Capitulo 15

449 27 0
                                    

La tercera fase estaba a punto de dar inicio y los primeros participantes ya estaban en el área de combate. Consistiría en un combate grupal entre los miembros de cada equipo genin. Se conservaban las mismas reglas de la anterior fase para ganar, se debía incapacitar a los oponentes o hacer que se rindieran.

El equipo 7 de Konoha se enfrentaría contra el equipo 2 de Oto, en donde Dosu, Zaku y su tercer miembro, Kin, se mostraban muy confiados ante Naruto y sus compañeros. La chica de aquel equipo no contaba con una armadura vistosa, solo con unos guanteletes metálicos que tenían cada uno, dos tubos de tamaño reducido, en donde el Uzumaki ya tenía una idea de cuál era su utilidad en base a sus visiones.

-Entonces jugamos primero o los aplastamos de una-dijo Zaku a sus compañeros.

-Lo segundo. El Otokage pidió una fuerte demostración de fuerza. No debe quedar ninguno en pie-le dijo Dosu.

-Lamentaran haber mandado a esos mocosos-dijo Kin.

-Ustedes manténgase detrás de mí y levanten una fuerte defensa- dijo Naruto a sus compañeros.

-Hey no te estés creyendo mucho por lo que te dijeron-le dijo Sasuke.

-Es que esos tipos usan bastante metal y quisiera probar unas nuevas técnicas-dijo el chico con una sonrisa de confianza.

El Uchiha y la Haruno tragaron nerviosos, las cosas que hacia el chico cuando sonreía de esa forma, nunca eran seguras.

Era desconocido para el equipo 7 que Dosu los estaba escuchando en ese momento desde el otro extremo del campo, pues su oído había sido entrenado para ser bastante sensible y percibir con eficacia su entorno. El hombre se molesto mucho por el hecho que el rubio les estaba subestimando.

A la voz del examinador, el equipo de Oto se puso en guardia, mientras que Sakura y Sasuke se ubicaron cerca de las paredes de la arena, a las espaldas de Naruto.

-Kin deja a ser insolente como un colador- ordeno Dosu a su compañera.

-De acuerdo- la kunoichi del sonido entonces tomo en sus manos aquellos artefactos que portaba y los apunto hacia el rubio.

Aquellas cosas eran básicamente unas pistolas de clavos. Un invento que había sido desarrollado en Oto con la finalidad de tener una forma de lanzar proyectiles con una potencia y cadencia mayor a la que podría hacer el brazo de un shinobi promedio.

Si bien la idea original era disparar kunai o sebon, los primero resultaron ser difíciles de ajustar a los prototipos, que por necesidad debían ser pequeños y los últimos eran muy frágiles como para aguantar la presión a la que serian puestas.

Varillas de metal de punta afilada fue la solución a ese problema. La fuerza del proyectil venia de un mecanismo activado por chakra Raiton que le daba la potencia suficiente como para atravesar arboles y rocas sin problemas, lo que hacía que no hubieran una defensa posible ante aquel instrumento letal, ya que ni siquiera esquivar era una opción pues el proyectil iba demasiado rápido como para que una persona normal pudiera reaccionar.

-Muere-dijo Kin para accionar su artefacto que empezó a descargar una furiosa ráfaga de clavos contra Naruto.

Los presentes no daban credibilidad a la velocidad a la que iban aquellos proyectiles, pero pronto empezarían a cuestionarse de la eficacia del arma de la kunoichi.

La razón era que Naruto estaba recibiendo de lleno aquella de clavos de clavos sin el menor daño. El rubio estaba más bien sintiendo cosquillas mientras los proyectiles rebotaban sobre su piel.

Decir que los shinobi de Oto estaban espantados, era decir poco. Ellos sabían que incluso un bloque de hierro cedía luego de ser expuesto a una ráfaga de los clavos reforzados por el Chakra Raiton. Kin no dudo en descargar toda su munición para cerciorarse de que no estaba haciendo algo mal.

Naruto el remolino relampagueanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora