Capítulo 11

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Lauren POV.

Llegué a mi casa después de haber dejado a Camila en la suya. Este día no podía ser más perfecto, la chica de ojos chocolate y yo nos habíamos besado después de pasar un gran día juntas.

Tenía una sonrisa plasmada en mi rostro cuando entré a mi casa.

— ¿A qué se debe esa sonrisa? —mi madre dijo cuando entré al salón.

— Simplemente ha sido un buen día.

— Me alegra verte feliz —dijo después de que me senté a su lado en el sofá.

— Esta noche saldré de fiesta —le informé.

— ¿Irá Camila? —cuestionó.

— Sí —afirmé —. Por ella vamos a salir, queremos celebrar que tenemos una nueva amiga.

— Y también lo hacéis porque queréis salir a beber.

— Eso siempre —dije con una sonrisa.

— ¿A qué hora volverás? —preguntó.

— Quizás más temprano, no creo que esta noche me acueste con alguna chica —la única chica que ahora mismo me interesa es Camila.

— Eso es raro en ti —dijo mirándome con el ceño fruncido.

— Es la noche de Camila, ella debe ser el único centro de atención —me encogí de hombros para no darle importancia.

— ¿Te gusta Camila? —preguntó con una sonrisa.

— No me gusta —negué rápidamente.

— ¿Qué hiciste hoy con ella? —hizo otra pregunta.

— Desayunamos, le enseñé la cuidad y después comimos en un restaurante chino —le conté.

— ¿Y luego?

— ¿Me estás interrogando o qué? —la miré fingiendo molestia.

— Solo me interesa saber lo que hace mi hija cuando no está en casa —dijo haciendo un gesto indiferente con la mano.

— Dimos otro paseo y por último la llevé a la playa —claramente omití lo del beso, no quería más preguntas.

— ¿Era una cita? —no iba a parar al parecer.

— No —dije —. Me voy a la cama, dormiré un poco para estar descansada.

Salí casi corriendo escaleras arriba, mi madre podía ser muy pesada si se lo proponía.

Me acosté en la cama boca arriba observando el techo.

Hoy Camila había provocado cosas que ninguna chica había conseguido antes. No sé describir lo que pasa con ella, porque sinceramente no sé lo que siento.

Le he negado a mi madre que no me gusta la chica de ojos chocolate, pero creo que he mentido.

¿Me gusta Camila? Puede ser. Nunca me ha gustado una chica, normalmente me acuesto con ellas una noche y ni me molesto en recordar sus nombres.

Seguro es algo pasajero, quizás por el hecho de que no intenta coquetear conmigo todo el tiempo y me hace querer tratarla diferente. Si, tiene que ser eso, nada más.

Me quité los zapatos y mi chaqueta de cuero. Me volví a tumbar en la cama, cerré los ojos e intenté conciliar el sueño.

***

— ¡Lauren! —gritó alguien y me desperté sobresaltada.

— No grites, menudo susto me has dado —dije cuando visualicé a mi hermana menor en la puerta de mi habitación.

Loving You Despite The Obstacles | CAMRENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora