Promise. ⇨Park ChanYeol⇦

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—¡Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti! —SeHun y yo saltábamos encima de ChanYeol, claro sin pisarlo.

El tiempo pasó rápido, muy rápido para mi gusto. Cuando me quise dar cuenta, ya era 27 de noviembre. Y estábamos en Jeju.
Me había despertado hace un rato, aún estaba en pijama. Sí, había estado caminando por los pasillos del hotel con nada más y nada menos que una sudadera gris, un short de tela negro y unos calcetines blancos.

—Tiene el sueño muy pesado. —SeHun frunció los labios. Nos miramos unos segundos y luego una sonrisa maliciosa se formó en nuestros labios.—. Tú el pie izquierdo y yo el derecho.

—Ni se les ocurra jalarme los pies. —Su voz rasposa nos hizo asustarnos.—. Mmm...es sábado y ustedes dos me están despertando a las diez de la mañana.

—Estamos despiertos desde las siete, así que no jodas hyung. —SeHun se "escondió" detrás de mi cuando ChanYeol se sentó en la cama. Pasó su mano por sus ojos y luego nos miró. —

—Feliz cumpleaños, ChanYeol. —Dijimos a la vez.

—Gracias.

—Bueno, me retiro, tengo que bañarme, será un día muy largo. Nos vemos. —Se fue rápido de la habitación. Era un chico extraño.

Cuando volví mi vista a ChanYeol, noté como me miraba de arriba a abajo, antes de morderse el labio.

—¿Estuviste corriendo por los pasillos así vestida? —Asentí con una sonrisa inocente.—. ¿Ningún empleado del hotel te vio?

—¿Eso importa? Quién va a querer mirar más de lo debido si traía a SeHun conmigo.

—Es un buen punto, ven aquí. —Extendió sus brazos.

—No joven Park, tengo estrictas ordenes de su madre de hacerme cargo de usted hasta el mediodía. Así que puedes pasar a lavarte los dientes.

—¿Qué hay en la mochila? —Se bajó de la cama y se colocó frente a mí, obligatoriamente tuve que levantar la cabeza para verlo.

—Yo ya me bañé así que...solo tengo que cambiarme de ropa. Ve a lavarte, después me puedes besar. —Acaricié su mejilla y él sonrió para luego dirigirse al baño.

※※※

—¿Y tu novio, Kim? —La inconfundible voz de Baek llegó a mis oídos.

—Esta con SeHun, JongDae y SuHo. Recuerda que ellos también vinieron. ¿Has hablado con HyeRan? —Él asintió.—. ¿Qué te dijo?

—Que me entendía. Y que esperaría lo necesario por mí. Nunca me sentí tan tranquilo y feliz, cariño. ¿A qué hora es la cena?

—Seis treinta. Tenemos cuatro horas por delante. Yo aún no le he dicho que me aceptaron, ni siquiera a sus padres, mi tío YongMin fue el que recogió la carta. ¿Qué dijo tu madre?

—Empezó a llorar, al igual que mi padrastro. Tae se puso triste también, durmió conmigo esa noche. La última vez que durmió conmigo él tenía nueve.

—Que lindos. —Reí y el frunció los labios.

—¿Y Kookie? ¿Ya le dijiste? No lo ves desde su cumpleaños. —JungKook había cumplido quince años el primero de septiembre, pase parte de la mañana y de la tarde con él. Hubiera ido a su fiesta, pero no quería ver a mi madre.

—Hablé con él, también con su papá, aunque de por sí, es mi padrastro. Les comenté lo de la universidad y lo tomaron bien. También el señor Jeon dijo que podía contar con él para cualquier cosa. El papá de ChanYeol sospecha algo, pero sabe que hablaré cuando esté preparada.

—¿Qué fecha decía la carta?

—¿Uhm? Creo que veintiocho de marzo. Dime que ya hablas el idioma, no pienso servirte de traductora para toda la vida.

—¿Por qué no? Eres buena con el inglés. Tú papá te hablaba también en ingles cuando estábamos en China.

—No lo hacía siempre.

—Pero si lo suficiente para que pudieras hablarlo fluidamente en solo tres años. —Iba a responderle, pero decidí guardar mis opiniones. Solo me limité a reír.

※※※

—¿Vemos una película cuando subamos? —Preguntó ChanYeol en mi oído antes de girarme. Quien diría que este chico supiera bailar, aunque sea un vals.

Eran como las nueve de la noche, había varias parejas en el centro de la pista. Entre ellos, JongIn y KyungSoo, Baek y HyeRan, ya que era amiga de ChanYeol, estaban en el mismo instituto solo que en salones diferentes. También había varios amigos de él.

—Por favor dime que solo veremos la película. —Él se echó a reír.

—No todos los días te imagino o te quiero debajo o encima mío gimiendo mi nombre.

—Idiota.

—Tu idiota. —Ambos sonreímos.

※※※

—Quiero a Baymax. —Murmuré y me llevé un puñado de palomitas a la boca.

—Quieres todo lo que sea bonito en una película.

—¿Notaste que Tadashi se parece a JongDae? Le diré Tadashi de ahora en adelante y si reclama, le pego. ¿Recuerdas cuando de niña te mordía el hombro o los cachetes? —El asintió—. Así demostraba lo mucho que te quería.

—¿Por qué te comportas como una niña cuando vemos una película de Disney?

—Aún soy una niña, pero en el cuerpo de una chica de dieciocho años. —Hice un leve puchero.

—Cuando haces eso, tienes un leve parecido a BaekHyun. ¿Nunca les han preguntado si no son hermanos?

—Ahora que lo mencionas, sí. Lo decían por nuestras bocas son algo similares. De labios delgados pero bonitos. Ahora, haz silencio. Quiero ver que hace Hiro.

—¿Hablaras conmigo mañana sobre la universidad?

—¿Viste la carta? Olvide que la había dejado en mi mesita. Hablaremos de eso mañana. —Besé su quijada y me acurruqué más contra él.

—¿Lo prometes? —Murmuró.

—Lo prometo.