6. Él

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Hakyeon terminó de imprimir los contratos de los nuevos modelos, los mismos que aparecerían en los reportajes y portada del número de este mes. Ahora solo tocaba esperar a que llegasen para que los firmaran, así que se dirigió a la mesa de su amigo, desaparecido desde ayer.

- ¿Me vas a decir ya donde te metiste? - Pero el mayor no obtuvo respuesta ninguna, pues el pelinegro tenía la mirada absorta en la pantalla del ordenador, leyendo lo que fuera. - ¡Tierra llamando a Taekwoon!

Suspiró frustrado al ver que seguía sin hacerle caso, pero en el momento que decidió rodear su zona de trabajo para llamar su atención, el fotógrafo de la revista apareció a su lado.

- Hakyeon los modelos ya han llegado. ¿Tienes los contratos listos?

- Claro Hongbin, diles que pasen por mi mesa.

Dicho esto, el chico de hoyuelos le sonrió y volvió a su estudio. Por otro lado el moreno echó un último vistazo a su amigo, el cual seguía con la vista en el ordenador, como si nadie hubiera estado hablando delante de él y se dirigió a su silla.

Volvió a coger los contratos para revisarlos de nuevo, ambos estarían allí durante dos semanas para hacer los reportajes especiales de navidad y fin de año. Kim Hyuna era una modelo bastante conocida, y no era la primera vez que posaba para la revista, recordó el número que superó records de ventas estando ella en portada. Luego leyó el nombre del otro chico que posaría con ella.

- Lee Jaehwan. – No le sonaba.

- En carne y hueso. – Escuchó sobre su cabeza.

Pero en cuanto la levantó el mundo cayó a sus pies, pues aunque aquella noche estuviera con varias copas de más, recordaba a la perfección lo que pasó, el cómo se dejó llevar por la música y como le gustó que aquellas manos, que ahora estaban apoyadas sobre su escritorio, recorrieran su cuerpo con destreza. Y aunque lo negaría siempre, lo que esos labios gruesos hicieron sobre su piel era puro arte. Tragó fuerte, tenía calor pero nunca lo diría.

El chico delante de él sonrío, al parecer también lo había reconocido.

- ¿Tú eres el modelo? – Preguntó intentando camuflar sus nervios.

- También puedes llamarme Ken. ¿Recuerdas? – Claro que lo hacía, aun así disimuló.

- Lo siento, creo que nunca nos hemos visto. – Estaba claro que no valía para actor, carraspeó. – Siéntate, firmaremos los papeles, la estilista te espera y Hongbin te necesita en el estudio cuanto antes.

No hablaron más que para señalarle donde tenía que colocar su nombre y las copias que tenía que guardar, se intentó relajar pero notaba constantemente como el modelo lo miraba fijamente, así que fue complicado. Aunque al despedirse notó temblar su mano y su pulso el doble de rápido, al observarlo se dio cuenta del porque el muchacho tenía ese trabajo, pues su atractivo era más que evidente.

Intentó cambiar sus pensamientos en cuanto Hyuna apareció para hacer los mismos procedimientos que con Jaehwan, se presentó amablemente aunque ya se conocían y la estuvo observando. La chica era realmente atractiva, iba maquillada aunque no le hiciera falta, el vestido azul eléctrico se ajustaba a la perfección a su cuerpo esbelto, nadie creía que nunca hubiera pasado por quirófano.

En cuanto se levantó, observó cómo andaba sobre sus tacones realzando su belleza aún más, Hakyeon no pudo evitar mirar su parte más baja de la espalda, todo un monumento. Normalmente ya debería sentirse acalorado, no era la primera modelo espectacular que pasaba por allí, de hecho después de firmar, solía coquetear con ellas para después pasarlo bien. El problema vino a partir del cumpleaños de Taekwoon, cuando utilizó todas sus armas para pasar la noche unos días después con aquella modelo italiana. Lo consiguió, pero no sintió la misma satisfacción, ni con ella ni con las dos chicas más con las que intentó complacerse, pues nada era comparable con esa gran y adorable nariz que recorrió su abdomen entre las sábanas del hotel más cercano que encontraron.

Tu toque de ColorWhere stories live. Discover now