Desconcertada por su expresión, me levanto del sillón y camino con dirección a ella. – Charlotte, ¿Estás bien? – Pregunto una vez que la tengo frente a mí. Ahora puedo ver con más claridad que sus grandes ojos yacen rojos y las lágrimas no cesan en ningún momento.

– E-el joven S-Styles...– Alcanza a murmurar y de pronto, mi piel se eriza por completo. Un frío me recorre e instintivamente un nudo se forma en mi garganta.

– ¿Qué ocurre con Harry? – Requiero saber más de lo poco que me ha dicho, pero puedo verificar que incluso a ella le cuesta hablar.

– L-le han disparado y se encuentra muy grave en el hospital. – Con voz baja y difícil, me informa sobre lo que ella sabe hasta el momento.

De pronto, mi habla abandona mi boca y puedo sentir como esta misma se seca al instante. La realidad cae sobre mí como un balde de agua fría y las sensaciones comienzan a prolongarse por mi interior. Mi corazón bombea con una fuerza impresionante y el hueco antes formado en mi garganta, ahora comienza a ser una completa incomodidad.

Mi vista se torna borrosa y es debido a las lágrimas que comienzan a formarse en mis ojos. Mis piernas tiemblan y estoy segura que en cualquier momento puedo desvanecerme sobre el frío suelo. Trato de articular palabra, ya que necesito más información sobre la poca que se me ha proporcionado.

– ¿Q-qué? ¿Cómo? ¿P-por qué? – Requiero saber, sin percatarme de lo idiota que pudieran llegar a ser estas mismas preguntas. – ¿Qué hospital? – Vuelvo a preguntar y puedo darme cuenta que estoy perdiendo los estribos poco a poco. – Necesito ir al hospital. – Declaro con total firmeza y abandono la sala, dejando a Charlotte detrás de mí. – ¡Roman! – Llamo a la persona que se encarga de trasladarme a lugares siempre que no está Harry. De inmediato, él aparece en el lugar.

– Se encuentran en el hospital Sinaí. – Charlotte explica antes que nada. Roman escucha y de inmediato sale de casa, a lo que rápidamente camino por detrás de él.

***

Ya transcurridos algunos minutos –los cuales me han parecido eternos– llegamos. No me permito esperar a que Roman estacione el auto, ya que en unos segundos me encuentro fuera de este y corriendo hacia la entrada de dicho hospital.

Soy consciente que tengo que esquivar a varias personas en mi camino hacia el interior, pero eso es lo último que me importa en absoluto. Tan pronto mis pies me llevan a recepción, intento recuperar el aire perdido para poder hablar y pedir información.

Tres mujeres que visten filipinas color blanco y las cuales se encuentran dentro del cubículo me miran con asombro, debido al agua que corre por mis ojos y sobre todo, por mi forma de llegar. – ¿Podemos ayudarla en algo? – Pregunta una de ellas. Su voz es tranquila y tenue.

– S-sí – Intento articular palabra, mientras inhalo y exhalo profundamente. Las lágrimas me impiden tener una visión más clara de lo que está a mi alrededor, así que con mis manos intento quitar los abundantes chorros de agua salada que corren por mis mejillas. – H-han traído a un paciente, su nombre es H-Harry Styles. – Con voz entre cortada informo y las tres, continúan viéndome fijamente. – Necesito información de él.

La anterior mujer que inició por pedirme información, cambia su vista a un ordenador que yace en el mismo lugar. – De acuerdo, si me permite un segundo, verificaré si el paciente se encuentra aquí. – Informa y realmente no puedo creer la forma en que tan tranquila me dicen y hacen las cosas.

Mi corazón está por brotar de su lugar, ante la angustia que me hace sentir el no tener ida de qué pasa con Harry. Todo mi cuerpo se encuentra tembloroso, siento una enorme opresión en todo mi pecho, lo cual no me permite permanecer tranquila.

Protect Me ; Harry Styles • EDITANDO • Where stories live. Discover now