capitulo 64

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La mañana fue completamente horrible para mí, no tengo ningún animo de levantarme y mucho menos de hablar con alguien, ni siquiera con James, alguien había falsificado mi firma y le llevo mis papeles de divorcio a Dean, mis sospechas apuntan a Margarita pero aun no puedo culparla ya que no hay pruebas y la actitud de Dean tampoco ayuda nada la situación, pero a decir verdad ¿En serio quiero separarme de Dean? ¿En serio quiero alejarme de él? todo se vuelve muy confuso para mí en este momento, por una parte no es su culpa, literalmente no está bien de la cabeza y probablemente cuando recupere la memoria nos arrepentiremos de todo esto pero por otra parte él ni siquiera me ha dado oportunidad, hicimos el amor una vez y se sintió mas como una necesidad de complacernos sexualmente que como una demostración de amor, aparte de eso él solo se ha dedicado a alejarme y mostrándome que está mucho mejor sin mí, no lo odio, no lo odio para nada, pero estando en esta asquerosa habitación completamente sola he descubierto que ya no siento lo mismo por Dean, que al mirarlo ya no siento esas mariposas en el estomago y esa emoción que siempre me envolvía, no se que siento cuando lo miro, pero en definitiva no es amor, mi teléfono suena y no tengo mas opción que contestar, sobre todo al ver el nombre del señor Adrian en la pantalla.

—¿Lo encontraste? —me preguntó algo cauteloso.

—Si, lo encontré —le contesté lo mas neutral posible.

—¿Y por qué no han venido?

—Su hijo no es fácil de convencer y no quería colaborar, ya hablé con él y está dispuesto a volver el lunes y como condición debo salir de sus vidas.

Hubo un silencio desde la otra línea.

—Es extraño escucharte decir "su hijo" y no "mi esposo" en fin, no puedes hacer eso.

—Es eso o Dean no vuelve.

—¿Te llevarás a los niños? —preguntó él algo asustado.

—Por supuesto —dije levantándome de la cama.

—A mi mujer no le gustará eso.

—Yo solo quiero a mis hijos, de igual forma la promesa es que yo me alejaré de ustedes, no ellos.

—Solo encárgate de traerlo y arreglaremos eso después —dijo ahora algo triste—. Y Emily, cuida que no diga nada acerca de los negocios familiares.

—¿Acaso sucede algo? —pregunté al escuchar la cautela de su voz.

—Los jefes están algo inquietos con la partida de Dean, puede que no recuerde nada acerca de ustedes pero aun conoce muchas cosas del negocio y nos preocupa que hable de más.

—Esta bien intentaré contactarlo y hablar con él sobre eso.

—¿Ya perdiste la esperanza, cierto?

yo guarde silencio un momento.

—Yo no perdí la esperanza, Dean me la arrebato.

—Entiendo... y puedo saber ¿En dónde esta metido mi hijo?

—Sinceramente señor Adrian, ni yo lo sé.

—Esta bien, te llamaré en estos días para saber que mas averiguaste.

—Perfecto.

Había acordado con James que iré a su casa hoy pero decido no hacerlo, no estoy de animo para hablar con ellos y mucho menos de explicar lo que sucede, simplemente le dejo un mensaje diciéndole que no me siento bien y que probablemente vaya mañana, pero aún no estoy segura si solo seria por hoy.

La semana pasó horriblemente lenta, localizar a Dean es mas difícil de lo que cualquier persona pensaría, intentar si quiera hablar con algún pandillero es algo complicado y que me dieran información sobre él es una misión casi imposible, tres tipos dijeron que me darán la información si me acuesto con ellos cosa que rechazo inmediatamente, cuando me doy cuenta el sábado ha llegado y bien temprano Jack me llama.

—¿Qué decidiste? —preguntó al otro lado de la línea.

—No me quiero acostar contigo —le respondí con firmeza.

—Entonces no te daré información.

—Pues no lo hagas, ya estoy apunto de encontrarlo por mi cuenta.

—No te creo...

