~Capitulo 47.

184 9 0
                                    

-¿Y bien?-insistí entonces nerviosa. Notaba como se me vendría todo encima si elegía a Renee.

- ___ ... Esta claro, no hace falta ni que lo preguntes... Te quiero a ti, desde siempre-susurró mirándome a los ojos. Noté mis ojos humedecerse y le abracé con fuerza escondiendo mi rostro contra su cuello. Dios estaba tan feliz, me había escogido a mi. No sé porque se me hacía raro, quiero decir, Renee era más guapa que yo, más buena persona, más perfecta literalmente. 

-¿Cómo me puedes querer después de como te trataba?-preguntó en un susurro recordando el trato que le di antes de todo esto, lo veo tan lejano, pero sé que fue hace medio año o así en verdad. Me dolía recordarlo, nunca me perdonaría por haberle menospreciado, sin saber que en verdad siempre hubo una persona increíble bajo una capa.

-Bueno... El amor siempre estaba por delante y no me rendía...-dijo sonriendo con suavidad.

-Me siento un monstruo por no haberme fijado antes, pero es que eres lo más adorable del mundo... Te amo, eres mi vida-susurré. Él me limpió las lágrimas cuando me separó con suavidad.

-Anda, ve a secarte y vestirte...-me dijo sonriendo. Era cierto, aun tenía el pelo mojado y necesitaba unos pantalones.

-Vale vale, pero te quiero-repetí, él rió y me dio un beso en los labios.

-Y yo... Anda va-me levanté con él y sonreí. Fui directa a la habitación donde estaba antes, me sequé el pelo y me coloqué sus pantalones, esta vez me los até bien a la cintura para que no volvieran a caer. Con su ayuda, metí la ropa a lavar y aguardé mientras se lavaba para luego sacar la ropa.

Me senté en la encimera mientras él sacaba unos lacitos para comer. Sonreí y empecé a comer con él y con chocolate caliente, los dos sentados en la mesa con los taburetes de la cocina.

-Por cierto...-dije después de tragar un trozo de lacito.

-¿Si?

-¿Vas a volver?-pregunté tranquilamente relamiéndome el chocolate sobrante de mi labio.

-¿Cómo que volver?-preguntó frunciendo el ceño sin comprender.

-Si... Si vas a volver, a casa... Quiero decir, conmigo. Irte de Irlanda de nuevo...-especifiqué mirándole. Él se quedó en silencio mirando al frente con la taza en su mano.

-Yo...

-Pensaba que como se ha arreglado todo... Podríamos volver juntos y tal... Empezar de nuevo o por lo menos donde lo dejamos-susurré mirándole con esperanza. Le dediqué entonces una sonrisa, pero se borró despacio al ver que él estaba serio.

-Les costó mucho a mis padres volver y perder toda la vida que nos dejamos en España, volver a Irlanda ha sido empezar de cero y... Sería muy difícil que todo volviera a ser como antes ___ ...-me confesó, yo torcí el gesto. ¿Cómo?

-¿Por... Por qué?-pregunté con voz temblorosa.

-No es tan fácil, la mudanza, el coste del avión, volver a colocar todo en su sitio...-empezó a decir con desganada mirando hacía otro lado.

-Cierto...-susurré con pesar mirando hacía la mesa- ha sido una estupidez, solo pensaba en mi misma... Lo siento-dije avergonzada, él simplemente se quedó en silencio mirando la taza. No dijo nada y eso me dolía más, que ni si quiera intentara convencer a sus padres para volver, que lo hiciera por mi aunque fuera- pensé que de verdad te importaba...

-Y me importas-dijo mirándome rápidamente. Yo le desvié la mirada molesta.

-¿Entonces por qué si quiera lo intentas? Sé que es mucho coste, lo sé y siento mucho de verdad que te tuvieras que ir y todo este lío por una confusión pero... Es que podrías poner aunque fuera ganas ¿no?-empecé a irritarme y fruncí mis cejas, si fruncía más estas acabarían uniendose.

-No es por mi _____ , es por mis padres.-dijo serio Niall y con voz autoritaria.

-Si ya ¿y si también es por Renee? ¿Eh?-le espeté alzando la cabeza y encarándole seria.

-Por favor _____ , no te comportes como una niña pequeña.-dijo con desgana dando la vuelta a los ojos y relajando sus músculos, ya que se había puesto algo tenso.

-¿Perdona?-pregunté ofendida y molesta, me levanté del taburete- ¿sabes? Veo que esto ha sido una equivocación, no sé ni para que he venido, pensaba que podría volver a verte y conseguir que volviéramos juntos, pero solo te importa tu vida aquí con Renee y tus amigos Irlandeses sin pensar en tus amigos Españoles-me quejé caminando. Él se incorporó y tiró de mi brazo, se encaró a mi molesto.

