Llego a la casa, pero sigo asustada de no saber dónde se encuentra Barbie. Llamo a su celular, pero no contesta. Estoy tan preocupada dando vueltas por toda la casa mientras espero la llegada de Barbie. Llega las 3 de la tarde, y ella aun no aparece.
Tengo que decirle que mañana le dan de alta a Ben. Quizá ella este en estos momentos. Lo pienso un rato mientras me tranquilizo un poco. Al cabo de unos segundos llega Barbie de lo más normal sin importar todo el alboroto que he causado en su búsqueda.
-¿Se puede saber dónde mierda estabas? He estado preocupada por horas. –me mira confundida mientras saca algo de su bolso.
-He estado caminando y me entretuve con una tienda nueva de ropa para bebes. –dice sonriente sacando un enterizo de bebe color amarillo con manchas en las mangas como jirafa. Me da ternura verla ya como toda una madre. Sonrío con ternura y me acerco a coger el diminuto trajecito.
-Es precioso, Barbie.
-sí. Me encanto cuando lo vi en la vitrina, y lo compre.
-¿Fuiste a ver a Ben? –le digo mientras le entrego el traje.
-Sí.
-Mañana le dan de alta. –por la reacción de ella me doy cuenta que no lo sabía.
-¿De verdad? –dice emocionada.
-Sí. Hoy me dijo Jenn, pero no te encontré. Por cierto… ¿Por qué te fuiste? –Se queda un rato pensativa mirando la ropa del bebe.
-Ya todos lo saben. –dice sin mirarme.
-¿Te dijo algo la puta de Kendra? Te juro que mañana…
-No. –me mira. –no me importa.
-¿Entonces porque te fuiste?
-Porque justo en ese momento si me importaba.
-¿Y porque ya no?
-Porque estando con Ben me di cuenta que el resto no me importa. Solo importamos nosotros. Mientras estemos juntos lo demás es invisible, y los comentarios vacíos. –dice con la mano en el pecho.
-¿No te parece algo exagerado? –le digo burlándome.
-Exagerado es la obsesión de Rick contigo. –responde torciendo los ojos mientras se aleja riendo felizmente con el trajecito en las manos.
Veo como se aleja dando pasitos ridículo, y suena el timbre. Barbie se para en seco y se gira. Nos miramos confundidas y corro a ver quién es.
Abro la puerta, y me encuentro con una Kim muy asustada y desesperada.
-Dios mío, ¿Dónde te has metido? Recién me acabo de enterar de todo gracias a Jenn, ¿Se puede saber cuándo pensabas contármelo? Hola, Be. –sonríe saludándome después de gritarle a Barbie desde la entrada.
-Hola, Kim. Entra. –le digo.
-Gracias.
-Woh… para tu carrera caballo. Te lo iba a decir, pero Kendra ya se encargó de decirle a todo el mundo que estaba embarazada. –dice Barbie explicándole.
-Espera… ¿Qué tu qué? –Grita aún más fuerte. Barbie y yo nos miramos asustadas. Kim palidece y reacciona de una forma muy diferente de la que me imaginaba.
-¿Es de Ben? –pregunta asustada.
-Uhmm… ¿Preferirías que fuera de otro? –Dice Barbie confundida.
-¿Cómo sabes que es de él?
-¿Quieres detalles? –Barbie la mira frunciendo el ceño.
Sigue pensativa con la mirada perdida, pero después de unos segundos me mira de regreso de golpe.
-¿De cuantos meses estas?
-Uhm… 3 semanas. –responde arrugando la nariz
-¿Y Ben?
-Él está bien.
-Me refiero… si se va a ser responsable…
-¿Es una pregunta?
-¿Se hará responsable sí o no?
-¿Por qué te importa tanto? –Toda esta preguntadera está sacando de casillas a Barbie y a mí.
-Barbie no te pongas a la defensiva.
-Es que me estás haciendo muchas preguntas.
-¿No será porque no me has contado nada?
-Claro que iba a contártelo, simplemente…
-Simplemente tuviste mejores cosas que hacer. –dice molesta.
-Kim… -la reprende, pero sale de la casa molesta. Me quedo observando cómo se aleja, y Barbie se desploma en el sofá.
-Olvídalo. Se le pasará. –Le digo calmándola
-Lo sé. –contesta suspirando.
Me dirijo hacia mi habitación a descansar después de tanto estar esperando a Barbie, pero decido por darme una ducha primero para luego ir fresca a terminar mis tareas.
