Solo tal vez (omegaverse)

Capitulo 30

Por Yuuri.

Habían pasado unos días, ya podía moverme como antes, Mari había regresado, aunque siempre estaba de mal humor, Nikolai resulto que era una buena compañía, aquel hombre solía contarme anécdotas de Yurio o de Viktor, mi padre no me había hablado y suponía que me evitaba, siempre que me daban una tarea era Celestino u Otabek el que me las daba, pero le agradecía eso.
Mi mamá después de su encuentro secreto con Pitchit y Viktor, no me volvió a sacar el tema, solo me miraba con tristeza y siempre aprovechaba que mi papá salía para ir a mi cuarto o incluso bajar conmigo a hablar con Nikolai.
Hoy se esperaba cambiar nuestra ubicación, mi madre me había dicho que muy pronto terminaría todo, me sentía aliviado cuando me lo dijo, pero al saber que significaba me sentía terrible. Mi madre me pidió que la acompañara de compras y cuando íbamos de salida mi padre me lanzó el collar que me había mandado, lo miré por primera vez con odio y el me regaló una sonrisa cínica .

-No saldrás de ahora en adelante si no lo llevas puesto- dijo mirándome, luego miro a mi madre- y no esta a discusión.- dijo retirándose. Mi mamá me coloco el collar, nos miramos por unos momentos, veía su tristeza y su impotencia.

-Esta bien- le dije sonriéndole y abrazándola , le di un beso en la frente y salimos. Llegamos al centro comercial y después de que se llevara casi todas las cosas que había en la tiendas me pidió que fuera a dejarlas al auto y me indicó que nos veríamos en un restaurante, hice lo que me pidió, pero al volver a entrar en la plaza sentí el aroma de Viktor, tan tenue y casi imperceptible, me puse en alerta, pero no pude reaccionar cuando alguien me jalo, pero aún así sonreí cuando vi un mechón de color naranja.

-¿cómo estás Yuuri?- me dijo Minami soltándome.

-Mejor que tu- le dije escaneándolo- me dijeron que Viktor te tenía, así que ¿cómo saliste de eso?-

-Realmente es muy divertido- dijo rascándose la nuca- mis hombres fueron por mi- Solté un suspiro, era poco probable que pudiera pasar eso, pero, no quería discutir, solo necesitaba encontrar a mi madre para salir de ahí. -Si buscas a Hiroko ella está comprando un helado,¿sabes Yuuri? No se porque siento que ya no confías en mi- dijo caminando rumbo al área de comida- extraño - dijo como un susurro. Llegamos a un local donde se encontraba mi madre, la miré y cuando miro a Minami sonrió, la convencí de que debíamos irnos y gracias a la insistencia de ella, ahora Minami vendría con nosotros, después de todo era parte de esto. Tardamos varios minutos en llegar a un edificio que parecía abandonado, aunque cuando entramos vimos todo lo contrario, en el primer piso había todo lo que eran las habitaciones, en el segundo la sala de inteligencia, ósea de Mari, en la tercera habían puesto a Nikolai y a Yakov, en el cuarto estaba la sala de juntas y en el quinto estaba el gimnasio, aunque en este habían ciertos horarios para su uso, agradecía eso, así no tendría necesidad de entrenar cerca de mi padre.
Cuando Lilia vio a Minami, su cara de sorpresa se hizo presente al igual que su molestia, mi padre en cambio lo recibió con toda la felicidad del mundo. Incluso le había dicho que podía hacer lo que quisiera en el edificio, los dejé con sus saludos y fui a ver Nikolai.

-¿como se encuentra?- dije entrando al cuarto, este realmente parecía ser su cuarto, las esposas se habían ido y ahora tenía una cama, una silla y una ventana que no podía abrirse.

-Al menos ya no estoy atado- dijo cuando me vio- aunque siendo sincero me asusta esta comodidad, dime ¿ya va a terminar?-

-Si, tardo más de lo previsto pero todo terminara- le dije mirando sus ojos.

- ¿Estás listo para eso? - yo asentí.

-debe ser así, no puedo oponerme a mi padre, además, mi familia para bien o para mal es lo único que tengo-