Betsy 83

1.7K 86 2
                                    

Me quedo pensativa con el teléfono en la mano sin formular una sola palabra de aquello ocurrido hace exactamente 20 minutos. Aun no entiendo que fue lo que pasó ni porque decidió tomar esa decisión. Escucho la puerta abrirse y luego cerrarse dejando entrar a Barbie por ella y se para en seco y me observa, también lo hago.

-¿Qué sucedió? ¿Dónde está mamá y papá? –me pregunta preocupada.

-No lo sé. –contesto sin la menor razón de su paradero y sinceramente ahora no me interesa.

-¿Ocurre algo, Be? –vuelve a preguntar sin acercarse. Mantiene su distancia. No respondo.

-¿Be? ¿Estás bien? –empieza a caminar hacia mi lentamente hasta que quedamos cara a cara.

-Rick acaba de cortar conmigo y no entiendo porque.

-¿Qué? –Se asombra exageradamente. -¿Por eso tienes esa cara de muerte? Dios mío Betsy me has asustado como el infierno, creí que te había pasado algo malo, o a mamá… o a

-¿Acaso no lo ves? ¡Ha terminado conmigo sin ningún motivo u explicación! ¿No es malo para ti? –la fulmino con la mirada ante su egoísmo de emociones.

-No es malo para nadie. –responde como si nada. –Es más, creo que te hacía mal para la salud. –sigue diciendo mientras termina acostándose en el sofá como una vaca preñada.

-Tú eres un maldito virus. –le grito y me giro corriendo hacia mi habitación. Este día ha sido de mierda, como todos los lunes. Ella solo se la pasa acostada, tragando  o haciendo quien sabe que con quien sabe quién. No ha ido a la escuela un solo día y no me gusta para nada tener que ser yo la que por obligación haga todo en esta maldita casa. ¡Yo no soy su maldita sirvienta! Grito desesperadamente mientras entro a mi habitación compartida con la fiera con reposos de santa. Barbie no es buena, es una egoísta, caprichosa, altanera y siempre quiere salirse con la suya, y lo que más me molesta es que lo logra. Siempre gira todo en torno a ella. De no haber sido por ella ni siquiera estuviera aquí, estaría con Rick  y no habríamos terminado. ¡Todo, absolutamente todo es culpa de ella! Me quedo de espaldas a la puerta y caigo al suelo atrayendo mis rodillas hacia mi rostro. Agacho mi cabeza y lloro sin ninguna explicación. Bueno, si tengo una explicación. He terminado con Rick y no sé porque… miles de excusas se me vienen a la cabeza de porque una persona decide poner fin a una relación sin explicación alguna.

 -Encontró a alguien más interesante.

-Se enamoró de alguien que está cerca de él.

-No quiso esperarme.

-No pudo controlar la fidelidad a distancia y decidió optar por el facilismo.

-Simple y sencillamente ya no me quiere.

-Ya no me extraña.

-Ya no me ama.

-Nunca lo hizo…

 Lloro aún más fuerte de la impotencia de no poder ir hacia él, hablar personalmente, y poder verlo. Esto no puede quedarse así, tiene que haber una explicación a todo esto. ¡Kendra!

No quiero creerlo, pero es la única que se me viene a la cabeza. Levanto mi cabeza inmediatamente y me seco las lágrimas con la mano y me levanto. Busco por todos lados mi celular hasta que lo encuentro al filo de  la cama.

Empiezo a marcar a su número. Me contesta a la tercera llamada.

-Dime porque lo hiciste. –mis lágrimas vuelve a salir y no puedo controlarlo.

-Betsy, yo…

-Dímelo, Rick. Dime por favor que no es por Kendra.

-No, claro que no, Betsy …

-Dime maldita sea porque lo hiciste. –No sé en qué momento dejé de hablar y empecé a gritar.

-Betsy no hagas esto.

-¿Qué no haga qué? Tú has terminado con esto sin ninguna explicación.

-No eres tú…

-Sí, ya he escuchado esa frase mil veces.

-Betsy, lo siento. Yo…

-¿Lo sientes? –me limpio inútilmente una lágrima y me río. -¿Lo dices enserio? –pregunto sarcástica. –No creo en tus malditas palabras y me arrepiento infinitamente de haber estado contigo, Rick. Ya sé por qué estás haciendo esto… Te estas desquitando de lo mucho que te ignoré por años.

-Betsy no digas eso por favor.

-¿Entonces qué? ¿Qué es Rick? –Termino dejándome caer al suelo sollozando. –Yo creí en tus palabras…

-Betsy yo te amo…

-Eres un maldito mentiroso, ni siquiera sé porque te he llamado.

-Betsy por favor perdóname. –su voz suena apagada y su respiración acelerada.

-Solo dime por favor porque lo hiciste…

-Yo… enserio lo lamento. –corta la llamada. Me quedo en la misma montaña de confusión que hace un momento. Mi boca se abre a medida que trato de formular algo y mi cerebro procesar todo esto. Sigo sin entender que le hice o porque reacciono de esa manera. Sus palabras duelen, pero que no haya querido volver duele aún más. Mis lágrimas salen inconscientemente y me siento mareada. Mi cabeza da vuelta y no puedo levantarme. Trato inútilmente de pararme pero mis rodillas no cooperan. Siento mis piernas como gelatina y decido quedarme un momento más así mientras sigo luchando por otra explicación a que la única que tengo en mente quiero ignorarla y no creerla. No puede ser cierto… simplemente no.

Rick no me ama y nunca lo hizo… y yo me enamore de él como una loca.

LAS GEMELAS McDylanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora