One Shots Malec/ Alec Y Jace(parabatai)

Continuación 52

Alec y Magnus subieron las escaleras de la mano hasta llegar a la antigua habitación del nefilim. Magnus se sentó en la cama de Alec con total confianza mientras que Alec buscaba alguna camisa que dejarla.

-Mags, quítate la camisa y dámela, la dejaré en el baño hasta que nos vayamos.

-Sabes que podría hacer desaparecer la mancha con un chasquido de dedos, ¿verdad? Pero si insistes en que me desvista, no seré yo quien te niegue el placer- dice en tono juguetón mientras se quita la camisa y se la tiende a Alec que, completamente rojo, la coge y le tiende otra que, para sorpresa del brujo no está ni agujereada ni desteñida.

-No lleva purpurina pero es lo mejor que tengo- Magnus la coge divertido viendo como Alec trata de no mirarle directamente para no enrojecer más.

-Cariño, me has visto mil veces desnudo y aún te sigues avergonzando

-Lo...lo siento- dice Alec sentándose a su lado con una sonrisa

-No lo hagas, eres adorable

Una vez que ya tiene puesta la camisa le da un tierno beso al nefilim que, a pesar de corresponder sonriente, estaba preocupado y Magnus lo notó. El brujo se sentó con las piernas cruzadas quedando cara a cara con Alec.

-A ver, ¿qué preocupa a mi precioso novio?

-No estoy preocupado...

-Alexander...

Ante el tono de advertencia de Magnus el nefilim suspira riéndose y le confiesa lo que le preocupa.

-Lo de abajo... ha sido mi culpa, lo siento. Si no te hubiera besado no habría pasado nada.

-Oh, por Lilith, cómo puedes ser tan idiota. Esos nefilim me odian desde siempre pero me da igual. Además, ¿crees que preferiría no besarte? Antes de alejarme de tus labios quemo yo mismo mi armario.

Alec sonrió ante sus palabras y Magnus volvió a besarle.

-No es así con las generaciones más jóvenes- aseguró Alec- No lo sabía porque nunca me he relacionado con otros nefilim de mi edad, pero son mucho más tolerantes y abiertos que la generación de mis padres y me alegro de que así sea.

-Y en parte es gracias a ti- dice Magnus haciendo que los ojos de Alec conectaran con los suyos.

-¿Qué dices?

-Yo sí que trataba con otros nefilim y es verdad que jamás me trataron con asco sino con respeto pero lo que hiciste en el Salón de los Acuerdos...les diste el valor que necesitaban. Más de uno de esos jóvenes ha tenido que romper amistades o relaciones con subterráneos por miedo a una posible exclusión de la Clave. Pero ahí estabas tú, Alexander Lightwood, el arquero que durante la invasión a Idris salvó tanto a nefilim como a subterráneos, desafiando a la Clave al besar a un subterráneo delante de todo el mundo.

Alec no podía creerse las palabras de su novio. Cuando besó a Magnus no pensó en nada de eso, solo pensaba en la decepción y el dolor de Magnus cada vez que negaba su relación. Y su sorpresa estaba lejos de acabar.

-Les diste alas para hacer lo mismo porque vieron que jamás te echaste atrás, que la Clave e incluso tu propio padre intentaban impedirte hablar en las reuniones pero que al final todas tus estrategias eran aprobadas por mayoría absoluta. Te vieron salvar el mundo de la mano de ese brujo al que habías besado, te vieron ir a una dimensión por él. Los adultos dejaron de tacharte de inmundo al ponerte el nombre de héroe pero los jóvenes no, los jóvenes vieron como ese héroe se convertía en humano gracias al amor que le tenía a un brujo y que era ese mismo amor el que te impulsaba a ser un héroe.

Alec no sabía que decir, tenía una mano en los labios, tratando de no decir nada pues sabía que si hablaba lloraría, lo que le acababa de decir Magnus haría llorar a cualquiera y más viendo la cantidad de amor que reflejaban los ojos de Magnus.

-Por el Ángel, Mags- el brujo le rodeó con los brazos al ver el esfuerzo que hacía por no llorar. Alec jamás había pensado bien de sí mismo- Aunque eso fuera verdad, aunque ese héroe del que hablas existiera de verdad, no podrí haber hecho nada sin su brujo. Fue por él por el que se reveló contra todo lo que conocía y eso se debe a que hasta que no le conoció no tenía nada que ganar y todo que perder.

-Aún después de conocerlo podía perderlo todo.

-Pero no sería nada comparado con lo que ganaría.

-¿Y qué piensa ahora ese héroe? ¿Sigue creyendo que mereció la pena todo el sufrimiento?

-No lo ha dudado ni un segundo en los últimos cinco años. Sabe que fue la mejor decisión de su vida cuando al levantarse lo primero que ve es el cuerpo de su amado abrazado al suyo, cuando se duerme con el rítmico sonido de su corazón, cuando él le besa de una forma que hace que se olvide de su propio nombre, cuando le abraza recordándole que pertenece a esos brazos

Ahora era Magnus el que estaba boquiabierto, que Alec jamás hubiera pensado nada positivo de sí mismo no era nada nuevo y por ello Magnus aprovechaba cualquier momento para recordarle lo maravilloso que era.

Pero Alec también sabía que Magnus aún temía que Alec se arrepintiera de estar con él y por culpa de su timidez era incapaz de decirle lo mucho que le amaba pero esa vez no pensaba perder la oportunidad.

-Le da gracias a Raziel, a Lilith e incluso al mismísimo Lucifer cada vez que sus ojos conectan y ve que para su brujo él no es un nefilim, que no espera que sea insensible y siempre fuerte sino que seca sus lágrimas con pequeños besos. Y no sé qué pensará ese héroe, pero yo puedo asegurarte que mereció la pena porque he encontrado al amor de mi vida, te he encontrado a ti y moriría mil veces para conseguir un simple roce de tus labios.

Alec calló y cuando miró a Magnus a los ojos fue plenamente consciente de todo lo que había dicho y se sonrojó aún en brazos de Magnus, que le besaba la cabeza haciendo que sus lágrimas se perdieran en los negros cabellos de Alec.

Y ambos se olvidaron de la reunión, de héroes y subterráneos, se olvidaron incluso de cómo era respirar lejos del otro y así se tumbaron en la cama, rodeándose con los brazos y robándose besos sin decir ni una palabra más. Porque no hacía falta, toda la escena parecía gritar los "te amo" que sus labios callaban pero que sus corazones tenían grabados a fuego.

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Espero que os haya gustado.

➰nefilim➰