Jamás, Scarlett. (Promises #1)

Capitulo 35: Pst, Liam.

Capítulo 35: Pst, Liam.

Al parecer, los padres de Samantha querían asegurarse de mejorar la relación con mi familia, por el bien de su pareja. Y esto lo llevarían a cabo realizando "reuniones familiares" más seguido, empezando este domingo. Donde, por el cumpleaños del padre de la novia de mi hermano, nos invitaron a jugar al golf, al GOLF, ese deporte de ricachones.

- Scarlett Carter, tenemos que ir. Odio esta situación tanto como tú, pero mientras tu hermano siga con Samantha, hay que aguantarla. Prométeme que harás tu mejor esfuerzo. - rodando los ojos asentí, no muy convencida si estaba diciendo la verdad. - Podrías invitar a Liam, no lo trajiste mas a casa.

Desde el día de la cena con los padres de Libby, ellos todavía piensan que el idiota y yo estamos juntos, y eso fue hace tres meses. Y mi progenitora ha estado insistiendo en que lo invite a cenar, o a almorzar, o a merendar, o a cualquier cosa, y me cuestiona cuando no lo hago. Lo cierto es que, además de la incomodidad y la vergüenza, los últimos días han sido un desastre para todos en la escuela. Primeros exámenes, entrega de trabajos, temporada de juegos del equipo. Es casi inexistente el tiempo libre que poseemos.

- Adios, mamá. - respondí irritada mientras dejaba el bol de cereal que estaba comiendo en la mesada de la cocina y me encaminaba hacia la puerta.

- ¡Invítalo, Scarlett! - fue lo último que escuché antes de cerrar la puerta y comenzar a caminar hacia la escuela.

Los estudiantes iban llegando poco a poco hacia la institución, todavía no estaba muy llena. Al llegar, divisé a Charlie hablando con un chico, al que jamás había visto antes. Me acerqué a ellos. Apenas el chico vio que caminaba hacia ellos, se fue.

- Hey, Scar.

- Charlie. ¿Quién era ese chico? - pregunté, dejando ver mi gran curiosidad.

- Alguien de mi clase, quería saber si una tarea era para hoy. - respondió con simpleza, dirigiéndose hacia el instituto.

En el poco tiempo que la conocía, me había hecho muy cercana a Charlotte. Era muy parecida a mi, en muchos aspectos. Sin embargo, tengo un raro sentimiento como que no conocemos todo acerca de ella, que hay algo que esconde.

- Hace mucho no tenemos una "juntada de chicas" - acentuó las comillas con sorna. A ella no le iban estas cosas. - Pueden venir a mi casa esta tarde si quieren.

- Por mi perfecto. - le sonreí.

Con todo lo que ha pasado últimamente con Liam, Liberty, la boda de Karen, etc. hacia mucho que no nos sentábamos simplemente a hablar todas juntas. Sin Logan, sin Jayden, sin Liam, sin Tyler, sin Chad, sin Auguste. Este último, por cierto, estaba saliendo con Lottie. Son muy lindos.

- Buenos días, chicas. - nos saludo un sonriente Chad abrazándonos por los hombros. Venía acompañado de Tyler.

- Buenos días, Scar y tu. - dijo haciendo una mueca de disgusto al decir la última palabra, refiriéndose a mi amiga.

En las últimas semanas nos habíamos hecho muy amigos entre todos, al parecer no eran personas tan nefastas como pensaba. Creo que últimamente, mi vida está caracterizada por la cantidad de veces que me doy cuenta que no deberíamos dejarnos llevar por los estereotipos.

Tyler y Charlie eran otro asunto. Se la pasaban peleando, parecían niños. Aun detrás de todo eso, podemos darnos cuenta que se agradan, es una amistad un poco rara, solamente. Es más, si Tyler no estuviera con Gianna, creo que todos pensaríamos que se gustan.

- Hola, Chad. Hola, imbécil. - rodó los ojos.

- ¿Que te trae tan contento hoy, Chaddy? - me burlé de él, con el apodo que había escuchado de su madre una de las veces que fuimos a su casa, provocando que ruede sus ojos con molestia aún sin borrar su sonrisa.

- Tengo una cita.

- Con Liberty. - añadió Ty por el.

- ¿Enserio? No puedo creer que esa bastarda no me haya dicho nada. Felicitaciones, Chaddy. Liberty no es para nada fácil, debes haberlo gustado bastante.

Y lo decía enserio, solo había visto a Libby con probablemente dos chicos en toda su vida. Si bien tenía esa actitud extrovertida y divertida, se tomaba enserio sus relaciones y no le gustaban las cosas a medias. Tuvo también una mala experiencia con un engaño, así que es bastante reservada con los chicos.

- Quita tus asquerosas manos de mi chica, Ross. - exclamó una voz detrás de nosotros.

Miré con curiosidad y confusión a Liam, quien se limitó a sonreírme y pasar su brazo por donde anteriormente lo tenía su amigo y darme un beso en la mejilla. Me guío hacia la puerta de la escuela.

¿Como dices que dijiste, Finnegan?

——

- Pst, Liam. - llamé su atención en clase. Me miró adormilado, no le gustaba para nada esta materia. - El domingo iremos a jugar al golf con la familia de Samantha, - rodé los ojos - y mamá insiste en que vengas, ¿te gustaría?

- Me encantaría. - me sonrió somnoliento con in cabeza apoyada en su mano mientras me miraba de costado.

- Entiendo si no quieres ir, es súper aburri... Espera, ¿quieres ir? - asintió. - Estás loco, Finnegan. - sonreí.

——

- ¿Que haremos después de clases? - preguntó Ty, en la hora del almuerzo.

- Iremos a la casa de Charlie. - contesté.

- Perfecto, podríamos comprar unas hamburguesas de camino. - sugirió Chad.

- Uhm, creo que no entendieron. - todos los chicos de la mesa la miraron con confusión, mientras las chicas intentábamos aguantar la risa. - Lo de mi casa, será una reunión de chicas, así que a menos que decidan no tener más pene, no están invitados.

- Oye, ¿por qué esa discriminación? - preguntó ofendido Chad, a lo que todas nos encogimos de hombros al mismo tiempo, gesto un poco escalofriante que sea tan sincronizado.

- Bueno, si ustedes pueden tener una reunión de chicas, nosotros tendremos una reunión de chicos. - contraatacó Liam.

- Oh, ¿y que harán? ¿Pintarse las uñas, probarse ropa? - me burlé de él.

- Tal vez. Tal vez nos gusten esas cosas.

- ¿No será que están un poco celosos? - dijo Tay intentando reprimir las carcajadas.

- No. No las necesitamos, podemos divertirnos nosotros solos. - aseguró Ty.

- Bien. - gritó Lottie.

- Bien. - gritó él.

- Bien. - volvió a exclamar ella y se retiró de la mesa.

Siempre debe tener la última palabra.

.

.

.

.

•Multimedia: Auguste (Adrien Sahores).

-S.