-¿No te ves? ¿Acaso no ves que la única caprichosa e infantil aquí eres tú? ¿Acaso crees que puedes tenerlo todo? No, no se puede ____. Tú eres la que quiere que cambie toda mi vida por ti. Te amo, en serio, pero no me gustaría involucrar a mi familia ¿sabes que contentos están de poder visitar a mis familiares? Mis padres están encantados de volver a estar en su país de nuevo, todo es como siempre-me soltó entonces. Noté como las lágrimas nublaban mi vista, nunca Niall me había gritado ni soltado todo eso, me intenté liberar de él ya que me estaba apretando el brazo. Entonces se dio cuenta y aflojó la mano, pero no me soltó- lo... Lo siento ____ -susurró mientras se acercaba a mi para abrazarme, pero retrocedí hasta chocar con una pared mientras lloraba- no quería decirte esto yo... Son los nervios, no me esperaba que volvieras y esto es demasiada presión para mi...-siguió diciendo mientras que me intentaba abrazar, le empujé hacía atrás.

-No, no, me lo has dejado bien claro. ¡No me quieres en tu vida! ¡No soy tan importante como para luchar por mi!-exclamé llorando mientras me intentaba escapar, pero me encerró contra la pared.

-No, por favor, no digas eso, te quiero, de verdad, te amo con locura y eres mi vida entera, pero yo... Piensa en mis padres y...-tartamudeó sin saber que más decir.

-No Niall, me he dado cuenta que no soy tan importante, sé feliz con Renee, no volveré a molestarte nunca más-solté mientras me tapaba la cara queriendo dejar de llorar. Cogió mis muñecas para apartar las manos de mi cara, me agarró de la cintura con un brazo y me pegó a él, le miré a los ojos dejando caer mis brazos. Me estaba haciendo daño contra la pared, esto de que tuviera tanta autoridad sobre mi, ni lo había notado antes.

- _____ , por favor no llores, odio verte llorar... -susurró mientras me acariciaba el pelo, fue a besarme en los labios, pero yo reaccioné como nunca hubiera pensado que llegaría a reaccionar con Niall cuando se acercaba a mi para besarme. Le pegué una bofetada en la cara y le aparté de un empujón.

-¡Tus palabras no te importan una mierda!-exploté entonces frunciendo el ceño- ¿sabes lo que vi en mi móvil? ¿eh? ¿en recuperar mensajes? Cómo alguien me avisaba de que tú, TÚ me mentiste... ¿Sabes? Por ser un mensaje de Liam no me lo hubiera creído, hubiera pensado que lo que quería era destrozarme la vida de nuevo... Pero que fueras tú y lo borraras...-vi como fue a decir algo para cortarme y negar mis palabras, le fusilé con la mirada- ¡oh venga! no me digas que TÚ no lo hiciste, estábamos los dos solos, no soy tan estúpida ¿sabes?-exclamé con lágrimas mientras le plantaba cara- ¡tú no me esperaste! ¡lo primero que hiciste fue liarte con esa guarra de Carol! ¡Eres un mentiroso! ¡Tú no esperaste por mi! ¡A mis espaldas ya salías con ella y os pegabais el lote sin más hasta que te diste cuenta que yo también caería! ¿No ves? Cambiar por fuera te hizo cambiar por dentro, te creías mucho mejor y como ligabas con las chicas aprovechaste... Y yo como tonta te esperé, cuando podría haberme liado perfectamente con Liam... ¡Eres un falso Niall Horan!-exclamé mientras corría hacía la puerta, él me siguió por detrás maldiciendo que me hubiera enterado.

-¡ ____ !-gritó, pero le ignoré. Salí por la puerta corriendo con la ropa de Niall puesta y corrí por las calles con lágrimas en los ojos, oía como me llamaba gritando mi nombre. Pero tarde, le pude perder de vista.

Seguí corriendo por las calles, sola y sin nadie... Me sentía sucia, engañada, llena de mentiras... Cuando por fin llegué al hotel de milagro, corrí a mi cuarto, no hice caso a las llamadas del móvil, unas eran de Niall y otras de mis padres, no contesté a nadie. Cerré la puerta de mi cuarto y me dejé resbalar contra la puerta. El cuerpo se me retorcía mientras que las lágrimas corrían por mis mejillas de forma salvaje y sin descontrol. Me desplomé sentada en el suelo con las piernas flexionadas contra el pecho. Respiré hondo por la nariz, pero no podía respirar bien.

¿Acaso llegué a importarle a alguien? Estaba harta de preguntarme siempre lo mismo al final y de llorar por gente que no lo merece. Esta claro, nunca le he importado a nadie.

No es un para siempre (One Direction)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora