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Ambos estaban sentados sobre la cama del azabache, mientras este con cuidado iba pasándole una crema por la cara al menor, él cual se entretenía contando cuantas veces veía pestañear al mayor en un minuto.

-Siete- susurró sin quitar la atención de sus ojos.

-¿Siete qué?- preguntó sonriendo el mayor, terminando de pasarle crema, le revolvió un poco el cabello.

-Nada importante- sonrió ladeando la cabeza, se recostó hacia atrás.

-Oye- susurró recostándose de lado junto al rubio- ¿volverás a tu casa luego?- preguntó, a lo que el más bajo le miró tímido.

-Bueno, si quieres me puedo ir hoy- murmuró bajando la mirada- lo siento, no pensé en ti, si te incomodaba que estuviera aquí sólo debías decirlo, me iré hoy no te preocupes, soy un idiota perdón- se disculpó sentándose nuevamente.

-Oye no, espera, no me refería a eso. No me incomoda que estés aquí, de hecho me encanta- le sonrió tomándolo del brazo obligando a que vuelva a acostarse- sólo quería saber si tenías las intenciones de volver, porque yo no quiero, pero tampoco podría obligarte a quedarte- explicó.

-Bueno no lo sé, yo me puedo ir cuando tú lo digas, y también si quieres que me quede, entonces lo haré si tú lo dices- susurró comenzando a enrollar su dedo en su camiseta.

-No, no es cosa de que si yo digo lo haces, es cosa de que si tú quieres- corrigió.

-Entiendo, lo siento.

-No tienes que disculparte.

-Verdad, se me olvida, lo siento.

-Lo hiciste otra vez.

-Perdón.

-Y otra más.

-P-perdón- tartamudeó- ¡No!, n-no lo siento, digo si, bueno no, pero ¡Ay! Perdóname soy tan idiota- se quejó cubriéndose el rostro con las manos.

El pelinegro suspiró agotado, girándose un poco quedó viendo el techo- sólo deja de disculparte por todo- pidió y se llevó una mano a la frente cansado cerrando los ojos.

Asintió cohibido, mirándole de reojo, le había hecho enfadar, era un verdadero imbécil, su madre tenía razón, a veces se merecía un golpe por idiota, ¿Y Yoongi querrá golpearlo? Había hecho que se molestará, lo mejor sería que descargara su enfado con quien lo provocó ¿o no? No le molestaría, después de todo era su novio. Aunque el mayor no mostraba señales de querer hacerlo, quizás no estaba seguro, pero debía saber que a él no le molestaba, había hecho que se enojara, se lo merecía.

-Yoongi- le llamó, tocando uno de sus brazos- siento haberte hecho enfadar, soy un tonto, puedes golpearme si quieres, lo merezco- susurró sonriéndole, tratando de darle un poco más de ánimo.

-¿Es broma?- preguntó girándose a verlo con el ceño fruncido. El menor negó con la cabeza.

-Pero trata de no dejar muchas marcas por favor, no me gustan- murmuró bajando la mirada- aunque no debería decirte eso, sólo hazlo como quieras.

-Dios... ¿Qué te han hecho?- susurró, llevándose ambas manos a su rostro frustrado.

-No entiendo.

-Quiero saber- quitó sus manos dejando ver sus ojos un poco vidriosos- ¿Qué tanto te han hecho para que pienses que mereces eso? ¿Por qué dices que lo mereces? Nadie merece que lo golpeen sólo por disculparse.

-Lo siento, no debí haber dicho eso, no te preocupes, no es nada- susurró desviando la mirada llorosa.

-¿Quién fue?- preguntó llevando una de sus manos a su rostro, acariciando con el dedo una herida.

No more smiles / yoonmin ADWhere stories live. Discover now