Nadie Como Nosotros.

Capitulo 03: "Solo es un beso".

En lo que resto de noche Matt no despega sus ojos de mi haciéndome sonrojar podía sentir el ardor en mis mejillas cuando me sonreía esa maldita dentadura tan perfecta ser tan guapo debería ser ilegal, todas las chicas en el lugar al parecer pensaban lo mismo que yo.

Varias de ellas no le quitaban los ojos de encima tenia el valor hasta de invitarlo a bailar él obviamente no se negaba mi subconsciente gruñe por los celos ¿Celos? ¿Acabo de decir celos? Si apenas tengo unas cuantas horas conociéndolo debo estar loca, no puedo negar que sentí una atracción por él al momento de conocerlo pero no es motivo para que me sienta de esta forma. Bebo de mi Martini, Amber y Tobías están hablando de algo pero no les presto atención mis cinco sentidos están en Matt.

Veo que una rubia se le acerca, le dice algo en el oído tocando su brazo de forma cariñosa y él se ríe encantado. Ese malnacido hace una hora estaba coqueteándome ahora lo hace con todas las mujeres de la fiesta definitivamente todos los hombres son iguales cortados por el mismo patrón, unos cerdos ninfómanos que se calientan con un par de senos y una cara bonita de pronto siento ganas de vomitar y mareos tal vez debería dejar de beber tantos Martini.

Alzo de nuevo la mirada y Matt esta mirándome fijamente sonrojando de nuevo, maldita sea, tengo que dejar de hacer eso no quiero que se de cuenta que me ha afectado verlo coqueteando con todas las mujeres del lugar.

Dejo mi copa en la mesa, me levanto del sofá.

- “Es hora de marcharme”- Les digo a Amber y Tobías que también se levantan.

- “Aun es temprano”- Amber me mira con el ceño fruncido.

- “Mañana tengo cosas que hacer y debo madrugar”- le digo esperanzada de que me crea.

- “No sabes mentir”- dice cruzándose de brazos- “Debes divertirte mas, Keira”.

- “Eso es otra forma de llamarme aburrida”- hago una mueca, tomo mi bolso colocándolo en mi hombro- “Me marcho, Amber”.

- “Como quieras”- me dice evidentemente enojada pero se que se le pasara cuando nos veamos mañana.

- “Excelente fiesta, Toby… Espero que sigas pasando un lindo cumpleaños”- Abrazo a Tobías y él me da un sonoro beso en la mejilla.

- “Me alegra que vinieras, Keira. Cuídate”.

- “Te llamo mas tarde”- me dice Amber abrazándome- “Te quiero, tonta”.

- “También te quiero, tonta”- Rompemos el abrazo-“Adiós chicos”.

Me escabullo entre la gente esperando a que Matt no me haya visto huir no soportaba mas viéndolo con esas mujeres y siéndome con una tonta creyendo que alguien como él se pudiera fijar en mi, bufeo enojada mientras me acerco a mi auto estacionado en la otra acera me siento mareada tanto así que tropezó cayendo aparatosamente en el suelo golpeando mis rodillas con el duro asfalto.

- “Mierda” – mascullo adolorida.

Unos brazos me ayudan a levantarme del suelo, el mareo continua me sujeto a los hombros de la persona que me ha socorrido de pronto una fragancia muy exquisita y muy familiar inunda mis fosas nasales.

- “¿Estas bien?”- Esa voz ronca y seductora que me ha estado volviendo loca toda la noche, alzo la mirada me encuentro con los penetrantes ojos grises de Matt Bomer sujetándome entre sus brazos para que no caiga- “¿Estas bien, Keira?”- Repite pero ahora con preocupación.

Trato de recomponerme trato de zafarme de sus brazos pero él rehúsa a soltarme.

- “Si, lo estoy. Puedes soltarme”- Le pido, frunce el ceño pero me suelta.