Mejores Amigos (Parte II)

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Shawn se levanta y se alista. Yo aún sigo tendida sobre la cama, aún desnuda. Lo observo vestirse y colocarse colonia, y arreglarse el cabello. Después me pongo de pie, y agarro mi ropa para volver a ponérmela.

—¿Te duelen las piernas?

—Como si no supieras. —Abrocho mi jean, mirándolo seriamente.

—Entonces he echo bien mi trabajo. —Me mira con una sonrisa burlona y me guiña un ojo.

Hoy es martes, son las nueve de la mañana, y en un par de horas deberíamos estar llegando al estudio de Calvin Klein. Ayer por la tarde, llegó Andrew, y salí con él y Shawn a recorrer un poco Nueva York. Fuimos a comer hamburguesas como a las once de la noche, porque era la hora adecuada para poder tener un poco de privacidad. De todas formas, unas fotos de ese día están ya en el internet.

Me doy un último vistazo en el espejo, antes de salir de la habitación.

—¿Vas a bajar a desayunar?

—Sip.

—Pero si tienes todo un banquete justo aquí, nena. —Me mira chistoso.

Ay Diosito. ¿Qué he hecho para merecerme un amigo así?

—Si, pero prefiero los huevos y las salchichas grandes. —Le guiño el ojo, y me voy.

Punto para mí.

Bajo en el elevador y cuando llego al comedor, hay mucha gente, pero llego a divisar a Andrew en una mesa, al fondo.
Me acerco a la mesa de comida y agarro un plato. Me paseo por la barra para ver qué comer, y se me caía la baba de todas las delicias que veía. De veras que soy capaz de tragarme todo de una sola, pero sentía que era muy temprano para comer mucho, y además tenía una sesión de fotos en unas horas, y lo más probable es que me tope con chicos sumamente sexys, y no quería tener problemas estomacales.

¿A quién engaño? La comida va ante todo, y tenía a Shawn. A Shawn no le importa si se me afloja el estómago en medio lugar.

Así que agarro panqueques, helado de Oreos, y un pedazo de torta de zanahoria. De beber, jugo de naranja. Me voy hacia Andrew y éste se topa con mi mirada, pero se sorprende cuando ve lo que sostengo.

—¿En serio vas a comerte todo eso? —Pregunta divertido.

—Sip. —Respondo simple. Tomo asiento frente a él y comienzo a devorar todo.

—Solo asegúrate de ir al gimnasio.

—¿Qué me estás queriendo decir? —No me molesto en tragar antes de hablar.

Andrew solo ríe y niega. Justo después llega Shawn con su plato lleno de proteínas y verduras. Hago una mueca cuando pone su plato en la mesa.

—¿Qué? ¿Esto es nuevo para ti?

—Oh, que lindo eres Shawn, tomaste mi consejo, ahora tienes huevos. Pero te falta la salchicha. —Hago una mueca, conteniendo mi risa.

Pero Andrew suelta una carcajada, y Shawn lo mira serio.

—Lo siento, Shawncito, pero eso fue gracioso. —Dice cesando su risa. —Como sea, me voy a descansar un rato y yo les aviso cuando estemos por salir.

One Shots (Shawn Mendes)Where stories live. Discover now