Blanco de lente

Milagro ¿o planeado?

Mirando al horizonte dramáticamente, seguía preguntándose ¿Cómo era posible? Había escuchado muchas veces de los milagros, es más, ¡creía en ellos! Pero a pesar de eso no estaba seguro de que existieran aquel tipo de los que cambian extraordinariamente los hechos de un día a otro.

Aun recordaba el modo en que aquella arpía le había arrojado su solicitud en las manos, negando repetidas veces con la cabeza y diciéndole con esa voz intolerable que estaba "TOTALMENTE" rechazada e "INDUDABLEMENTE" fuera de negociación por sus "DESHONROSAS" notas en la materia.

¡A la jodida la materia! Ni siquiera le interesaba la psicología social o lo que fuera que impartiera esa horrible mujer. Sin embargo cuando ya estaba resignándose a que perdería la oportunidad de dedicar más tiempo a una de sus pasiones, el director le llamó a su oficina para aclarar un punto importante.

—Joven Lee, estoy enterado que pidió un permiso para cortar sus últimas horas de clase con la señorita Chang, para una actividad extracurricular... pero ha dicho que, ¿le fue rechazada?

—S-si señor— masculló, un tanto nervioso de verse sentado frente a ese escritorio de una autoridad que esparcía el miedo por todo el instituto.

—Pues quiero decirle, que se ha cometido un error.

Donghae cerró fuertemente sus ojos, pero al reaccionar de lo dicho, los abrió estupefacto. —¿Cómo?

—Resulta que en sus archivos— habló sacando una carpeta. –Esta como solicitud aceptada ¿lo ve?

El azabache tomó la hoja que le ofrecía y vio la pulcra caligrafía al final que efectivamente decía "Aceptado" <<Está no pertenece a la señora Chang>> pensó internamente.

—Eso quiere decir que a partir de ahora su clase de psicología social se ve suspendida y cambiada por baile y... ¿participación en el club de música?

—Espere ¿¡Que!? Yo no pedí...

El director le interrumpió abruptamente –Aquí lo específica, y papel habla Lee Donghae. Además no estaría mal que uno más se uniera a ese club abandonado, y solo serán dos días a la semana.

-¿Qué hay de la materia? ¿Mis notas?

-Esta aprobada, tienes los puntos necesarios... exactos y justos pero necesarios.

Donghae formo una "O" en su boca de impresión. –Pase- repitió alucinando -¡Yo pase con esa arpía!

-¿¡Como a dicho!?

Soltando una risita, volvió a celebrar su victoria. No sabía cómo fue posible, pero tampoco era tanta su curiosidad para indagar, asi que se quedaría con lo que ya había ganado y no protestaría nada.

-¿Qué te tiene tan feliz?- pregunto una voz a su lado.

-¡Que no volveré a pisar ese salón de clases, con esa mujer de piedra!

-¿Hablas de Chang? ¿Pero que no te había escupido en la cara su rechazo?

Donghae miro a Yunho y puso su expresión juguetona. –En realidad la suerte esta de mi lado. Hoy me ha dicho el Director Jung que la tengo aprobada y además puedo ocupar la sala de baile en su tiempo ¡¿Puedes creerlo!?

El castaño elevo ambas cejas y de pronto se encontraron celebrando ambos. -¡Chico afortunado! ¡Yaaah, te tengo envidia! ¿Pero cómo es posible? Tú no eras especialmente bueno.

El azabache encogió los hombros con indiferencia y chasqueo la lengua. –Da igual. Pero.... También tengo que estar en el club de música.

-¿Club de música? ¿Acaso eso existe?- Donghae golpeo su hombro jugando un poco. –Hablo en serio, no he escuchado que alguien pertenezca ahí.

-Ni yo- suspiro -Pero supongo que veré que hacer.

Yunho guardo silencio unos segundos, viendo también al horizonte como si ambos estuvieran dentro de un filme.

-Oh, y me han devuelto mi horario. Dijo la secretaria que apareció en los papeles.

-Pensé que si lo perdías, ya no había devoluciones.

-Asi es.

De nuevo un corto y cómodo silencio.

-Pienso que hay que ir por un par de golosinas. ¿Tú que dices?

-No me gustan los dulces.

-Por eso no aprecias lo dulce que soy ¿verdad?

Donghae volvió a golpearlo pero esta vez aplicando más fuerza y llegando a empujarlo. Al poco rato se levantaron del suelo dispuesto a ir al comedor, pero el azabache experimento una sensación extraña...

-¿Qué pasa Hae?

El aludido miro sobre su hombro discretamente, con una corriente escalofriante recorriendo su columna. A unos metros de distancia le pareció ver un flash que llego a confundirse con los rayos del sol, pero su cabeza le decía que más bien provenían de....

-¡Vamos Lee Donghae que hay cientos de estudiantes en este lugar y podrán acabarse lo mejor de la comida! ¡Anda, rápido, rápido!

El menor se giró aturdido y siguió a su amigo, aun confundido por lo que sus ojos creyeron ver... ¿Había sido un truco de su mente? ¿O realmente había alguien observándolos?

<<No seas paranoico>>

Rascándose la nuca se dijo que no importaba, además la luz deslumbrante del farol del mundo no le había dejado saber si estaba en lo correcto en sus suposiciones, y Donghae no era muy quisquillosa en asuntos que podían causarle problemas.

Nos vemos pronto^^

Dejen un comentario de cómo es que va la historia. Tengan una excelente semana.

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