Capítulo 7. El caso del corazón delator: 221 C

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POV Brigette.

No sabía bien qué decir o qué hacer era una situación muy incómoda. La mujer a la que habían llamado Wanda, parecía muy amable, pero con carácter, los ojos de ella me recordaban a los de Sherlock cuando estaban grises, su cabello ya estaba cano, y era rellena. Hizo una mueca mientras miraba a Sir. Presumido que me recordó a Mycroft. Fruncí el ceño.

Entonces comencé a deducir, su altura era menos que la de Sherlock una cabeza para ser exactos, además que su piel era muy blanca, su acento era muy marcado del nativo inglés y parecía tener un gusto muy artístico. Estaba felizmente casada, y parecía preocuparse más por otras cosas que por su matrimonio, su economía era estable por las maletas, además de su joyería. Tenía dos hijos, negué lentamente, tres hijos por la anchura de su cadera. Entrecerré mis ojos, era diestra, qué más, entonces alcancé a mi mente, pero, si era la mamá de Sherlock, por qué había deducido que tenía tres hijos solo conocía a Mycroft y obviamente al "Único Consultor del Mundo", fruncí mi ceño, quizá me había equivocado... O tal vez no.

Deje de lado eso, ya me daría el tiempo de averiguar mejor ese punto, pase a observar a la chica que miraba muy emocionada a mi Riccio, salía a correr los músculos de sus piernas estaban definidos, su cuello era largo y le encantaba vestirse de forma casual, su cabello rubio que, hacia un perfecto juego con sus ojos, trabajaba en una editorial...

"Mentira" La voz de Mike apareció en mi mente, sacudí mi cabeza levemente, no, no era editorial. Escribía sí, tenía manchas de tinta en su pantalón, pero, volví a negar, ya nadie usaba tinta para escribir. Fotocopiadora, era secretaria. De eso era de lo que se había manchado su pantalón, era ambidiestra, y muy confiada de sí misma, ni siquiera revisaba su cabello, pero de vez en cuando pasaba su vista por el espejo que estaba detrás mío, iba a seguir deduciendo hasta que sus ojos se fijaron en los míos, por alguna razón sentí que necesitaba cuidar algo, necesitaba poner otra postura, erguí mi cabeza inconscientemente, notando que ella hizo lo mismo.

- ¿Brigette? - la voz de John me saco de mis deducciones, y me fije que todos me observaban.

-Oh perdón, mi nombre es Brigette Collins- dije mirando a la mamá de Sherlock, junto a Farrah- Es un gusto conocerla Sra. Holmes y Farrah- me acerqué para tomar la mano de ambas, en un gélido saludo con la chica, en cambio la Sra. Holmes me había sonreído abiertamente.

-Puedes llamarme Wanda, es un gusto conocerte- dijo mientras yo volvía a mi puesto cerca de la chimenea- ¿Eres algo de Sherlock?

-Holmes solo observo a su madre con desaprobación- No, solo amigos- auch, decir eso me había dolido muchísimo, ella sonrió con ¿Tristeza?

-Oh bueno, claro, me lo imaginaba- Wanda busco sentarse en el sofá- Y dime ¿de qué trabajas? - se había sentado con dificultad, supe entonces que tenía problemas en la cadera, se llevaría bien con la Sra

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-Oh bueno, claro, me lo imaginaba- Wanda busco sentarse en el sofá- Y dime ¿de qué trabajas? - se había sentado con dificultad, supe entonces que tenía problemas en la cadera, se llevaría bien con la Sra. Hudson, sino es que ya se conocía, seguro tomaban juntas las hierbas que mi amable casera guardaba muy bien en su cuarto.

My Deception (Sherlock)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora