Me dirijo a la cocina a prepararme algo inútilmente para comer, porque la verdad es que no tengo hambre, pero tengo antojo de algo. ¿Será un embarazo psicológico? Así como les sabe pasar a los padres, pero… Yo no soy el padre. Arrugo la nariz ante ese pensamiento tan erróneo, y niego con la cabeza. Suena el timbre, y me sobresalto. Creo que la más nerviosa de todo esto soy yo.
Abro la puerta con mi cara de susto, y me encuentro con una sonrisa perfecta que me deleitan con una hermosa vista.
-Hola, mi amor. –Dice Rick cargando en una mano un ramo de rosas y en la otra mano películas. –Pensé que querías compañía, así que te traje la mejor. –Dice sobrado.
-Pensaste bien. –le digo, y me inclino para darle un beso en esos maravilloso labios con sabor a menta.
-¿Sucede algo? –pregunta confundido mientras cierro la puerta.
-No, nada. –Soy una perfecta mentirosa.
-¿Seguro?
-Sí, seguro. ¿Quieres tomar algo? ¿Qué películas trajiste? –digo quitándosela para cambiar de tema y aligerando el ambiente.
-He traído boba comedias románticas que tanto le gustan a las chicas, y unas de acción.
-Bien por ti. –digo ojeándolas. Me quita las películas de las manos y me observa detenidamente.
-Eres una pésima mentirosa, así que dime ahora que sucede o lo averiguaré.
-No pasa nada Rick… -Le vuelvo a quitar las películas, y me dirijo hacia la sala para poner las películas.
-Como digas. –dice rendido.
Se sienta en el mueble frente al televisor para ver la película mientras yo decido cuál de todas poner.
-¿Enserio? –le digo mirándolo. -¿Bajo la misma estrella?
Me mira confundido. -¿Acaso quieres irte de moco tendido y deprimirte toda tu vida cuando muera Gus y Hazel?
-¿Has leído el libro?
-Pero claro que sí. Aún no lo supero, y quieres volverme hacer ver la película.
-Bueno, ya me dañaste el final. Busca otra.
Sigo ojeando y vuelvo a mirarlo confundida. -¿Acaso viniste a deprimirme para verme llorar?
-No, mi amor ¿porque? –le muestro la película.
-¿Siempre a tu lado, Hachiko? ¿Enserio?
-De acuerdo, para la próxima te llevo para que tú las elijas.
-Esta es linda. –lo miro sonriente.
-¿Cuál?
-The notebook.
-Sí, mi hermana las escogió y dijo que primero veamos esa.
-Ya las he visto todas, pero esta la vería mil veces.
Me sonríe y da palmaditas en el asiento de su lado para que vaya hacia él. Pongo la película y nos acomodamos abrazados para verla.
-Hola Rick. –dice Barbie a lo lejos mientras se mete en la cocina quien sabe para qué.
-Hola Barbie.
-Ven a ver una película con nosotros. –Rick me codea y lo miro divertida.
-Un segundo. –contesta Barbie.
-¿Qué? –susurro en silencio.
-Luego no nos podemos besuquear.
-Yo creo que verás la forma para hacerlo. –le doy un guiño, y sigo mirando la película que aún no empieza, están pasando los trailers.