Kanon, el perdido

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Algún tiempo después, tratando de dejar todo esto atrás, el día que esperaba llegó. Poseidón marcó su presencia en la Tierra y llegó la hora de defenderla. Sin dudar, fui a buscarlo y comencé mi sacrificio en el pilar central del Santuario submarino, llamado "Soporte Principal" para que la humanidad no sufra por las tempestades e inundaciones causadas por el dios de los mares. Así fue entonces que las lluvias de todo el mundo empezaron a caer directamente sobre mi cuerpo, mi voluntad ya era inquebrantable.

Horas después, antes de finalizar la guerra contra Poseidón, sucedió algo inédito. Uno de sus súbditos, un General Marino apareció de la nada y me protege del tridente que el mismo Poseidón me había lanzado. Pero mi verdadero asombro fue que este tipo... ¡era idéntico a Saga!

— ¡¿Quién eres tú?!

— Soy Kanon de Géminis. Todo esto ha sucedido por mi absurda ambición. Le ruego por favor señorita Atena que perdone a este imbecil que tiene delante suyo. Todo ha sido planeado por mí, usted tuvo compasión de mí hace años atrás y no merece todo esto.

Kanon queda inconsciente. Estaba un poco perpleja por la situación, así que después de encerrar a Poseidón en mi Ánfora, hice que lo vean unos médicos de la Fundación para que reciba sus primeros auxilios... Luego me dirigí al Santuario a descansar. Mi cuerpo y mente estaban totalmente exhaustos, por lo que mi sueño digamos, fue bastante profundo y largo.

El Santuario está en alerta máxima, algo se está por aproximar.

Saori Kido - Relato de una diosaOnde as histórias ganham vida. Descobre agora