—No tengo porque mentirte.

—¿Estas diciéndome que me hiciste pasar todo ese trabajo investigativo para al final no aceptar pagar? así no se juega, Emily.

—Te pagaré pero no así.

—La cosa es que esa es la única forma de pago que me interesa.

—Pero no quiero...

—¿Y si te digo que tu esposo o ex esposo o lo que sea fue capturado el jueves porque lo encontraron teniendo relaciones sexuales en un auto en la carretera?

—¿Qué?

—¿Y si te digo que esa mujer con la que estaba es esa rubia hermosa que lo acosaba?

—No te creo.

—Bueno, no me creas, nos vemos en media hora en la cafetería Chips y te mostraré el expediente.

Fui incrédula hasta el ultimo momento, hasta que Jack me muestra una carpeta con la información, efectivamente, la descripción de la ficha policial lo dice, fue capturado junto con una mujer identificada como Mariana Spencer ya que fueron sorprendidos sosteniendo relaciones en un auto, cierro rápidamente la carpeta y se lo devuelvo.

—Te lo vuelvo a preguntar —fijo sus ojos en mí—. ¿Hasta cuando planeas guardarle fidelidad?

—No se trata de la fidelidad —me recosté a la silla, me siento muy agotada—, tú no me gustas, no me atraes para nada, el olor a cigarrillo es asqueroso y no creo que si quiera lograré excitarme contigo —le susurré tratando de disimular.

—¿Segura que solo es eso? —preguntó inclinándose hacia adelante para acercar su rostro al mío.

—Si, segura.

—Supongo que no puedo hacer nada al respecto —se alejó de golpe resignado—. La carrera es hoy así que nos veremos allá.

—¿Un detective en una carrera clandestina? —pregunté mirándolo con la ceja levantada.

—Te sorprendería cuantos compañeros asistimos a esos eventos tan exclusivos.

Después de acordar la hora y el lugar donde será la carrera voy a casa de James, después de una larga charla acerca de lo que haré después de llevar a Dean, no sabemos aún si sus padres seguirán dándome dinero o que pasará, es otra conversación que debo tener con mis suegros, cuando por fin oscurece voy al lugar donde Jack me había citado, es una especie de bodega abandonada con un acantilado a un lado y una carretera larga y recta pasando frente al edificio, la cantidad de carros y motos ubicados en el lugar es impresionante, muchos hombres tienen camisetas negras y chaquetas de cuero mientras las mujeres apenas si llevan ropa lo cual no parece muy cómodo teniendo en cuenta el frío que hace en esta época del año, yo definitivamente resalto con mi playera manga larga negra y mis jeans ajustados, camino en medio de la multitud buscando a Jack o a Dean pero no logro reconocer a nadie, camino detrás de unos autos planeando acercarme a unas chicas que se encuentran de pie al lado de un auto hasta que escucho que una lo menciona, lentamente me acerco y me recuesto al auto fingiendo ver hacia el acantilado.

—¡Cuéntanos ya! —le pidió una de las chicas.

—¡Es que es vergonzoso! —admitió otra.

—¿Tan malo fue? —preguntó otra.

—¡No tienen idea! —dijo la mujer de manera dramática—. Bien les contaré... Dean y yo fuimos a mi cuarto, nos besamos y todo, me quito toda la ropa y cuando me siento sobre él... nada.

—¡¿Nada?! —gritaron las dos chicas al tiempo.

—Su pequeño amigo no se levantaba —dijo la chica completamente decepcionada, si sobre todo pequeño—. Lo acaricie, lo metí a mi boca, hice de todo, incluso vimos porno y nada, ni siquiera se movía.

Las dos chicas comenzaron a reír como locas.

—Oye y si es gay —sugirió una de las chicas.

—No me sorprendería.

—No, él no es gay —dijo la chica de la historia—, porque esa noche él se quedo a dormir conmigo y tuve que echarlo porque no dejaba de mencionar a una tal Emily estando dormido —contó la mujer algo molesta.

fuertes lazos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora