra vez yo. Estaba en paz y no había ninguna fuerza obligándome a hacer cosas o a decirlas. Había recuperado el control de mi cuerpo y de mi mente. Estaba furiosa y todos los músculos de mi cuerpo me respondían.

¿Dónde estaba Chris?

«¿Chris?», lo llamé mentalmente.

Esperé.

No hubo respuesta.

Entonces lo entendí. Habría supuesto que esto era un asunto entre Joel y yo, y que, por lo tanto, no debía entrometerse.

—Joel. Por favor... —supliqué.

Él negó con la cabeza.

—Lo siento —se limitó a decir.

—¿Por qué me has llamado antes? —grité. Sentía tanta frustración que me entraron ganas de llorar.

—Yo... No. No puedo. —Sacudía la cabeza, mordiéndose la lengua—. Te lo repito: deja de hacer lo que estás haciendo, aléjate de todo esto.

—¿Por qué? —insistí con un hilo de voz.

—Es peligroso para ti —dijo escuetamente. Parecía cuidadoso con sus palabras, medía exactamente lo que tenía que decir. Era listo.

—Pero dame una maldita razón para entenderlo —supliqué. Las piernas me temblaban todavía.

Se me formó un nudo en la garganta. No podía tragar. Si Joel lo notaba, eso me haría parecer débil y dolida, y no podía permitirlo. Quería parecer fuerte, como si todo aquello no me afectara. Una lágrima se deslizó por mi mejilla. Era cálida, o tal vez mi piel estaba demasiado fría. Rápidamente, y con un movimiento salvaje y brusco, me pasé la mano por la cara para limpiarla.

¿Quién mato a Christopher? ADAPTACIÓN Christopher Vélez Y Tuحيث تعيش القصص. اكتشف الآن