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Pov Natalia.

La noche al final quedó bien. Sin poder evitarlo acabe bailado con Alba. Iba bastante borracha. Era gracioso verla así. Con los mofletes colorados por el alcohol y el calor del baile. Su pelo un poco deshecho y la voz ronca arrastrando las palabras. Mientras bailábamos me miraba intensamente. Algunas veces se mordía el labio y juro que en esos momentos sentía arder todo mi cuerpo. Si yo también hubiera estado borracha no se que habría pasado.

Quede con Sabela a las 12 para ayudarla a recoger y de paso reírnos de la resaca de los hermanos Reche. Seria una comida divertida.

Ya habíamos recogido todo y ahora estábamos preparando unos macarrones para comer. Habíamos oído el baño un par de veces así que suponíamos que ya se habrían despertado.

Mientras ponía la mesa apareció Alba por el pasillo con cara de no haber dormido en días. El pelo deshecho en un moño pequeño. El pijama le quedaba grande e iba arrastrando los pies. Cuando me vio le salió una sonrisa tímida y se puso roja.

-Buenos dias borracha- Dije riéndome al verla.
-Calla calla que me explota la cabeza- Dijo riendose mientras se sentaba y se cogía la cabeza.
-Los últimos 3 chupitos te sobraban, pero no me hiciste caso- Me senté enfrente de ella con una sonrisa burlona en la cara. Ella bufó.
-Hombre Alba, estas viva- hablo Sabela saliendo de la cocina.
-No vuelvo a beber más de verdad- decia cruzando los brazos sobre la mesa y dejando caer su cabeza encima de estos.
-Ahora te traigo algo para la resaca- Dijo Sabela aguantando la risa mientras volvía a la cocina.

De un momento a otro apareció Joan. Con mucha peor cara que Alba y con la mano en la tripa.

-Ni hables Nat, se lo que me vas a decir- Me dijo sentándose en la silla de mi lado mientras yo reía sin parar. Desde luego aguantar todo anoche valía la pena solo por verlos así. Joan era el culpable.

Sabela salió con dos vasos de agua y dos pastillas. Hoy le tocaba a ella ser la enfermera.

-Gracias amor- Joan la abrazaba por la cintura al estar sentado y ella de pie a su lado. Ella le acariciaba la cabeza. Alba y yo nos mirábamos con una sonrisa al ver la escena de los dos tortolitos.

Comimos entre risas hablando sobre la noche anterior. Alba estaba atacando a su hermano diciéndole que Sabela y yo lo tuvimos que llevar a la cama por lo mal que iba.

-Oye pues tu no hables- Le dijo Sabela- Que sino te llega a llevar Nat a tu cuarto te hubieras quedado en el sofa.- Yo me puse a reír y Alba casi se atraganta con el agua.
-¿Que?- se puso muy roja. Por lo visto no se acordaba de nada.
-Diselo Nat- Me dijo Sabela con tono de burla. Yo solo podía reírme.
-Pues eso, que no podías ni levantarte tu sola y te lleve a tu cama.- parecía que se estaba muriendo de vergüenza.
-Madre mia, lo que yo diga, no vuelvo a beber más.- Dijo tapándose la cara.
-Ahora no me vengas con esas- seguí yo- Que anoche estabas muy contenta de que fuera tu enfermera particular.- Joan y Sabela se pusieron a reír. Alba parecía un tomate.
-Ay Natalia calla porfavor- No podía aguantarse la risa ni ella.

Después de comer me fui a casa. Iban a hacer la siesta y yo no tenía sueño. Quedaríamos más tarde si no se despertaban tarde. Joan no quería saber nada de despertadores.

Ya llevaba dos horas en casa y ya no sabía que hacer. Fui al cuarto a por el movil que lo había dejado cargando. Al encenderlo vi que tenia 6 mensajes. Unos del grupo, otro de Marta, la cual me debía alguna explicación y uno de un número que no tenía guardado. 

"Gracias por cuidarme ayer, no tenias porque. Te debo una Nat. Por cierto soy Alba."

Una sonrisa tonta me salió en la cara. Con un simple mensaje me hacía sentir cosas. No era normal. Vi su foto de perfil y joder...no podía ser más perfecta.

"No hay de que rubia. A lo proxima me cuidas tu y en paz."

No se porque le dije eso, más que nada porque pocas veces me emborrachaba tanto como para perder el control sobre mi.

"Eso está echo guapa. Voy a ver si duermo o me muero ya del todo. Bona nit"

Me reí sola.

"Descansa fea."

Empezaba a sentirme agusto con ella. Era una persona fácil. A la hora de hablar. Seguía teniendo dudas de que habría pasado para que acabase en Madrid. Pero no iba a ser yo la que la agobiara a preguntas, más que nada porque si ella me las hacía a mi tampoco se que le diría. Poca gente sabia cosas de mi pasado y de mi vida, y así quería que siguiera. Sabela es lo único que tengo ahora mismo como familia directa y así quiero que siga.

Pov Alba.

Una conversación tonta con ella y ya no podía parar de sonreír. Sabia que estaba empezando a liarla al empezar con este juego. Si llegara a mas y acabara haciéndole daño a Natalia ni Joan ni yo misma me lo perdonaría, pero yo tenia ese don, hacer daño a la gente que me quería y con ella no podía pasar. Aunque lo que decía y lo que hacía no coincidía.

Recordaba perfectamente toda la noche anterior, pero quería ver que decía Natalia. Me hizo mucha gracia eso de enfermera particular. La verdad que esa situación en la comida me dio mucha vergüenza, pero valía la pena por dos cosas. Por las risas que hemos tenido comiendo y por el tierno beso que me dio anoche antes de salir de mi cuarto. Natalia me empezaba a gustar.

De todas formas ella nunca a estado con una tia. Al menos en el juego no bebió, pero eso no significaba que yo no le gustara. Su comportamiento conmigo había cambiado. De no mirarme y estar seria a la conversación y risas de antes en la comida había mucha diferencia. Empezaba a estar agusto con todo lo que estar en Madrid se refería. Ojala siempre estar asi de agusto. El sueño ya me estaba ganando. Me quede dormida.

Stay.Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang