22. Besé a un chico

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  Con un estómago lleno y una actitud despreocupada para comenzar el día, Liam se puso sus jeans y su camiseta de lacrosse favorita antes de agarrar su mochila y sus botas y saliendo hacia el auto de Mason esperándolo.

  Su amigo charló alegremente con Corey en el asiento delantero, solo buscando su opinión cuando los dos recordaban que él estaba ahí. A Liam no le importaba, estaba contento de que su amigo había encontrado a alguien tan especial, también estaba solo contento con disfrutar de su compañía y ser dejado a sus propios pensamientos. Los dos eran autosostenibles y no lo necesitaban para entretenerlos.

  Cuando llegaron al colegio, Liam salió primero, dejando a la pareja hacer lo que fuera que hacían antes de clase. Liam se movió por los pasillos con más confianza que en los últimos días, finalmente sintiéndose un poco relajado y más normal a medida que las personas le sonreían y le deseaban suerte en lugar de encogerse en miedo y mirarlo fijamente. Y no es que lo fuera a admitier, pero sus ojos seguían filtrando entre las multitudes, cazando a un cierto jugador de fútbol americano de ojos verdes, pero sin permitirse estar molesto cuando ni lo vio. «Lo verás en el almuerzo» se prometió a sí mismo y se abrió camino a través de los pasillos llenos hasta su primera clase.

  Mason se sentó a su lado como siempre, sus los labios luciendo un poco más llenos que en el carro. Liam solo sonrió tontamente y levantó una ceja, a lo cual Mason se rió disimuladamente y sacudió su cabeza tímidamente, apartando su mirada y abriendo el libro de texto que Liam sabía que tenía memorizado en ese punto.

  —¿Así que las cosas están bien, entonces? —preguntó, voz mezclándose con el ruido de los otros estudiantes antes de que la campana sonara.

  Mason lo volvió a ver con una atontada sonrisa en su cara y asintió.

  —Mucho. ¿Tú? —cuestionó él de regreso. Liam también sonrió y asintió antes de voltearse para picotear una pieza de piel colgando de uno de sus dedos.

  —¿Sabes que está bien que no quieras decirme todo? No me importa que te hayas acercado más a Nolan y que Theo haya hecho un regreso en tu vida, sabes eso, ¿cierto? —añadió Mason suavemente.

  Liam lo miró culpable, sabía que él y Mason no habían hablado como solían hacerlo desde hacía tiempo... sabía que esa conversación se avecinaba. Ya no eran marginados de primer año. Mason tenía a Corey, que era por lo que estaba tan feliz por su amigo, y él tenía al lacrosse y a Nolan.

  Suspiró con alivio.

  —Lo sé. Y sabes que estoy tan feliz por ti y Corey, ¿cierto? —Mason sonrió, una con dientes que hacía que sus ojos se iluminaran.

  —Lo amo —susurró y luego miró a Liam seriamente—. Siempre serás uno de mis mejores amigos, sabes, esto no cambia nada. Que nos vayamos a separar al final de este año no cambia nada.

  Fue como si un peso que no sabía que estaba ahí se levantó de su pecho.

  Él movió su cabeza de arriba a abajo, palmeó a Mason en la espalda y luego sacudió su cabeza.

  —¿Ya terminamos de ser sentimentales? Se supone que debo estar entrando en la zona —bromeó, riéndose de la expresión de alivio de Mason.

  —Sí, te amo, viejo... pero ser tierno contigo es raro —Mason estuvo de acuerdo. Liam solo se rió un poco más. Ese era el Mason que él conocía y estaba feliz de estar de vuelta en terreno familiar con él.

  La clase comenzó y, sorprendente, estaba perdido en los primeros cinco minutos, confiando en Mason para llevarlo a través del laboratorio que tenían que realizar. Y, como lo usual, Mason se molestó con él rápidamente e insistió en hacer el trabajo él mismo, solo pidiéndole que sostuviera algo cuando la señora Finch hacía sus rondas para hacer lucir como si Liam estuviera participando.

Rivals AU | Thiam {Español}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora