—¿Por qué crees eso? —Isaac pasó su mano por su pelo mirando a la chica.

—No lo sé, eres linda y agradable, aunque siempre lleves una cara de pocos amigos. —Él se encogió de hombros. —Eres cool.

—Quizás Blair lo gane este año. —Él pareció quedarse pensando en ello. —Blair siempre ha sido linda y agradable, es la indicada para ese puesto. A mí me da igual, a decir verdad, lo encuentro algo tonto.

—Oh claro, eres muy cool para estas cosas. —Isaac le miró con una sonrisa burlona.

—Y tu muy tonto para interesarte en esto. —Ambos se sacaron la lengua algo divertidos. —Quizás podemos ayudar un poco a Blair para que esté en el lugar que siempre debió estar, creo que a ella le interesan estas cosas.

—¿Qué planeas? —Drew se encogió de hombros.

—Pues podemos mover algunos votos y ya, no será muy difícil. Aunque la cuestión será robar algunos votos, por así decirlo, no lo digo en forma literal. —Drew le aclaró rápidamente al darse cuenta de sus palabras.

—¿No deberías preocuparte de que tu novia se mantenga en el mismo lugar? —Isaac le molestó y la castaña le miró confundida.

—Yo no tengo novia.

—Oh claro, con Anastasia solo salen.

—Solo fue un beso, Isaac. —Drew le dio la espalda empezando a caminar rumbo al gimnasio, tenía que ir a entrenar.

—Lo lamento. —Ella se giró a mirarle una vez más. —No es un asunto que deba interesarme, lo siento.

—No estoy enfadada, me agradas. —Ella le sonrió y notó algo raro en el chico, como si sus mejillas se hubiesen empezado a sonrojar. Debió ser su imaginación. Drew volvió su camino al gimnasio para su entrenamiento.

Peter vio como Blair empezaba su camino para tomar el autobús y notó que ninguno de los chicos estaba alrededor, no dudó en seguirle rápidamente para alcanzarle, era su momento de empezar a avanzar con Blair. Se iba a acercar para tomar su brazo y entrelazarlo, pero entonces notó lo decaída que la pelirroja estaba.

—¿Blair? —Ella le miró forzando una sonrisa al reconocerlo. —¿Vas a casa?

—Pues sí, tengo que estudiar para los exámenes y esas cosas. —El chico asintió.

—¿Puedo acompañarte?

—Claro. —Ella le sonrió levemente antes de retomar su camino a la parada de autobuses.

—Normalmente te vas con Drew, ¿No? —La pelirroja asintió.

—Hoy tenia practica con las porristas, Nina se fue con su novio así que preferí irme a casa. —El moreno asintió. —Tengo mucha suerte al encontrarme contigo, Peter.

—Digo lo mismo. —Dijo algo nervioso, no se esperaba aquello.

—Drew no suele dejarme irme sola a casa pues siempre me duermo en el autobús y ya me ha pasado que he tenido que caminar bastante para llegar a casa, así que te pido por favor que me despiertes en mi parada. —Él asintió con una pequeña sonrisa.

—Solo con una condición. —El autobús se detuvo y ambos entraron sentándose en los últimos asientos.

—¿Cuál?

—¿Me dirás que es lo que te pasa? —Ella le miró algo sorprendida. —Te noto algo desanimada, ¿Ha pasado algo? —Blair bajó la mirada viendo sus manos que jugaban entre ellas.

—No es algo malo, solo quizás estoy cansada. Además, supongo que este cambio o giro en mi vida ha sido sorpresivo y aun no puedo acostumbrarme a todo esto. Nunca esperé tenerlos a ustedes de amigos o bueno, lo que sean. —Ella soltó una pequeña risa haciendo a Peter sonreír. —Supongo que están pasando cosas que nunca esperé.

—Quizás también influye que por nosotros no puedas pasar tanto tiempo con Drew, ¿No? —Ella le miró rápidamente preguntándose si él lo había notado también. —Ustedes parecían ser las mejores amigas, supongo que no le agradamos lo suficiente, así es ella, ¿No? —Blair negó con una pequeña sonrisa agradecida de que él no lo había notado.

—No es que sea así, ha pasado por cosas complejas como todos y supongo que lleva su vida así para protegerse. —Peter asintió entendiendo lo que la pelirroja quiso decirle fácilmente.

—Puedes apoyarte en mi hombro para dormir, no te preocupes. —Blair le sonrió agradecida antes de acomodarse luego de darle su dirección al moreno. El chico debió dejarle en su casa antes de ir a tomar el autobús para irse a su casa al otro lado de la ciudad.

Drew salió al estacionamiento y se sorprendió al ver ahí a Teresa esperándole, no dijo nada y solo dejó su bolso atrás antes de subir al auto junto a su amiga de la infancia quien no decía ni una palabra y ella tampoco había insistido, simplemente tomó su camino a casa.

—¿Dirás algo? —Drew miró a su amiga mientras entraban al departamento.

—¿No es algo que yo debería preguntar? —La castaña dijo confundida ante la pregunta de Teresa. —Tú eres quien se ha aparecido de la nada.

—Oh, claro, cierto. —Drew rodó sus ojos. —Pensé que algo había pasado, no contestaste mis mensajes ni nada, decidí venir a ver qué pasaba y pensé en pasar antes por tu instituto.

—No me ha pasado nada. —Ella se encogió de hombros. —Solo quería concentrarme en mis estudios durante el fin de semana.

—¿Es así? —Drew asintió y Teresa no tardó en tirar de su oreja. —Mentirosa.

—Auch, Teresa. —La castaña se quejó. —¿Qué te pasa?

—Tuve que enterarme por los chismes de tu instituto sobre el hecho de que besaste a alguien. —Drew recordó el beso con Blair y sintió sus mejillas enrojecer. —Oh mi Dios. ¿A quién besaste?

—En la teoría, Anastasia me besó a mí. —Sabía que hablaban de la rubia, era el único beso que se había hecho público esa noche. —Bueno, quizás es mejor aplicable nos besamos en este caso. —Drew se encogió de hombros y Teresa tiró de sus mejillas.

—¿Por qué no me habías dicho nada?

—Teresa, me duele.

—Lo tienes merecido. —Ella se cruzó de brazos luego de soltar sus mejillas dejándole las marcas rojas y adoloridas en las mejillas de Drew. —Nunca me dices esas cosas.

—No creo que sea tan relevante. —Drew se tiró en el sofá. —Ahora prepárame algo de comer, muero de hambre.

—No estúpida, pide alguna pizza. —Drew le miró con ojos suplicantes y Teresa le tiró uno de los cojines que tenía cerca impactando en su cara. —Bien, yo pediré la pizza y tu la pagas, eres la mejor.

—Te odio.

—Yo en este momento me siento traicionada, es lo mínimo que puedes hacer luego de que volvieras a ocultarme que ya te estas besando con alguien más. —Drew suspiro.

—No sé qué te preocupa tanto. —No pasó mucho cuando Teresa estaba sobre ella a horcajadas haciéndole sentir nerviosa. —Teresa, quítate.

—Recuerda que cuando eras niña prometiste estar conmigo siempre. —Teresa acercó su rostro a Drew quien tragó fuertemente. —Prometiste que te casarías conmigo, las promesas no se rompen. —La castaña bajó la mirada para ver los labios de Teresa que estaban demasiado cerca de los suyos.

—Teresa, yo no sabía que tú sentías esto por mí. —La castaña dijo nerviosa y la latina empezó a reír fuertemente antes de separarse de Drew. —Idiota.

—Soy una excelente actriz, ¿No? —Dijo tomando su celular. —Ya no me interesa casarme contigo, era un capricho, aunque lo pensaré si ambas terminamos solas solo para tener tu fortuna. —Teresa se fue a la cocina riendo y Drew solo oculto su rostro en sus manos, esa mujer le iba a matar de los nervios.  

¿Y Ahora Me Quieres?Where stories live. Discover now